Capítulo 9

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Maratón 1/2

Los días pasaron rápido y Kara ya estaba mejor, así que a veces ayudaba a su equipo con alguna emergencia. Ya se acercaba el parto de Imra, estaba muy emocionada y era el motivo por el cual estaba un poco más animada que antes.

Sam iba de vez en cuando a visitar a Lena, ya que la ojiverde a veces trabajaba de noche porque quería aprovechar que aún podía hacerlo porque después iba a hacer casi imposible.

Un día, la castaña vio muy nerviosa a su amiga que no dejaba de moverse en su asiento, estaban en la oficina de Lena y ya eran casi las ocho de la noche. La ojiverde quería hacerle saber su decisión porque también necesitaría su ayuda para planear como hacerle saber a Kara de su estado sin que muera de la impresión.

- Ya dime o vas a hacer que muerda mis uñas porque tu nerviosismo se me está pegando.

Lena sonrió y soltó un suspiro.

- Le diré a Kara que espero un hijo suyo.

La castaña abrió los ojos como platos y mantuvo su boca semi abierta sin poder responder ya que, estaba tratando de asimilar lo que su amiga le acababa de decir.

- ¿Qué...? ¿Qué dijiste?- Preguntó apenas.- Creo que esta semana me entró cenizas al oído... no te oí bien ¿O el humo me afectó?

Lena soltó un risa nerviosa.

- Voy a decirle a Kara...

- ¡Oh por Dios!- Dijo levantándose de su silla haciendo que Lena se sorprendiera por su reacción. Lo que la ojiverde no sabía es que Kara tenía decidido separarse de Imra. Pensaba que al final se iba a quedar con su esposa por el bebé. Incluso varias veces pensó que la rubia simplemente le hizo falsas promesas, que a pesar que le demostraba su amor, no sería capaz de romper un matrimonio de varios años.- ¡No lo puedo creer Lena! Oh por Dios.- Entonces la castaña tenía muchas esperanzas que sus amigas se reconcilien, es que, ambas habían sufrido mucho por estos largos meses.

- Cálmate Sam que te puede agarrar un infarto.- Decía divertida.

- Es que no es para menos pendeja. ¿Y cómo harás para decirle? Cuando esa mujer se entere es capaz de sufrir un infarto.

La sonrisa de Lena iba desapareciendo porque también había la posibilidad de Kara se enojara con ella por haber ocultado aquello por mucho tiempo.

- No lo sé, por eso necesito tu ayuda. Las ansias y la preocupación no me dejan pensar con claridad.

La castaña volvió a sentarse.

- Yo creo que debo prepararla mentalmente.- Sugirió Sam.

- ¿Y cómo piensas hacer eso?

- Hablar con ella de ti, sacar el tema por casualidad y hablarlo como algo hipotético.

- ¿Crees que eso funcione?

- Bueno... Por lo menos sabré qué es lo que piensa si tú le dices que esperas un hijo suyo.

- No lo sé Sam, quizás nos dé respuestas equivocadas, porque es fácil imaginar y otra cosa ver la realidad.

- Mmm tienes razón. ¿Entonces qué?- Se puso a pensar nuevamente.- A ver, cuando uno va a tener sexo anal...

- ¡Sam! ¿Qué demonios estás diciendo? ¿Qué tiene que ver con esto?

- Espera que tengo un punto, joder. Tranquila. Como decía... Uno no lo hace de buenas a primeras, le pones vaselina o aceite, lo preparas para...

- Al punto Sam. ¡Por Dios!- La ojiverde se cubrió el rostro con ambas manos.

Contra Llamas 2ª ParteWhere stories live. Discover now