Sinopsis:
Wei Qian es un niño que muy pronto se hace responsable de su hermana pequeña, Xiaobao, y de Wei Zhiyuan, un niño que encontró abandonado en la calle y decidió adoptar, criándolo como si fuera su propio hermano. Viviendo una vida de pérdida...
A veces, esos destinos parecen milagrosos, pero si llegas a la raíz del problema, verás que en realidad están hechos por el hombre.
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A veces, esos destinos parecen milagrosos, pero si llegas a la raíz del problema, verás que en realidad están hechos por el hombre.
Durante este tiempo, Wei Qian comenzó a llegar a casa cada vez más tarde, parecía estar pasándoselo en grande con Le Ge.
En el pasado, Wei Qian podía dejar pasar estas cosas, pero después de la muerte de Ma Zi, en el fondo de su corazón sentía que no podía vivir tranquilamente mientras Le Ge siguiera respirando. Por supuesto, tuvo que ocultarlo y permaneció en silencio al lado de Le Ge para ganar su confianza.
Mientras eso pasaba, la atmósfera en casa se volvió muy extraña, Wei Qian en verdad, no se apresuraba a volver a casa.
El extraño ambiente duró hasta marzo de ese año, cuando Wei Zhiyuan y Xiao Bao empezaron a estudiar de nuevo.
Cierto día de marzo en el calendario gregoriano, 2 de febrero en el calendario antiguo, "el dragón de invierno levantó la cabeza"*. El final de la primavera de ese año fue extremadamente frío. Despidiendo la primavera, hubo una fuerte nevada, que casi sepultó toda la ciudad.
[*significa que empezó a nevar](1)
Como de costumbre, Wei Qian estaba con Le Ge fuera, pero parecía un poco inquieto. No dejaba de mirar el smartphone que Le Ge le había dado. Mientras bebía, sonó el teléfono. Después de contestar, la expresión de Wei Qian cambió.
Le Ge giró la cabeza, lo miró y preguntó:
─¿Qué pasa?
Wei Qian dijo en voz baja:
─Le Ge, mi hermana está enferma. Los niños con fiebre alta son propensos a enfermar, yo... Quiero ir a verla.
Le Ge parecía un poco disgustado, pero después de todo, trató de "salvar cara"*, así que preguntó casualmente:
─¿A qué persona debo llamar para que te sustituya?
[*Ésta analogía tiene varios significados según el contexto. En éste caso, él hace la siguiente pregunta para que su disgusto no sea muy perceptible y guardar apariencia.]
Wei Qian se apresuró a decir:
─No hace falta, volveré después de ir a casa, solo iré y echaré un vistazo.
Después de que Wei Qian terminó de hablar, se levantó, se disculpó con todo el mundo, y antes de que nadie pudiera reaccionar, abrió una botella de vino con la esquina de la mesa y vertió el contenido en su garganta allí mismo, lo cual fue suficiente para animar al "Hermano Le."
