Los poetas malditos nunca mueren IV

"¿Quién inventó el amor?"

Gritar era tu rutina favorita y ya no podía escuchar mi propia voz, no volvimos a sentir lo mismo después de una noche inolvidable, para mal. Visitas mi techo, pero sigues sin poder mirarme a los ojos, me cubres de flores, pero sigues sin ofrecer una disculpa sincera, marchitas las flores, parece que sólo puedes hacer eso bien. ¿Quién inventó el amor?, ¿qué ocurrió con todo esto?, ¿qué ocurrió con lo nuestro?, ¿por qué no hubo otro último beso?, preguntas que sólo tú puedes responder y que yo habría podido escuchar. Es difícil ser honesto, desearía que lo hubieras sido antes de haberme dejado en el suelo húmedo, bajo el canto de las aves, bajo tus flores marchitas, bajo lamentos y risas. Nunca supiste apagar el fuego, los fósforos de tu bolsillo siempre intentaban jugar, sentimientos sintiendo las llamas, un corazón tan débil como el mío sentía el calor, no era pasión, era dolor, miedo, temor, odio, furia, era una chica quemándose con el fuego que nunca supiste apagar.