Tras la muerte de su madre, Daiana junto a su padre y hermanos deciden dejar su vida en México para poder empezar una nueva en Canadá.
Al mudarse ella le promete a su abuela volver a enamorarse, pero otra parte de ella jura que no se enamoraría de...
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La noche no había salido como hubiera querido, Daiana y yo tuvimos un pequeño desacuerdo y por último terminé peleando con un idiota que toco a mi novia.
La verdad es que el comentario de Cristina estuvo muy fuera de lugar y yo sabía que le tenía que contar a Daiana sobre lo que paso. Solo que no fui tan valiente en ese momento pero lo haría y sería esta noche. Odio que ella no me hable cuando esta molesta, aunque sea para no lastimarme con lo que me diga.
Por lo mientras en que ella estaba con sus hermanos disfrutando de la fiesta yo me encontraba con Luka y Ryan, desde que Daiana se fue no le quite mis ojos de ella. Era una manera de protegerla aunque no estuviera conmigo.
La vi caminando para mi dirección, mi corazón latía demasiado y solo por ella, ese efecto era el que siempre causaba en mi, tenía el control de mí mejor dicho. Se veía tan hermosa en ese disfraz,tan perfecta. Mi novia era increíble.
Me encanta la palabra "mi novia" es algo que causa mariposas y nervios cuando la digo, una sensación inexplicable. Era lo mejor que me estaba pasando.
Antes de que pudiera llegar a mi lugar un tipo universitario se le acercó, pero mi Daiana se veía muy incomoda y enojada, mientras que el chico tenía una sonrisa triunfante. Sabía que me tenía que llegar a ella lo más rápido posible.
- Qué esta pasando aquí. -dije llegando con Daiana -Quién es el Daiana?.
-Eres su novio?. -hablo el universitario con un tono muy irritante para mi.
-Sí, si soy su novio.
Este imbecil, tarado, estúpido y muchos insultos más, me estaba quitando mi paciencia.
- Tu novia tiene un grandioso trasero.
El grandioso imbecil depravado se la quedo viendo de una manera nada bonita.
-Que carajos dijiste? -pregunte demasiado enojado. -Daiana dime que no te toco.
Esperaba con todo mi corazón que dijera que no, pero su mirada y silencio lamentablemente me lo confirmó.
- La tocaste imbecil? -este tipo no iba a salir intacto de esta fiesta.
- Sí, cualquiera lo haría con ese gran culo. -tenía una estúpida sonrisa en su cara. Que idiota.
- Mi vida, ve a otro lado. -volteé a mi Daiana para que no viera como le pegaba, una vez permití que me viera pelear dos ya no. No quería que viera nada.
Una vez ella ya no viera nada, le solte un puñetazo en la nariz al imbecil, el me lo devolvió lo cual lo pude esquivar bastante bien. En pocos segundos estaba discutiendo con el.
- Eso fue por tocarla idiota.
- Tus padres no te enseñaron a ser compartido?. -su nariz sangraba y lo único que hacía el idiota era tener una sonrisa en su estúpido rostro.
