Capítulo XXVIII

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A través de las enormes bocinas sonaba Amour Plastique de Videoclub.

Baile, bebí y me divertí tanto que se sentía irreal, sentí como las pequeñas gotas de agua por haber nadado hacía apenas un rato caían por mi cuerpo, mientras el alcohol y el sol de Los Ángeles, hacían el más delicioso efecto en aquella playa poco concurrida.

Alex se acercó a mí y me beso la mejilla, me acerco a él tomándome de la cintura con una de sus manos ya que en la otra ocupaba lugar una cerveza.

-Amo esa canción. Esa canción es lo equivalente a una poción de amor, o al menos eso me imagino yo- Comente entre risas- Cuando la escucho me siento como en una de esas escenas en las películas dónde la pareja principal está en el punto máximo de su amor y aparecen esos pequeños montajes de sus momentos juntos.

Cerré los ojos sujetándome del cuello de mi compañero, disfrutando uno de los momentos más felices de mi vida, con la maravillosa canción de fondo, junto a las risas de mis amigos y las olas chocando con la orilla.

-Yo siento eso exactamente cuando estoy contigo- Abrí de nuevo los ojos mirando el iris azul de él- Siempre me siento como si estuviera en una canción de amor contigo.

La más sincera y dulce de mis sonrisas se abrió paso por mi rostro al escuchar las palabras de Alex.

-Así es como se siente estar enamorado, como si estuvieras en una canción francesa de amor- Toque la punta de la nariz de Alex- Tu amigo mío, estás enamorado.

De inmediato desapreció la sonrisa que tenía él chico plasmada en su cara. Lo mire confusa, no había dicho eso con afán de molestarlo ni mucho menos.

Analizó mis palabras unos segundos, como si se estuviera asegurando de que no le estuviera mintiendo.

-Me alegra que sea de ti- Beso de nuevo mi mejilla

Un cosquilleo se instaló en mi estómago y mi espina dorsal, aunque estoy segura que sentí aquella electricidad por cada parte de mi cuerpo.

-También me alegra- Imite su acción y bese su mejilla.

Después de un rato volvimos a nadar, abracé a Jake por la espalda. Lisa y Alex jugaban con el agua.

-Nunca lo había visto así- Jake y yo mirábamos a los chicos- Conozco a Alex desde...- La verdad ha pasado tanto que no recuerdo hace cuando que lo conozco, pero puedo asegurar que nunca lo había visto feliz.

Me quedé en silencio.

-Aunque yo tampoco me había sentido así nunca. Toda mi vida ha sido siempre lo mismo, cuando conocí a Alex- Se detuvo, inseguro de si continuar, le anime a que siguiera- Cuando lo conocí fue cuando pude conocer más, ya sabe viaje y conocí personas, pero Alex... Él siempre ha estado más atrapado que yo.

- ¿Atrapado?

Jake me miró y meditó lo que diría- Él no ha tenido una vida fácil, siempre tuvo que seguir ordenes sin rechistar, aun es así- Bajó ña morada como si le pesaran las palabras- Aun debe de seguir ordenes así no le gusten, aunque todos debemos de hacerlo él es quien tiene toda la presión.

Yo ya me había perdido, no sabía a qué ordenes se refería, aunque no sólo tenía esa duda.

- ¿Qué ordenes? - Solté confundida- ¿Ordenes como... de sus padres?

-Algo así- Eso fue el fin de la conversación, Jake comenzó a nadar conmigo pegada a su espalda- ¡Sujétate!

Solté una estruendosa carcajada cuando se metió un poco de agua a su boca, me arrepentí porque él nos sumergió y entonces casi me ahogué yo, salimos de inmediato y una vez que me repuse comenzamos a reír hasta que el estómago nos dolió.

HIM -EN EDICIÓN- Where stories live. Discover now