Star Kids - Jojo's Bizarre Adventure

Capítulo 5.

Cuando Jonathan y Dio decidieron inscribir a su pequeño hijo Giorno a una estancia infantil consideraron muchas cosas, por no decir que consideraron todos los puntos y situaciones posibles y terminaron decidiendo que era lo mejor para el pequeño pues le ayudaría a aprender cómo socializar con otros niños antes de finalmente ingresar a una escuela.

Los padres tomaron la decisión tras pensarlo mucho y aunque se sentían seguros y conocían los beneficios, eso no evitó que se sintieran un tanto nerviosos e inquietos cuando el día por fin llegó. Luego de dejar a su hijo en la estancia y despedirse de él, cada quien partió a su respectivo trabajo.

Jonathan era profesor de arqueología en la Universidad de Boston en Fenway-Kenmore, un barrio que se ubicaba a sólo 7 minutos en auto de su hogar en Beacon Hill. Además de profesor también era investigador para el departamento de arqueología y solía colaborar con el departamento de historia también. Siendo siempre un apasionado por la arqueologia y la historia, disfrutaba mucho de su trabajo, le encantaba compartir las historias y conocimientos de las culturas antiguas, además tenía la fortuna de trabajar con sus dos mejores amigos. Robert E.O Speedwagon, un agradable hombre que conoció en la universidad, se convirtió en su mejor amigo y actual asistente en el puesto de investigador, mientras que su mejor amiga de la infancia, Erina Pendleton, era profesora de lengua inglesa y pasaban todos sus descansos juntos. Fue deber de esos dos escuchar las preocupaciones de Jonathan acerca de su hijo en aquel primer día, tratando de animarle y reconfortarle.

Dio era abogado, manejaba su propio bufete en Charlestown a 13 minutos de su hogar, el cual había crecido exponencialmente en los últimos años. Su carisma y elocuencia comenzaron a ser ampliamente reconocidos en los últimos dos años, permitiéndole hacerse cargo de casos cada vez más grandes e importantes en la ciudad. Destacaba el hecho de que de los 5 años que llevaba ejerciendo en Boston, no había perdido un sólo caso. Cuando su bufete empezó a crecer fue necesario incorporar más personas al negocio, contando ahora con tres principales colaboradores: Vanilla Ice, quien además era su asistente personal, Terence D'Arby, el secretario y coordinador, y finalmente N'Doul. A pesar de no socializar con ellos fuera de la oficina, fueron quienes se encargaron de su mal humor producto de la angustia por su hijo.

Sí, el primer día fue tan difícil para ellos como lo fue para Giorno, pero eso ya había pasado. Los siguientes días al ver que su hijo se encontraba feliz, la preocupación de ambos padres se disipó, cosa que agradecieron sus amigos y colaboradores.

Giorno continuó asistiendo a la estancia y cada día volvía a casa más feliz, hablándoles a sus padres acerca de sus compañeros y de todo lo que había hecho con ellos en el día. Por supuesto al ser su hijo lo conocían a la perfección y podían percatarse de que aún había un deje de timidez en su voz, lo que significaba que aún no entraba completamente en confianza con ellos, pero estaban seguros de que lo haría en poco tiempo. Confiados en que eso pasaría, se dedicaron a disfrutar del fin de semana y prepararse adecuadamente.

— ¡Giorno! ¡No te demores mucho en bajar! — Le llamó Dio desde la sala de estar.

Jonathan se encontraba en la cocina terminando con algunas preparaciones para cocinar más tarde.

El pequeño Giorno bajó ante el llamado de su padre. Estaba en casa en un día de descanso, pero su ropa era tan elegante como siempre y eso se debía a que su padre Dio se aseguraba de que toda su ropa fuese deslumbrante y de la mejor calidad. Para ese día le había elegido un conjunto de pantalones cortos hasta las rodillas de color negro, una camisa de manga larga del mismo color con detalles dorados en los bordes y con un pequeño y poco pronunciado escote en forma V con una tela azul que le cubría, los botones eran azules y tenían el patrón de una catarina. Sus zapatos estaban perfectamente lustrados y llevaba calcetas blancas con dos líneas azules casi al borde.