Lía Weasley

Capitulo 44 Última salida a Hogsmeade

Sábado, era la última salida de Hogsmeade y algunos estudiantes de quinto año de Slytherin se habían organizado para ir a las tres escobas a celebrar que habían dado los TIMOS.

El gran grupo que constaba de algunos integrantes del equipo de Quidditch de Slytherin, Lía, Cristel, sheena y sus otras dos compañeras de cuarto el grupo caminaba por Hogsmeade hacia las tres escobas, al entrar se sentaron en una de las mesas del fondo y pidieron 9 cervezas de mantequilla a la señora Rosmerta.

-Por habernos librados de los TIMOS- Campbell levanto su vaso en forma de brindis.

-Por los TIMOS- le siguieron el resto de sus compañeros.

Las tres escoba estaba más vacía de lo usual, los alumnos de otros años estaban con sus exámenes y pasaba sus horas libres estudiando, por eso solo habían pocos estudiantes de quinto y algunas personas del pueblo.

Estuvieron un raro celebrando hasta que en el pub entró Marcus, le había dicho que irían a las tres escoba y podía ir con ellos, el chico le pidió una cerveza de mantequilla y se acerco a la mesa de Slytherin, saludo a todos en la mesa y se sentó junto a su novia, los Slytherin le devolvieron el saludo y siguieron con su charla ya se habían acostumbrado al chico se había sentado ya muchas veces en su mesa y considian en varias clases.

-No nos hemos visto mucho.

-Hemos estado ocupada por los TIMOS, podemos ir a dar una vuelta si quieres.

-Me parece bien- ambos chicos se pararon llamando la atención de sus amigos.

-Iremos a dar una vuelta.

Sus amigos solo asintieron, antes de salir le pagaron a la señora Rosmerta sus bebidas y salieron del pub recorrieron un poco el pueblo era un lindo día soleado, pero corría una brisa fresca.

-¿Donde quieres ir?

-Podemos ir a Honeydukes y luego a sortilegios Weasley, extraño a los gemelos.

-bien por unos chocolates y luego a ver a tus gemelos favoritos.

Caminaron hasta Honeydukes, Marcus le abrió la puerta y la hizo entrar antes, la tienda estaba llena de dulces, y para suerte de Lía estaba casi vacía, los dos chicos se acercaron a las repisas a ver los dulces nuevos que había llegado.

-Este es genial, Cristel me dio uno, se supone que cada uno es un animal distinto, yo me comí uno de elegante.

-Genial, llevare uno, mira hay un nuevo dulce de chocolate- Marcus tomo la caja y la leyó las indicacion- al parecer es versión de la grageas pero de todas las combinaciones con chocolate, se ve inofensivo al menos que haya una combinación de chocolate y moco- Tal comentario causó la risa de Lía.

-No vas a superar que te tocara una de moco.

-¡Es que sabía horrible!

-Te dije que no las comerás, jamás sabrás de que te puedan tocar, pero la llevare, al parecer las combinación son solo de cosas comestibles- dio vuelta la caja y le mostró a su novio donde decía en las indicación- Estoy segura que habrán algunas de menta.

-Prefiero directamente comprar chocolates de menta y no arriesgarme.

Luego de haber recorrido un poco más la tienda y pagar fueron a sortilegios Weasley, George estaba reponiendo una de las estanterías, fred no se veía por ningún lado.

La chica le indicó a su novio que hiciera silencio y se acerco sin hacer ruido a George, estaba por asustarlo de espalda cuando una aparición sonó detrás de ella y dio un salto.

-¿Tratando de asustar a George?- la sonrisa de Fred era de oreja a oreja eran pocas las oportunidades que se salían con la suya con Lía, la chica era demasiado lista y astuta, casi siempre le ganaba a los dos.

-La pequeña Lía ha tratado de darme un susto, me duele esta traición- George se llevaba la mano al pecho, mientras exageradamente se lanzaba al suelo y fingía dolor.

-Ya George no seas tonto solo era un pequeño susto.

Luego de un rato George se puso de pie y Marcus se acerco a saludar a los gemelos, manteniendo su distancia sabía lo sobre protectores que eran con la chica y cada vez que estaba cerca trataba de hacerle alguna broma.

-Pensamos que por fin habías salido de Hogwarts para vernos, pero vemos que solo sales con tu novio y nos pasas a ver de paso.

-Puedes creerlo fred, hemos pasado a segundo lugar, increíble, esto jamas lo habían esperado.

-No sean tontos, saben que estaba muy ocupada, ya he dados los TIMOS y los entrenamientos los he detenido por las vacaciones.

-hablando de vacaciones, vas a volver con...

-No, no quiero volver a verlo, me las arreglaré, tengo algunos ahorros podrían buscar algún lugar para arrendar.

-Eso no es necesario, puedes quedarte en la madriguera estos seguro que mamá estará feliz de que vivas con ella.

-No quiero estar hay, el podría ir en cualquier momento y tampoco quiero que su mamá le prohíba ir solo porque estoy hay.

-Bueno en ese caso puedes ir a vivir con nosotros en el callejón diagon.

-No quiero molestar

-jamás serás una molestia, eres nuestras sobrina, estaremos para ti cada vez que lo necesites.

Estuvieron un rato más charlando hasta que debieron dar un paseo por el pueblo.

Estaban en una parte más alejada de las tiendas caminado mientra Lía intentaba convenser a Marcus de probar algunos chocolates.

-Vamos no pueden ser tan malos.

-Probaré uno, si tu no haces antes y te gusta.

La chica tomó uno al azar y se lo llevó a la boca, el sabor era horrible y no pudo evitar escupirlo en el envoltorio que venía.

-Chocolate y brocoli, ¿a quien se le ocurre combinar algo tan bueno con algo asqueroso.

Marcus no fue capaz de contestarle a su novia cuando cinco sombras aparecieron a su lado, convirtiéndose en cincos personas, más precisamente 5 mortifagos.

Lía soltó la pequeña caja de chocolates y sacó su varita junto a Marcus, el chico se batía en duelo con dos de ellos, mientras Lía lo hacía con los otros tres, desgraciadamente no era capaz de atracar y protegerse de tres mortifagos al mismo tiempo, pero si de protegerse y desviar sus ataques, Lía logró lanzar chispas rojas al cielo en forma de ayuda, alguien las vería y iría ayudar tenían que aguantar un poco más, iba bien hasta que un hechizo logro impactar en Marcus y lo lanzó a unos metros inconsciente y con un choro de sangre saliendo de su cabeza, el hecho fue suficiente para distraerla y que uno de los hechizos la lanzar al suelo los mortifagos la tomaron, la chica forcejeba para correr donde Marcus y revisar si estaba bien, uno de los mortifagos la tomo más fuerte y desaparecío con ella.