Capitulo 26 Nueva vida

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Dos semanas en ese infierno, ya había comenzando Julio, Lía estaba limpiando las ventanas del segundo piso, ya había perdiendo las esperanzas de que Charlie fuera por ella, cuando una de las asistentes le pidió que fuera a la oficina de la directora del lugar de inmediato. La chica dejo el balde y trapo hay y se dirigió a la oficina de la directora, tocó dos veces y después de un pase entró.

-¿Me llamo señorita?- Lía entro mirando el suelo era mejor no mirar a los ojos a esa mujer cuando estaba de mal humor, y Lía prefería no arriesgarse.

-Si, empaca tus cosas te vas hoy, te han adaptado.

-¡¿qué?!- la chica levanto la vista y vio junto al escritorio de la directora a Charlie.

Charlie no dejaba de ver a la chica, el aspecto de Lía no era el mejor tenía una clase de tomate mal hecho, un polera blanca sucia, unos pantalones negro manchados y la cara con manchas de tierra, no se parecía nada a la Lía que asiste a Hogwarts, la Lía que siempre está con su uniforme perfectamente, con su rostro perfecto resaltando sus pecas y su cabello pelirrojo arreglado y brillando.

-Eh claro, voy enseguida, adiós señorita.

La señora asintió y Lía salió de la oficina para guardar sus cosas, llego a su cuarto y se cambio por una ropa limpia y más cómoda, guardo el resto de sus pertenencias y acomodó su pelo en un mono bien hecho, fue al baño más cercano y limpio su rostro, al volver a su cuarto reviso que nada se le quedará y bajo al primer piso donde la esperaba Charlie y la directora, salieron en silencio entraron en un callejón y fue cuando Charlie habló.

-Nos apareceremos, ¿lo has hecho antes?

-Si, Fred y George han hecho aparición conjunta.

Charlie asintió y tomo el baúl de su hija con una mano y con la otra tomo su mano. Se aparecieron en una pequeña casa de manera.

-¿Donde estamos?

-En Rumanía, trabajo aqui- Charlie abrió la puerta y la hizo pasar -¿Quieres ver tu cuarto? Lo he construido durante el verano, espero te guste.

Lía asintió y Charlie la guió a un cuarto al final de un pasillo al estar las paredes eran rojo con detalles dorados, todo en esa habitación tenía detalles de gryffindor, a Lía no le gustaba no se llevaba muy bien con los integrantes de esa casa, no pudo evitar hacer una mueca al ver recorrer con la vista el cuarto, la cual Charlie se dio cuanta.

-¿Que te pasa? ¿No te gusta? Podemos cambiar lo que quieras, puedes mover las cosas a tu gusto- Charlie hablaba muy rápido, estaba nervioso y quería que Lía se sintiera cómoda.

-¿Sabes que no estoy en gryffindor?- la chica pregunto casual, después de todo ellos no habían hablado nada el no sabía absolutamente nada de ella.

-Bueno yo pensé que estas hay... como todos.. ya sabes- Charlie estaba nervioso solo quería darle un cuarto donde se sintiera cómoda, se aclaro la garganta para seguir hablando -¿Cual es entonces? Puedo decorarla con sus colores si quieres.

-Slytherin- la chica lo soltó como si nada, la cara de Charlie era una sorpresa no se esperaba eso, tosió nervios y asintió.

-Claro, puedo cambiarlo entonces.

Charlie apunto con la varita las paredes y cambiaron a un verde oscuro y la cama de Lía cambió a un cubrecama verde con detalles plateados muy lindo, las cortinas se quedaron negras, Lía las cerro un poco y el cuarto quedó un poco a oscuro eso le recordaba a su cuarto en las masmoras lo cual hizo sonreír un poco.

-Gracias, quedo muy lindo- Charlie asintió, solo miraba a su hija ese cuarto era oscuro y muy distinto a lo que le había gustado, pero Lía parecía cómoda hay noto que eran muy distintos.

-Puedes acomodarte, iré a preparar algo para almorzar, el baño es la puerta de al frente por si quieres ducharte, hay toallas en el primer cajón.

Lía asintió y Charlie salió, ella tomó la de decisión de tomar una ducha y cambiarse una vez lista fue a la cocina Charlie estaba terminando de cocinar.

-he preparado pasta con carne, espero te guste-Charlie le sirvió un plato y tomo asiento frente a ella en la pequeña mesa.

-Gracias, eh pensado recorrer el lugar después.

-Yo iba a proponerte los mismo, podemos ir a ver los dragones ¿has visto alguna vez uno?

-No, he leído un poco de ellos.

-Bueno yo trabajo con ellos, puedo enseñarte cualquier cosa que quieras de ellos.

-Claro, podre molestar a Marcus que eh visto un dragón.

-¿Quién es Marcus?

-Mi novio- Charlie prefiero aguantarse el comentario de que estaba muy chica para tener novio y siguió comiendo en silencio.

-He comprado un postre ¿Quieres?- la chica estaba a punto de negarse estaba satisfecha -Es torta de chocolate.

-¡si!- se aclaro la garganta - Si, quiero, por favor.

Charlie le dio un gran trozo de torta, su respuestas le aclaro de le gustaba la tarto de chocolate, sonrió al menos había acertado en algo, corto otro trozo para el y siguieron comiendo, Charlie le hacia algunas preguntas para intenta conocerla mejor.

Al terminar de comer Charlie dejo lavando la loza y servicios y salieron de casa, Charlie le conversaba sobre algunos dragones y la presentaba a algunos compañeros de trabajo que se encontraron en el camino hasta las jaulas con los dragones

-Ese es un bola de fuego chino- era un gran dragón de escamas escarlatas, una hilera de astas doradas alrededor de la cara, un hocico chato y ojos amarrillo y sumamente protuberantes.

-Es impresionante- Lía se comenzó a acercar para ver mejor el dragón, pero Charlie la detuvo.

-Es peligroso estar muy cerca, puedes venir a verlos cuando quieras, solo mantén tu distancia cuando estés sola.

Lía asintió y siguieron viendo los dragones, Charlie le habla un poco de ellos, al final le mostró una pequeña crías de dragones y la dejo acercarse recordándolo que tuviera cuidado.

Lía se acerco con cuidado y acaricio un pequeño dragón, esa acción atrajo a los demás que se acercaron a ella y se acurrucaron a su lado, a Charlie le sorprendió eso, nunca había visto a los dragones comportarse así.






Lía Weasley Where stories live. Discover now