Capítulo Cinco: Demasiado frío

34 3 11
                                    

Los rayos del sol sobre su cabello lo hacían brillar más, Rubí se encontraba acostada en la cama, mirando de reojo hacia su costado. La ausencia en su corazón le resultaba abrumadora y confusa, no entendía por qué tenía aquellos sentimientos. Cerró sus párpados, de apoco cayó en una pesadilla que se transformó en un recuerdo.

Ella se encontraba en el Orfanato, levantándose lentamente. Parecía ser de madrugada, pero igualmente lo hizo. Sus piernas descalzas tocaron el frío suelo, mientras que su mano izquierda arrastraba a su peluche por el suelo.

Entró a una habitación, en donde la llevó hacia un nuevo paradero. Parecía todo tan lúcido, ella pudo ver como varias personas estaban sentadas en una mesa grande.

Rubí despertó, apagó al despertador conteniendo un suspiro agotado.

Se levantó poniéndose una simple camisa con puntos blancos y un fondo negro, en conjunto con un pantalón crema y botas. Caminó por el pasillo, pasando por la habitación de Gregory y despertando al niño adormilado.

Se encontró con Vincent, quien ya estaba pronto antes que ella incluso.

—¿Te importa si invito a alguien? Ella sabe donde queda—cuestionó, Rubí lo miró en silencio.

Al final llegó la tal esperada compañía de su hermano, se trataba de aquella mujer rubia. Tenía una expresión bastante seria, Rubí tomó la mano de Gregory, él niño la apretó.

Subieron al coche de la tal 'Vanessa', en donde la pelirroja se sentía observada desde adelante.

—Así que... Te llamas Rubí, ¿o estoy equivocada?—preguntó la rubia, la nombrada entre abrió sus labios.

—Así es.

—En realidad le iban a poner otro nombre, pero tenía una pequeña piedrita de collar cuando llegó, ¿la recuerdas?—dijo Vincent, ella asintió. —No dudaron en ponerle Rubí.

—Qué encantador—musitó la rubia, Rubí pudo encontrar un poco de burla. —¿Aún la conservas?

—No... —dijo, afligida.

Llegaron a una casa bastante grande, un poco lejos de la ciudad. Rubí supo que era bastante antigua, al verla y notar donde se hallaba. Bajaron del coche, una suave brisa le recorrió el cuerpo, en conjunto con un escalofrío.

Vincent abrió la puerta para los tres, dejando pasar primero a la rubia, y por último él. Rubí se abrazó, viendo las paredes llenas de grietas y telas de araña.

Tenía muchas cosas, pero parecía abandonada.

Se alejó un poco de los demás, dejándose llevar por la curiosidad. Recorrió la cocina, la sala de estar y la biblioteca. Intentó abrir una puerta, pero aquella estaba cerrada con seguro.

Subió las escaleras, encontrándose con los demás. Allí estaban en total cuatro habitaciones, miró de reojo hacia una habitación, la cual parecía estar con un placar abierto.

Vanessa se paró a su lado, la pelirroja contuvo la respiración.

—Sufría muchas pesadillas—comentó, mirando hacia la habitación, Rubí la miró de forma confusa.

Vincent abrió una puerta, los ojos esmeraldas de Rubí lo miraron con preocupación. Al cabo, estaban metidos en una casa ajena, la cual, los dueños podrían llegar en cualquier momento. A pesar de que parecía que ya no tenía.

Su hermano entró a la habitación, salió luego de unos minutos, con varias cosas en sus manos. Parecía satisfecho, mientras miraba una imagen en sus manos.

—Es ella... Ahora las cosas se han hecho más fáciles—dijo, Vanessa se puso en su costado y miró a la imagen. —Hey, acércate Ru.

Ella se sintió tímida en hacerlo, al sentir los cuatro pares de ojos sobre ella. Se acercó lentamente, Vincent le mostró la imagen con emoción, la pelirroja notó que miraba a otro ser pelirrojo.

Not mutual (Fan Fic Fnaf) Where stories live. Discover now