ESPOSA VIRTUOSA

CAPÍTULOS DEL 139 AL 142

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CAPÍTULO 139. EL DOCTOR MILAGROSO ES LA PRINCESA HEREDERA
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La aldea de Huanghua estaba rodeada de soldados. Tang Yue caminó por el pueblo y no encontró a nadie en el camino. Tiendas improvisadas a lo largo del camino se mecían con el viento frío.

"Mira, esas son las tres salas de aislamiento." El doctor Wu señaló una hilera de casas intactas.

Tang Yue vio una cabeza pequeña que sobresalía de una grieta en la tienda, pero pronto el niño fue arrastrado adentro. Oyó débilmente la voz de un hombre adulto. "Oye, vuelve. ¡Hay demonios por ahí! Nos matarán si sales de allí."

Tang Yue no pudo explicarles a todos que la plaga no significaba la muerte. Pero pensó que la malaria podía curarse. Revisó su equipo y abrió una puerta.

La vieja puerta de madera crujió y gimió. La habitación estaba oscura y hermética. El aire estaba pesado con el hedor de la humedad y la suciedad.

Frunciendo el ceño, Tang Yue le dijo al guardia, "abre todas las ventanas para que circule el aire. Los pacientes no deberían vivir en un espacio hermético."

El doctor Wu no se interpuso en el camino. Puso todas sus esperanzas en Tang Yue.

Pronto , la habitación se iluminó y Tang Yue tuvo una vista clara de la habitación.

La litera estaba llena de enfermos, envueltos en gruesos edredones. No tenían la fuerza para darse la vuelta cuando escucharon que alguien entraba. Además, estaban demasiado débiles para abrir los ojos.

Tang Yue dejó salir al doctor Wu y a los guardias y los puso a cargo de entregar las herramientas. Sin embargo, se quedó en la habitación con Xiang'an y los médicos de Hui'an Tong.

"¿Tienen miedo?" preguntó Tang Yue.

"Creo que me habría asustado en el pasado. Pero ahora, no tengo miedo, porque estás aquí", dijo un médico anciano.

Estaba diciendo la verdad. Médico como era, todavía tenía miedo a la peste. Pero su confianza creció al pensar en las habilidades médicas de Tang Yue.

Xiang'an se puso en cuclillas junto a un paciente sin el permiso de Tang Yue. Tang Yue estaba a punto de hablar cuando Xiang'an gritó: "¡Está muerto!"

Todos los pacientes se despertaron con sus palabras.

Tang Yue se acercó y descubrió que el paciente había muerto. Luego hizo que todos examinaran a todos los pacientes por separado y sacaran a los que habían muerto.

Sus acciones perturbaron el equilibrio de la mente de los otros pacientes. Tang Yue dijo a través de su máscara: "Todos, tómenlo con calma. Haremos todo lo que podamos para salvarlos."

"Por favor, saca a mi hijo de aquí. No se enfermó..." Una mujer con un niño se arrodilló frente a Tang Yue. Agarró los pantalones de Tang Yue en oración.

Shan, que estaba parado afuera de la puerta, entró corriendo. Empujó a la mujer y le advirtió: "Cuida tus acciones."

Tang Yue detuvo a Shan y dijo: "Shan, prepara un poco de agua caliente para que todos se bañen y limpien a fondo toda la casa."

"¿Tomar una ducha?" Shan pensó que a Tang Yue no le gustaba el olor de la habitación. Dijo, "las gotas templadas soplaron heladas. ¿Es un buen momento para tomar un baño?"

En el camino, se preguntó cómo las personas entran en contacto con los parásitos de la malaria. Una boca cerrada no cazaba moscas. Pensó que los aldeanos podrían haber ingerido alimentos contaminados con parásitos de la malaria.