Era temprano en la mañana y Superboy se levantó entusiasmado por la salida que tenía con esa muchacha de vestido rojo que tanto le había llamado la atención.
Era raro que fueran tan afines, le agradaba mucho y era divertido hablar con ella, durante todo el tiempo que no se habían visto habían compartido mensajes constantemente al punto de no dejar su celular en ninguna momento aunque eso molestará a su madre Marta.
Se levantó más que animado y aprovechando sus poderes busco algo cómodo y único para su salida, estaba algo emocionado le agradaba y quería en cierto punto tener algo con ella, era especial.
Por otro lado una muchacha de cabello negro buscaba sin descanso algo que le quedará sin parecer ridícula en su armario al punto de desordenarlo y tirar todo lo de su interior a todos lados.
-¿nesesitaba ayuda remplazo...?-
Escuchó en la entrada de su habitación seguida de una risa divertida y un gruñido encontrando a sus hermanas apoyadas en el marco.
-¡largénse de aquí!- dijo enojada sin querer mirarlas, estaba frustrada y no quería a sus hermanas en sus asuntos.
-ho Timmyn... No queremos burlarnos- dijo la mayor dando un paso al frente en su habitación.
- yo sí...- escuchó a Dalia que callo al ver a la mayor darse vuelta para mirarla.
- como decía... nosotras hemos pasado por ello también...- dijo con cariño sentándose a su lado.
- Brais ayudo a su favorita... Y trato de ayudarme a mi también aunque era tarde y de seguro tratara de ayudar a la demonio- dijo la de mechón blanco sentándose en su cama.
- y de seguro quiere ayudarte también... Pero como está ocupada con cosas de la liga y la empresa nosotras trataremos de remplazarla un poco- dijo con cariño acariciando su rostro.
- sin ayuda en las relaciones sociales vas a verte patética Drake... Te recomiendo aceptar su ayuda- dijo saliendo de su habitación dado a que no le interesaba.
-supongo que eso es un "suerte" de su parte- dijo la mujer mayor de todas.
- gracias por su ayuda chicas pero....- fue interrumpida.
-iniciemos... Lo primero es que tomes un buen baño, nosotras nos encargamos de todo lo demás- dijo arrastrando a la menor por la habitación hasta encerrarla en su baño.
- este lugar es un chiquero... Será difícil encontrar algo decente en este desorden-
Dijo la segunda arremangado su camisa para iniciar con su labor.
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Debía admitirlo...
Sus hermanas habían sido de gran ayuda para salir sin levantar sospechas y verse bien.
Durante ese tiempo dickie estuvo buscando ropa cómoda pero linda entre todo el desastre, Jasmine se dedicó a encontrar algún maquillaje ligero para verse delicada pero bonita y durante ese tiempo nisiquiera vio a la demonio que al parecer se encargó de distraer a su madre de la rara actitud de las tres mayores.
- estás lista cariño... Bien ya sabes debes llegar antes de las 8 o mamá se dará cuenta y ya sabes los que ocurrirá si pasa eso- dijo la mayor dándole lugar para irse en su motocicleta.
- gracias por su ayuda chicas Encerio...- dijo feliz despidiéndose de las tres.
-¡solo no vengas con más kriptonianos soy muy joven para ser llamada tía!- grito la segunda mayor ganándose una risa divertida de sus dos hermanas que se quedarían a distraer a su mayordomo mientras la última más que avergonzada empezaba a dudar de ir.
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-se está tartando.... Tal vez solo fue una broma pesada- dijo desganado esperando en la entrada del parque central.
-¡he! ¡CONNER!- escuchó a sus espaldas relajando sus nervios.
- ho... Hola timmyn- dijo pausado al ver como ella sonreía de oreja a oreja y estaba preciosa.
-hola Conner siento llegar tarde mis hermanas me tenía atrapada- dijo algo apenada rascando su nuca.
- no hay problema- dijo a la más baja asintió y con ello siguieron su camino.
-gracias por esperar por mi- sonrió la muchacha divertida que a su lado parecía una muñeca de porcelana.
-no hay de que ¿Te gustaría tomar un café o algo?- pregunto amable.
-por su puesto me encantan los cafés- sonrió para acompañarlo.
Al entrar a una cafetería ambos se sentaron a un lado de una ventana y se sentaron a esperar carta.
-aver...¿Te gustan los postres de manzana?- preguntó al ver a como veía algunos de los platos.
-enrealidad bastante, vivo en smaivill por lo cual estoy acostumbrado a comer eso- sonrió apenado un tanto.
-eso es divertido, yo soy de ghotam por lo cual creo que ya te deberé advertí que soy algo dependiente de la cafeína- dijo un tanto divertida cuando un mesero llegó.
-buen día ¿hay algo que tengan en mente ambos?- preguntó el de traje.
-me da una rebanada de pai de manzana con un café - dijo el mayor.
-a mi un café negro cargado doble sin azúcar porfavor- respondió tranquila y el camarero asintió y se retiró.
-no mentiras con que te gusta el café he- dijo divertido.
-digamos que dormir no está muy cerca de mis mayores planes- sonrió algo avergonzada.
-jaja yo soy más de mañana que de noche- dijo viéndola a los ojos parecía una ternura sonrojada y su actitud se le hacía muy familiar y divertida.
-digamos que ghotam y smaivill son muy diferentes- sonrió mientras llegaba su pedido.
-gracias- sonrieron al mismo tiempo divertidos por decirlo al mismo tiempo.
-no tanto al parecer jajaja- río con gracia al dar un sorbo de su café amargo.
-de todas formas he visto ghotam y es un lugar muy hermoso la verdad- dijo dando un bocado a su postre.
-¿como es Smallville?... Nunca he ido- en verdad nunca había pisado siquiera algún pueblo pequeño al siempre vivir en grandes ciudades.
-es un lugar pequeño pero siempre se ve espacioso, las noches son calmadas y los atardeceres acogedores... Es un lugar en el que me gustaría seguir viviendo incluso ya siendo adulto- sonrió la verdad la historia de sus abuelos le parecía muy agradable.
-suena como un lindo lugar...- sonrió enrealidad sabía exactamente de lo que hablaba, sabía que ese lugar era su hogar.
- algún día podríamos ir juntos a ver a mis abuelos si quieres- aprovecho para sacarle una siguiente cita.
- suena increíble Conner- dijo emocionado por ir .
