Betrayed || Draco Malfoy

~005~

Ginny y Luna entraron dando saltos en mi cuarto mientras abrian las cortinas y decian con mucha ilusión:

-Arriba dormilona! Hoy es nuestra graduación!- gritaban ambas mientras yo me ponía una de las almohadas en la cabeza, puesto que la luz del sol me molestaba en la vista

Hoy era viernes 18 de junio y por lo tanto hoy era la graduación.

-Podeis gritar menos? Estoy segura de que hasta mi bebé os ha escuchado- dije entre risas

-Venga Elara! La graduación es a las 6 y son las once de la mañana!- dijo Ginny aun dando saltitos por el cuarto

-Y que quieres que haga hasta que sean las seis?- pregunté

-Como que que quieres que haga Elara!- dijo Ginny parandose en seco- Pues mira, para empezar tenemos que hacernos las uñas, así que Luna metete en el baño de Elara y saca todos los esmaltes caros que tiene. Tenemos que estar perfectas para hoy!

Luna entró a mi baño y sacó todos mis esmaltes de uñas. Yo las uñas de las manos no tenía pensado hacerles nada nuevo, puesto que siempre las llevaba largas y arregladas, además de que siempre me hacía la manicura francesa y me enorgullecía decir que mis manos eran simplemente perfectas. 

Así que opté por pintarme las de los pies con un esmalte que depende de donde le diera la luz brillaban de un modo u otro.

Pero el problema estaba en cuando Ginny abrió el frasquito y el olor se coló en la habitación. El olor a esmalte de uñas siempre me había gustado, pero en cuanto llegó a mi nariz, no hizo otra cosa que causarme un fuerte mareo y de ese modo empezara a marearme.

-Lunita haz el favor y abre la ventana o acabaré vomitando-dije mientras me tapaba la nariz y Ginny empezaba a pintarme las uñas

-Relajate y respira hondo Elara, voy a intentar hacerlo lo más rápido posible y luego te vas a la ventana a respirar aire puro- dijo mientras me pintaba las uñas- Luna dale un poco de aire para que se le pase el mareo

Estuvieron así hasta que Ginny terminó y entre las dos me ayudaron a levantarme pero sin poder esperarlo salí corriendo hacía el baño y vomité la cena de anoche, mientras Ginny llegaba a recogerme el pelo y Luna me daba aire.

Tras eso, me fuí directa a la ventana y me quedé ahí hasta que terminaron y decidimos que sería buena idea que cada una fuera a darse un baño y en una hora nos reunieramos en el Gran Comedor.

Así que una vez se marcharon, dejé la ventana abierta para que el olor a esmalte se marchara y evitara futuros mareos, tras eso me metí en la ducha y empecé a pensar en lo que había sido de mi estas dos últimas semanas.

Para empezar, estaba embarazada. 

Ron me había dejado por Hermione Granger. Pero había sacado algo positivo y es que cierto rubio me calentaba el corazón. 

Desde la fiesta en la sala de menesteres habiamos empezado a pasar más tiempo juntos y prácticamente ya pasabamos todas las tarde juntos. Siempre haciamos algo similar: primero ibamos a la bibliotecta a buscar algún libro, preferiblemente de astronomía. 

Luego saliamos al jardín donde nos sentabamos juntos debajo de un arbol y le leía durante un par de horas. Después pasabamos el rato juntos, ibamos al lago o como otras veces cogiamos la escoba de Draco y sobrevolabamos el lago negro. 

Si cenabamos juntos nos marchabamos nada más cenar a la torre de astronomía, donde buscabamos constelaciones y hablabamos hasta media noche. Tras eso, él me acompañaba a mi sala común y le daba un beso en la mejilla a modo de despedida.

Habiamos encontrado varias constelaciones y estrellas como la de Scorpius, Draco o Geminis, y no podía evitar sonreir al recordar la sonrisa de Draco al haber visto su constelación por primera vez, puesto que su constelación era dificil de ver y no muy común.