Línea de salida ✓ [Editando]

El chofer

El finde se había acabado, la carrera también, igual que las posibilidades de ganarla de Sebastián se habían esfumado en el momento en el que acabó contra las barreras de seguridad.

No fue un golpe grave, ni siquiera se hizo daño por lo que había visto por ahí, pero nos dio u buen susto a todos los que estábamos presenciando esa escena en directo. La carrera siguió en pie y por supuesto hubo más coches que se retiraron por las condiciones de la pista o por distintos choques.

Una cosa buena para Mercedes, Harry había ganado. Una mala para McLaren, Mark había quedado de octavo y su diferencia de puntos aumentó considerablemente, Harry se había puesto en cabeza con veintitrés puntos por encima de Mark.

En el momento en el que regresamos a casa mi hermano estaba eufórico y no paraba de hablar lo acertado que fue competir, si hubiera perdido se habría quejado de la carrera, pero como no se dio el caso. Al menos le había mandado un pequeño detalle a Sebastián.

Hoy estaba nerviosa, no por algo especial, bueno depende de lo que se considere especial. Pero iba a recuperar mi McLaren, por la mañana Mark me había mandado un mensaje para decirme que lo fuera a recuperar ya que era un regalo y prefería que lo tuviera yo en vez de estar en mi ex-garaje.

Justo después de ir a buscarlo iría a mi primer día de universidad, mis compañeros ya llevaban como tres semanas yendo, mi plan era socializar, aunque si no hacía amigos nuevos tampoco era el fin del mundo, no obstante, iba a pasar mejor el tiempo acompañada.

Me metí en el edificio de Mark y me peiné un poco con la mano, nunca antes había estado tan emocionada por algo como ir a la universidad o recuperar mi preciado coche, todo hoy iba sobre ruedas.

— Hola —le dije con una sonrisa de oreja a oreja nada más me abrió la puerta. Mark enarcó una ceja al verme.

— Ya sé que soy hermoso Black —me dijo y dejé de sonreírle.

— Es porque estoy contenta, dame las llaves de una vez y te dejo en paz.

Me miró de arriba abajo, había elegido por la mañana mi ropa con mucho cuidado. Me puse unas medias oscuras que tenían el minúsculo logo de Chanel por todas partes, una falda negra y un jersey verde, combinado con mis Dr. Martens negras.

— No sé si quiero que me dejes en paz —dudo por un momento antes de hablar— ¿Sabes qué?

Negué con la cabeza a modo de respuesta.

— Hoy me levanté con ganas de ser tu chofer personal.

— Mark —le advertí, el me pidió tiempo, y no puedo darle tiempo si me dice esas cosas.

— Te recuerdo que soy yo el que tiene las llaves.

— Te recuerdo que tengo dos pies que saben andar hasta la universidad.

— Te recuerdo que yo también tengo dos pies para acompañarte hasta la universidad.

— Te recuerdo que...

No terminé la frase porque apareció Josh detrás de Mark y me dijo:

— ¿Queréis iros ya, pesados? —parecía que se acababa de levantar porque tenía el pelo revuelto y el pijama aun puesto—, con lo fácil que es decir "Sí Mark, llévame hasta la universidad"

Dijo imitando mi voz y le enseñé mi dedo corazón mientras le sonreía y me respondió de la misma forma.

— Entonces qué preciosa ¿Te llevo?

Mi corazón acaba de dar un vuelco, tendría que reacostumbrarme a los halagos de Mark porque si las cosas seguían así de bien, prevenía varios micro infartos.