Duquesa Vinsonneau |FINALIZADA|

57

— Ethan espera —digo en voz alta mientras voy detrás de él por los pasillos.

Este no se detiene y simplemente apresura el paso en dirección a nuestra habitación. Félix va junto a mí, cuidando que no caiga o algo parecido, al llegar a nuestra habitación, dejamos a Félix a fuera, quien me asegura que no dejara que nadie entre y cierro las puertas. Un gran golpe me hace fijar mis ojos en Ethan quien está lanzando al aire todo lo que encuentra y en consecuencia rompiendo todo.

— ¡Ethan! —le grito— ¡detente!

Este hace caso a mis palabras y cae con sus rodillas al suelo, las lágrimas no tardan en caer, me acerco hasta donde esta, evitando los trozos de cosas rotas que hay por toda la habitación y le doy un abrazo, provocando que este llore aún más en mi hombro.

— Así que ahora tú me dirás todo lo que paso dentro de palacio, cuando comenzó la guerra, como comenzó y quien es el verdadero detonador de toda esta matanza.

Federico nos mira con seriedad a todos, en especial a Ethan quien sostiene una postura recta y sin casi parpadear, mostrando autoridad, frente a este señor.

— ¿Está seguro de que quiere que ellos escuchen? —le pregunta a Ethan.

— Si, él es mi mejor guardia y amigo —dice señalando a Félix con su mano— y ella es con quien decidí pasar toda mi vida, prometiendo no ocultarnos nada —dice dándome la mano.

— Está bien —dice federico acomodándose— espero que no me manden a matar después de contar esta historia, ya que no es nada bonita.

— Le prometí protección y eso le daré a cambio de su palabra —le contesta Ethan.

¿Protección? Este anciano nos dio una gran golpiza a todos dudo que alguien lo pueda cuidar mejor de lo que se cuida a sí mismo, pero no digo nada ya que el momento no es el adecuado, debido a toda la atmosfera que existe dentro del salón.

— Bueno, yo conocí a su abuelo, una persona bastante agresiva he de decir, pero era un buen contrincante y padre —comienza a contarnos— cuando nació el primer hijo de su majestad, todo fue alegrías en el reino ¿sabe? Su abuelo mando a preparar banquetes, para todos ya que el heredero había nacido, el príncipe Carlo creció y apenas aprendió a caminar me fue entregada la misión de prepararlo para convertirse en un guerrero bien preparado, yo era bastante joven...

Solo tenía unos 20 años, por lo cual no fue algo fácil ni para mí ni para el príncipe, pero sorprendentemente, este desarrollo habilidades increíbles con la espada y cuando tenía 3 años, nació su padre, el Rey Hans quien al crecer no resulto tener una habilidad innata con la espada como su hermano, pero esta la fue desarrollando casi convirtiéndose en uno de los mejores. Cuando el príncipe Carlo tenía unos 17 años, fue cuando comenzó todo esto de los problemas con las personas de la frontera, su abuelo quería obtener las tierras acomode lugar ya que se había descubierto una mina de oro, ubicada en ese lugar. Su abuelo nos envió, junto con el príncipe Carlo, su abuelo nos pidió matar a quien se nos atravesara en nuestro camino, pero su tío antes de llegar a la frontera nos ordenó no atacar, que la violencia solo traería más violencia.

Claramente las personas que vivían en esas tierras no accedieron al trato de que les ofreció el príncipe, por lo cual volvimos sin un trato y con las espadas limpias, algo a lo que su abuelo se molestó bastante, por lo que a los meses después fue él quien fue a esas tierras con el Rey Hans, tampoco volvieron con un tratado, pero si con las manos llenas de sangre al igual que sus espadas, para ese momento su padre tenía unos 14 años, era un pequeño niño al cual le gusto el sabor de mandar.

Un año después su abuelo falleció y su tío tomo el puesto de rey, en solo 3 meses logro un acuerdo de paz con las personas del pueblo, dándoles trabajos y rindiendo honor a quienes fueron asesinados de manera injusta por su familia. Luego el acuerdo se rompió, porque 3 guardias fueron encontrados muertos a unos minutos del pueblo y fue cuando en una de esas visitas, mataron al Rey Carlo. Fue ahí cuando comenzó todo lo de buscarle esposa a su padre, ya que el sería el próximo rey y se estaba iniciando una guerra, se necesitaba dejar un heredero protegido en palacio ya que usted sería el próximo gobernante si a su padre le pasara algo, en ese tiempo su padre tenía unos 16 años y fue cuando yo me fui de palacio o, mejor dicho, me desterré a mí mismo de este lugar.