Duquesa Vinsonneau |FINALIZADA|

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Caminamos por las calles del pueblo, todo están pintoresco como la última vez que lo visité, la gente compra en los puestos de frutas, niños juegan con espadas de madera y cada vez que ven a un oficial lo saludan con admiración, mientras que nosotros nos escondemos con temor.

— Todo luce bien —le digo a los chicos mientras caminamos— ¿Cómo sabremos a quien preguntarle?

— Por lo que venden —dice Luka, confundiéndome a Theo y a mí—los vegetales que crecen a las afueras, solo lo venden personas que tengan contactos y como está la guerra, muy pocas personas continúan trabajando en conjunto, ya que se arriesgan mucho.

Asiento y continuamos caminando, las personas no me reconocen, nadie se nos queda viendo, solo somos simples personas caminando por un pueblo. Reconozco una de las calles, que es la que nos lleva a la consulta de John, pero no me puedo distraer de nuestra misión. Llegamos a una especie de pasillo, en el cual hay varios puestos donde hay una gran variedad de verduras, plantas y cosas que nunca había visto en ninguna de mis dos vidas, cuando nos acercamos a uno de los puestos, Luka lo saluda y le pregunta por unas especies de raíces moradas.

— Son bastante difíciles de conseguir —dice sacando dinero de uno de sus bolsillos.

— Si, pero pueden venir a comprarnos a nosotros siempre que necesite —le dice el hombre de una edad algo mayor, quien le entrega las raíces misteriosas— nunca nos hemos quedado sin ellas.

— ¿Aun cuando este vegetal crece en la zona de guerra? —le pregunta Luka, haciendo que el anciano lo mire con una sonrisa.

— ¿Son espías? —nos pregunta.

— No, solo queremos ayudar —le respondo, hablando por primera vez— queremos saber cómo está la situación en las fronteras, queremos ayudar, pero no podemos si no sabemos cómo están las cosas.

En anciano mira hacia los lados y comienza a hablar, no nos dice mucho, pero si nos ayuda a entender cómo está la situación. Nos dice que él y su hermano, vivían en la frontera, pero luego por algunos motivos el comenzó a venir al reino, pero después se casó y formo una familia aquí, su hermano quien se reusó a dejar la frontera se quedó en aquel lugar y él lo ayuda económicamente vendiendo los productos que siembra.

Cuando nos vamos, le agradecemos mucha la ayuda y mientras que él nos desea éxito para poder ayudar a todos. Ahora sabemos que las personas siguen viviendo en aquellos lugares, pero aún hay muchos cabos sueltos en esta historia.

— Fíjate por donde vas —me dice un hombre antes de empujarme y haciendo que caiga al suelo.

Los chicos rápidamente reaccionan, sacando de no sé dónde, dagas pequeñas con las cuales se enfrentan al hombre que parece un edificio. Con una gran risa el señor, empuja sin problemas a ambos y se acerca a mí.

— Si tienes guardias debes valer mucho ¿Quién eres? —dice tomándome de mi cabello.

Gracias a que el vestido no es gigante como los que suelo utilizar, le doy un golpe con una de mis piernas al sujeto, pero este no me suelta. Escucho un grito el cual proviene de Theo, quien corre a toda velocidad, pero antes de hacerle algo al hombre, este me suelta y le da un gran golpe en el rostro, pero tal parece que eso fue una distracción, ya que veo como Luka salta a la espalda del sujeto y con una fuerza increíble lo lanza al suelo.

Debido al espectáculo, mucha gente comenzó a reunirse a nuestro alrededor tanto fue que hasta los guardias reales llegaron y detuvieron todo.

— Malditos muertos de hambre, porque siempre ocurren estas cosas —dice uno de los guardias— llévense a estos tres al calabozo.

— ¡Esperen! —grito, haciendo que el guardia me mire desafiante— solo llévense al hombre gigante, ellos son parte de mi escolta, solo me defendieron.

— ¿Y quién te crees que eres como para darme ordenes? Soy un guardia real —dice el tipo caminando hacia mí.

Veo como los chicos se intentan levantar del suelo, como las personas nos observan y veo el rostro desagradable de este guardia y no tengo más opción que revelar mi identidad.

— ¿Quién soy? Yo soy Amber Vinsonneau, Duquesa de Vinsonneau —le digo desafiante— concubina de su majestad el príncipe Ethan y a aquellos dos que te quieres llevar son mis guardias personales, quienes solamente me estaban defendiendo.

La gente comienza a murmurar y el sujeto, pasa de tener una mirada de superioridad a una de terror, le ordeno que se lleve al sujeto quien nos atacó y al otro guardia quien lo acompaña, le pido que lleve a los chicos a la consulta de John, para que revise sus heridas.

Es increíble como en unas horas, pase de ser una don nadie en medio de este pueblo a sentir todas las miradas sobre mí.

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Hola, espero que estén bien, me adelanto ya que esta semana estoy bastante ocupada con la universidad así que eso.

¡¡Espero que les guste!!