Femenino por Causalidad | Larry ✔️

Capítulo final.

Sostiene la mano de Louis mientras caminan en dirección a la habitación de hospital donde Zaray se encuentra en recuperación después de su cirugía. Harry no sabe porqué se siente tan nervioso, sin embargo lo está. Le preocupa mucho la salud física y mental de su amiga después de la cirugía.

—Ella estará bien. —Louis le asegura, tratando de aliviar la tensión.

—Lo sé. —Habla entredientes sintiéndose muy incómodo mientras más se acercan. En realidad no lo sabe, no cree que ella esté bien después de todo lo que tuvieron que hacerle en el quirófano. Ella debe estar muy mal y Harry no quiere verla en ese estado, de sólo pensar en todo lo que le hicieron se siente adolorido con calambres en su entrepierna.

Encuentran a Liam en la habitación como era de esperarse, el chico no se ha apartado de ella durante todo el proceso, tal como prometió. Harry está muy agradecido porque él la ha cuidado muy bien y también ha ayudado mucho a cambiar su forma de verse a sí misma en el espejo. Liam es un modelo a seguir para Harry, a pesar de haber dudado mucho de él por el pasado que tuvo con las mujeres, pero gracias a ese motivo ha aprendido a no juzgar el pasado de las personas. Todos pueden cambiar, todos merecen una segunda oportunidad para demostrar que pueden ser mejores personas.

Su mirada recorre toda la habitación hasta ver a la chica postrada sobre la cama, conectada a muchos artefactos. Harry se paraliza en la entrada, hasta que Louis aprieta su mano con cariño y lo anima a continuar.

—Has venido. —Escucha su voz rasposa y tiene que armarse de valor para avanzar hasta la cama para verla más de cerca.

—Es muy difícil verte allí. —La chica simplemente sonríe brindándole mucha paz.

—Gracias por hacer mi sueño realidad. —Harry suspira profundo sintiendo muchas cosas, principalmente orgullo por mejorar la vida de una buena persona.

—No tienes que darlas, lo hice por amor. —Confiesa con una sonrisa tímida. Se toma el atrevimiento de mirar su cuerpo envuelto en mallas y vendajes, y no puede evitar sentir curiosidad—. ¿Todo salió bien? ¿Está todo en orden?

—Todavía no siento dolor porque tengo el efecto de la anestesia general. La doctora dice que todo está perfecto. Ya tengo un cuerpo femenino. —Puede notar la felicidad en su cara, y eso es suficiente para sentirse igual de feliz.

—Me alegro de saberlo, estuve rezando mucho por ti.

—Que hayas rezado significa mucho. —Harry se ríe con diversión.

—No te burles, vengo de una familia cristiana. —Zaray mueve la cabeza en negación.

—Sólo me haces sentir muy especial. —Y esas palabras significan mucho para Harry. Nunca había hecho sentir a alguien especial.

—Lo eres.

Dejan el hospital horas después cuando la visita se vuelve incómoda con la llegada de su familia.

Louis lo mira de reojo mientras conduce, y no puede evitar colocar una mano sobre su muslo, llamando su atención al verlo tan distraído.

—¿Te gustaría cenar conmigo? —Asiente efusivamente con la cabeza

—Claro que sí.

—¿En qué piensas?

—En mi familia. ¿Debería ir a verlos? —Louis se sorprende al escucharlo, pero sabe que lo correcto sería ir.

—Por supuesto que sí. Ellos no saben nada de ti, deben estar preocupados porque te fuiste sin decir nada ni dar explicaciones. —Hace una mueca porque tuvo motivos para hacerlo, aunque ahora no parecen suficientes.