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Sesenta y uno

Bae Joo Hyun

-¿Lo amas?- había cuestionado ocasionado que me atragantara con el martini que había tomado.

-Yo... ¿que?- cuestione mientras trataba de encontrar una respuesta que no fuera inapropiada.

-Dijiste que amabas a Jin...- replicó sin titubeos -Se que es una pregunta incómoda pero debo saberlo.

Sin embargo quizá yo no había bebido lo suficiente como para empezar hablar sin pensar y Rose lo sabía y por esa misma razón quizá sospechaba más de sus palabras.

Pero que más daba si ya lo sabía, ambas éramos consientes de aquello pero después de todo habían que dejar las cosas en claro.

-Si- replique finalmente -Esperó que no te moleste- no había sido una disculpa pero la verdad era que tampoco deseaba molestarla.

-Que dices- dijo negando con la cabeza y acariciado mi mano de manera amistosa -En realidad que alguien lo ame me vuelve muy feliz- sin embargo a diferencia de sus palabras su voz fue más sombría, como si algo en el tema la entristeciera -Se que te cite aquí diciendo que beberíamos hasta emborracharnos pero... realmente quería hablar contigo- y claro que eso podía aterrorizar a cualquier, como si después de no haberme gritado cuando me disculpe, ahora fuera a cobrar sus deudas -Si yo no puedo estar aquí para él prométeme que estarás a su lado- expreso tan de repente volviendo a tomar mi total atención.

-Que dices- negué con la cabeza, ya que sentía que sus palabras eran una broma -claro que no pasara nada- replique, ya que había esperado que ella dijera que era una broma, pero aún así su mirada aún era seria.

-Ya lo se... solo- suspiró -prométeme por favor, así dormiré más tranquila.

Fue ahí cuando me planteé realmente lo que pasaba.

¿Como es que había llegado ahí?

Hace solo un par de semanas la odiaba y conspiraba en su contra y ahora de pronto me preocupaba.

Por extraño que sonara deseaba que estuviera bien.

Porque una vez más le daba la razón a Jin. Ella, tanto como yo necesitábamos una amiga.

Como es que al recibir su llamada me había emocionado, y ahora al estar a su lado me provocaba tranquilidad, eso hasta que hablo de aquella forma.

-Lo prometo, siempre y cuando dejes de decir cosas como esas, todo estará bien- quizá antes estábamos solas pero ahora nos tenemos la una a la otra- y a pesar de que muchas veces había juzgado a las personas que decían frases como esas, ahora lo entendía.

Porque yo no trataba de acomodar mis palabras, no le estaba mintiendo, hablaba enserio cuando le decía que estaría para ella. Que pasara lo que pasara, la ayudaría.

Porque así se sentía tener a un amigo o alguien que te interesara más allá de lo romántico, realmente ya no quería dañarla, por que sentía que ella tampoco lo haría.

Quizá estaba siendo demasiado confiada, pero después de haber pasado tantos años dudando de los demás, al menos sentía que aquello era bueno.

Por qué no fingía cuando estaba con Rose, y ella sabía cuán mala podía ser, pero aún así no le había importado, me había ayudado y perdonado.

-Yo también lo amo- había expresado bebiendo de su copa, han pasado tantos años y aún no puedo entender porque, de vez en cuando me pregunto si personas como él y yo estamos destinado a ser o más bien a nunca estar juntos.

-¿A que te refieres?- cuestione, pues era claro que no sólo era una simple frase, realmente había meditado sus palabras y se notaba en su rostro.

-Jin es una buena persona- replicó mientras una lagrima se deslizaba por su mejilla -pero creo que ambos amamos demasiado, recuerdas lo que te dije aquella noche...- asentí con la cabeza -realmente aún lo creo... nunca ames demasiado Irene.

Y claro que su forma de hablar y aquel dolor en sus ojos me recordaba a Jin, como es que aquello que alguna vez fue amor también estaba lleno de dolor.

Y me había dolido profundamente, porque a pesar que yo amaba a Jin, ahora entendía las razones por las que él mismo había optado por permitir que se casara con Jungkook.

Como a pesar de sentir que su corazón se partía en dos, los había amado demasiado y prefería que fueran felices incluso si él era infeliz.

Quizá también a eso se refería Rose, ellos habían amado demasiado y por eso ahora estaban así.

Finalmente esta historia pronto acabará, después de tanto dolor y tortura, ha sido un camino largo, y debo prepararme para decirle adiós, así que poco a poco iré escribiendo notitas para ustedes.

Enserio muchas gracias por estar aquí.

Las amo muchísimo.

Besitos llenos de amor 💕
BYE 👋