51. Atalana

2K 171 15
                                    

Cristal

Le prometí a Mia que la ayudaría a investigar a sus abuelos, pero no quería involucrarla directamente con ellos, ya que quisieron matarla cuando era niña. Sería un proceso largo porque no podía ir a donde ellos vivían y hablar sin más. Además, estaba todo el asunto de Makarius que no me dejaba tranquila.

Había algo que me molestaba y eso era el peligro que corría Eric. También esta el asunto de la chica misteriosa que se hizo pasar por mi. Puede que sea un demonio poderoso u otro ser sobrenatural, el cual no conocemos. 

Una vez que pueda descubrir qué rayos pasa con el demonio humano amigo de Eric, mi mente estará más clara y despejada para ayudar a Mia.

Decidí ir a la escuela Walker para poder hablar con Kenneth, ya que necesitaba saber más de su hermano. Se que sería algo difícil hablar con él, pero debía intentar al menos. 

Estaba a punto de tocar el timbre a un costado de la reja cuando alguien me sorprendió.

— ¿Qué haces aquí? — preguntó Eric sonriendo.

— Necesito hablar con tu padre — dije riendo incomoda.

— ¿Con mi padre? — preguntó confundido.

— Sí — sonreí forzadamente.

— Lechuga — dijo de pronto.

Lo miré frunciendo el ceño, pero luego recordé a que se refería.

— Conejo — dije en un susurro.

Él pareció aliviarse, ya que dio un gran suspiro.

Enop — dijo abriendo la puerta con un hechizo.

— Genial — dije.

— Venía a buscar un par de cosas, pero puedo llevarte a la oficina de mi padre antes — dijo sonriendo.

— No es necesario — dije mientras avanzábamos a la entrada —. Ya conozco el camino.

Ambos entramos a la escuela y él desapareció por el pasillo de la izquierda, mientras que yo me quedé ahí parada sin saber que hacer porque no tenía idea dónde estaba Kenneth. Comencé a caminar por el pasillo mirando en cada sala que había allí, hasta que llegué a la biblioteca. 

 — ¿Se te perdió algo? —  dijo un hombre a mi espalda.

Ahí estaba esa voz arrogante.

— Hola — dije volteando lentamente.

Me miró entrecerrando sus ojos. Sé que no le caigo bien y que a raíz de eso esta juzgándome mentalmente.

— ¿Se te perdió algo? — repitió con apatía en su voz.

Lo miré algo sorprendida e incómoda. 

— Nada — dije sin más —. Creo que será mejor que vuelva a casa.

— Eric me dijo que estabas aquí — elevó una ceja y la bajó rápidamente.

— Y bajaste, ¿por qué...? — pregunté esperando que respondiese.

— No confío en los de tu clase — me miró molesto.

— Pues yo tampoco en ustedes, pero aquí estoy — fingí una sonrisa.

— Porque necesitas algo de nosotros como siempre.

— Escucha, Kenneth, es la segunda vez que te veo en mi vida y la verdad no creo que debamos hablar en absoluto porque no me interesa.

Los Caídos #2- ElementalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora