¿Enamorarme es un error? | TERMINADA

Capítulo 44. Sorpresas que enamoran.

Son las 6:45 pm, Alice me ha maquillado de una forma que no son visibles mis ojeras, ni mi piel pálida. Me miro al espejo por décima vez observando que no me parezco a la Fabiola que hace un momento tenía ojeras, la piel pálida por no comer ni dormir y mi vestimenta es como si un vagabundo me la hubiera regalado; ahora debajo de mis ojos no hay ojeras, mi piel le ha dado un poco de color y mi cabello lo rizó.

-Sólo te faltan dos cosas - miro atenta - un vestido y una sonrisa en esos labios.

-No quiero sonreír y nadie me va a obligar hacerlo - digo sentándome en mi cama.

Veo que Alice saca un vestido de mi armario, un vestido que no pensaba ponerme en mucho tiempo, pero Alice lo ha sacado en este momento para ponérmelo.

-Mira Fabby este vestido te lo pondrás - es un vestido muy llamativo ya que es rojo.

-Pero yo pensaba ponerme un pantalón de mezclilla y una blusa ajustada - digo haciendo una mueca.

-Este evento es muy especial así que llevarás vestido y no un pantalón de mezclilla y una blusa ajustada.

-¿Cuál es ese evento especial? - digo mirándola.

-Amm... Sólo es un evento especial, en un momento regreso - dice saliendo de la recámara.

Miro una y otra vez el vestido rojo que está en mi cama extendido, lo tomo y me lo pongo frente al espejo, me queda bien, es algo ajustado y arriba de la rodilla. El color es muy chillante, ya que es rojo y en estos momentos no se me hace utilizar el rojo. Andrés entra a mi recámara, me ve que estoy mirando de un lado y otro el vestido; me sonríe y dejo de hacer lo que estoy haciendo.

-Que linda te ves, creo... creo que voy a llorar - se tapa la cara con la mano, me acerco a él para mirar si es que llora - ¡mentira! - grita y hace que grite.

-¡Grosero! - le golpeo el hombro - tú también te ves muy bien - le sonrío como puedo.

-¿En qué momento dejaste de ser mi niña para convertirte en toda una mujer?

-Aun soy tu niña a la que le haces Bullying - digo abrazándolo y siendo correspondida.

-Ya me voy, que se hace tarde - se separa de mí - te amo niña fea.

No le puedo contestar porque sale de mi recámara, miro al suelo y veo unos tacones negros, creo que son míos, así que me los pongo; gritan mi nombre un par de veces para que baje, tomo mi celular y bajo como un rayo. Ya abajo miro a mis amigos con smoking y a mis amigas con vestido, se ven bien, caminamos hacia los autos y me dicen que tengo que ir con Carlos y Steph, cosa que no me molesta, subo con ellos al auto el ambiente es algo extraño pero no tenso, miro por la ventana y me pierdo en mis pensamientos.

[...]

Llegamos a una terraza, creo que es bonita aún no bajo pero lo que he visto es bonita, me dicen que aún no baje del auto y comienzo a sospechar que tienen algo entre manos pero no tengo nada concreto. Tomo mi celular y la foto que tengo con él aparece, entro a mi galería y comienzo a ver todas las fotos que nos tomamos él y yo. Me dan la indicación de que baje del auto, bajo y me ponen una venda en los ojos, me encaminan por un momento y después sólo me dan indicaciones con la voz, me piden que me detenga y lo hago, un olor inunda mis fosas nasales y hace que me ponga nerviosa.

Me quito la venda de los ojos, lo miro frente a mí mirándome con los ojos llorosos, nos miramos por unos segundos que para mí son siglos, miles de emociones corren por mi cuerpo y la que más sobresale es el amor. Miro a mi alrededor, está lleno de flores y nosotros estamos en un camino en donde hay rosas y tulipanes de colores; lo miro a él tiene un smoking y su corbata es roja como mi vestido.