Capítulo 62 - Entre luces y sombras, parte 2 -

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Luego de haber comenzado la teletransportación, Miguelangel Azureblade comenzó a ¨viajar¨ por un largo túnel de energía blanca, al igual que todos los demás. Pero en un momento dado, un relámpago dorado azotó la armonía de su viaje, desviando la locación final de su teletransportación.

Terminó apareciendo en una especie de habitación que aparentaba ser un desierto árido. El suelo estaba erosionado, aunque no se podía ver dónde terminaba el desierto, podías tocar los bordes de las paredes, como si solo fuera una ilusión visual.

-          Hey, Migue, ¿andas perdido? – dijo una voz detrás del chico

Cuando se volteó, vio a Roderick Allenstorm sentado en una gran roca, limpiando a la legendaria Úlgur con un pañuelo de seda. Miguelangel invocó a Heiligen: Blank y cargó contra Roderick, este se defendió con Úlgur.

-          ¿Es necesario que hagamos esto ahora? – preguntó el tipo con una sonrisa

-          Ah, lo siento, es la costumbre – se ríe y retira a Blank – Y bien, ¿Por qué estás aquí?

Roderick se levanta, ahora era incluso más alto que antes, llegaba a rivalizar con Red. Portaba una versión ligeramente más grande de su clásica armadura: Grandes hombreras de placas al igual que el resto de la armadura, todos en color dorado con líneas azules, una capa blanca con bordes dorados caía por su espalda. Esto hacía ver a Miguelangel aún más pequeño.

-          O-oye... ¿Me podrías decir cuánto mides ahora? –  Preguntó el chico con tono frágil

-          ¿Sigues con eso? – pone cara de preocupación – Argh, 1.86

-          ¡¿Cómo es que creces tanto?!

-          ¡Olvídate de eso por ahora! – lo empuja suavemente - ¿Cómo sigue Ethan?

-          Aún está bajo control, cuatro meses atrás le pedí a Psyonic que aumentara el tiempo de su sello mental de la cordura, logró prolongarlo medio año

-          O sea que aún tenemos dos meses

-          Exacto – camina hasta la roca – Esperemos que todo salga bien

El tipo alto mira a Úlgur de cerca, esboza una sonrisa y se la lanza a Miguelangel.

-          Ten a Úlgur, vas a necesitarlo – La espada libera un fuerte destello al tocar al chico – Yo ya no lo necesito, Lemy logró entregarme algo de igual calidad

-          ¡¿Y me lo vienes a decir ahora?! – protesta el otro - ¡Sí hubiese sabido que me ibas a entregar a Úlgur, hubiera escogido mejorar mi esgrima!

-          Tú y yo sabemos que tu esgrima no puede mejorar demasiado, además, Úlgur fue diseñado específicamente para combatir Avatares, ¿sabes a dónde me dirijo?

-          Entiendo, entiendo, trataré de no demorar mucho con Luxen

-          Muy bien, si todo sigue como va, no deberíamos de perder – Invoca sus alas y comienza a flotar – Migue, por cierto, ¿no has considerado la propuesta que te hice?

El chico sonríe, cruza los brazos mientras encoge los hombros.

-          No, Roderick, no podemos liberar nuestros poderes ahora – se ríe – Cuando el amuleto que me dio Dhes se termine, lo consideraré

-          Muy bien – Se ríe mientras envuelve su mano derecha en relámpagos dorados – Saluda a Lemy de mi parte

-          Vale, le diré que le dijiste puto – suelta una carcajada despreocupada

Arrasando con la Magia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora