44. Hasta que la sangre los separe

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Capítulo 44

"Hasta que la sangre los separe"

SAMAEL

Nunca había pensado en su boda. Antes de ese día, incluso antes de conocer a Izan, todo lo que quería era no decepcionar a sus padres, convertirse en el heredero que los Blackhill esperaban, hacer lo que sus abuelos decían, y estuvo conforme hasta que cierto chico pelinegro lo hizo replantearse lo que esperaba de sí mismo.

Tres años lejos de Izan y de sus amigos bastaron para ayudarlo a ver que no necesitaba la aprobación de su familia. Los obedeció y viajó al otro lado del mundo, sí, pero regresó a recuperar lo que hizo a un lado para satisfacer a sus padres.

En más de una ocasión, aun cuando los sentimientos entre Izan y él estaban claros y no quedaba duda de que querían estar juntos más que cualquier cosa, pensó que si Izan decidía que él no merecía el derecho de estar a su lado, lo aceptaría.

Si Izan un día despertaba y no veía en él más que aquel inmaduro egoísta al que no le importaba pisotear a los demás para salirse con la suya, y decidía dejarlo, él no haría nada para detenerlo.

Izan no tuvo la oportunidad de decidir nada en toda su vida, ni siquiera la opción de conocer a su familia biológica o de no crecer en un orfanato. Él podía al menos dejarlo elegirlo, amarlo porque así quería, estar con él porque se sentía bien a su lado.

Ahora iban a casarse. Ni su mente ni su corazón se hacían a la idea todavía.

Iba a casarse con el chico al que adoraba. Su persona favorita.

Al principio, se negó a pensar en el matrimonio, le bastó con el compromiso, con saber que Izan lo amaba y que podían estar juntos sin pensar en nada más. Pero también se negó porque eran demasiado jóvenes y sus vidas estaban siendo reordenadas.

Las viejas costumbres nunca se olvidan, en su interior quedaban estragos de la educación que recibió de sus padres y sus abuelos. Ellos ya no estaban y aun controlaban sus decisiones.

Viéndolo de ese modo, él tampoco había tenido oportunidad de decidir nada en su vida. Sus padres decidieron quién sería desde antes de su nacimiento. Fue Alexei para ellos, el heredero que les aseguraba la gloria en la alta sociedad.

También fue el hijo y nieto perfecto para sus abuelos, aprendió cosas inútiles y sosas que le desagradaban para que estuvieran orgullosos de él, y al final tenía que olvidarse de todo, y de ellos también.

También por esa última razón aceptó. Necesitaban reordenar sus vidas y sentir que se estaban eligiendo a ellos antes que a las personas que les hicieron daño. El primer paso era celebrar su matrimonio. La idea de tener una boda de ensueño le hacía mucha ilusión.

Sangre puraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora