Ese beso estaba lleno de mil emociones dulces, tiernas y placenteras. Dallani podía sentir como se hundía en los suaves labios de Anakin mientras que este la sostenía fuertemente de la cintura, si fuera por el se quedaría toda la noche besándola, a diferencia de ella que era más razonable; pues al darse cuenta de lo que pasaba abrió grande los ojos saliendo de ese hipnotizarte sueño, provocando empujar ligeramente a Anakin quien apenas recuperaba la respiración.
-Que... ¿Qué ocurre?-preguntó agitado Anakin.-
-Esto está mal Anakin, jamás debió haber sucedido...
Dallani huyendo de sus brazos, dejó solo a al joven jedi quien se quedó desconcertado mirándola como se retiraba, pero si había algo que jamás iba a olvidar era ese beso que le dio pauta a alimentar sus sentimientos por ella.
Mientras tanto Dallani encerrándose en su cuarto aún con la respiración entre cortada, no lograba poner en claro sus ideas, ese beso fue tan único que aún podía percibir la esencia de Anakin en sus labios. Tumbándose en su cama sin poder conciliar el sueño, solo pensaba en él, pensando en que jamás debió haber sucedido eso que tanto anhelaba desde su interior.
"-Tu madre, puede estar muerta...
-¡No! ¡Eso no puede ser! ¡Aún está viva!
-¡Todo eso puede cambiar si te unes a mí! Te puedo dar todo el conocimiento de dar vida...el lado oscuro es poderoso.
-Y... ¿Cómo se que eso es verdad?
-Tu padre hizo lo mismo..."
Levantándose de golpe y llena de sudor, Dallani trataba de controlar su respiración, su corazón latía tan rápidamente que pudo notar que ya había amanecido, apenas se estaban filtrando unos rayos de sol por su ventana, haciéndola despertar en la realidad, "Tranquila Dallani solo es una pesadilla más" se susurraba a ella misma, estaba aterrada ante tal sueño, no se podía explicar porque constante mente tenía ese tipo de sueños pero con el simple hecho de pensarlo hacía que la piel se le erizara. Para sacarse de la mente todas esas emociones decidió tomarse un baño, para posteriormente colocarse uno de los conjuntos prestados de Padmé; era una falda larga entallada negra que hacía relucir su esbelta figura y un top de manga larga y cuello alto igual de color negro, donde solo se podía percibir su vientre al desnudo y se hizo una coleta dejando caer su largo cabello trigueño sobre su espalda.
Saliendo directo al comedor recorriendo todo ese largo pasillo iluminado por los prados de Naboo, escuchó murmurar unas voces ocasionado llamándole la atención lo cual provenían del cuarto de Obi-Wan. Colocándose detrás de la puerta empezó a escuchar curiosamente la conversación y asomándose por una rendija pudo notar que era una transmisión que emitía el astrodroide R2D2 a dos personas; uno era un pequeño sujeto extraño de apariencia verde mientras que el otro se la hacía más familiar, pues su rostro le parecía ya haberlo visto en algún lugar. Sin que Obi-Wan notara su presencia pudo escuchar la conversación.
-Me temo que la promesa se haga realidad...
-Precauciones, tomar debemos, maestro Kenobi.
-¿Entonces que propone maestro Yoda?- comentó el otro sujeto.-
-Protegerla, debemos maestro Windu -suspiró- en su familia, intenso el lado oscuro es- comentó desolado Yoda.-
-Tal vez si la regresáramos en Dantooine, puede correr menos peligro...-interrumpió Obi-Wan.-
-No maestro Kenobi -le siguió Windu- durante mi estancia en Dantooine pude notar algo que no se si sea bueno para la chica...
-¿A qué se refiere?- preguntó extrañado Kenobi.-
-Me temo que los separatistas supieron que los Baraan habitaban ahí...y Ramax Baraan sufrió graves consecuencias, no se sabe nada de Soliah, pero me temo que ella también haya pasado por lo mismo.
-Esto aún no lo puede saber Dallani...
-Seguro no es Kenobi...esta tragedia una pena es...-terminó diciendo Yoda.-
Cuando Dallani escuchó estas últimas palabras, sintió como su corazón se hubiera helado, no podía asimilar todo esa información "No, esto no puede estar pasando...solo no quieren que vaya a Dantooine...si es eso...seguro es por mi seguridad...mis padres están con vida yo lo sé...somos buenas personas..." no podía tener sus pensamientos claros, tenía que irse lo más pronto a Dantooine a como diera lugar, sabía que algo malo le estaban ocultando y no esperaría un segundo más sin hacer nada al respecto. Dirigiéndose con un paso acelerado a la alcoba donde se encontraba Jaron para ver como seguía, trato de disimular las gotas de lagrimas que recorrían por sus mejillas y al verlo lo notó bastante recuperado, después de todo no fue tan grave la herida pero solo necesitaba cuidados para que no se le infectara.
-¡Hey linda! ¿Cómo sigues?- pregunto Jaron indicándole que se sentara junto a él.-
-Bien gracias ¿Pero y tú? ¿Cómo sigue esa pierna?
-Bastante bien, no fue nada grave...pero tú tienes otra cosa ¿Qué ocurre linda?
-Necesito que me ayudes a irme de aquí lo más pronto posible...
Jaron se quedó mirándola algo desconcertado, lo cual Dallani le comentó acerca de lo escuchado de Obi-Wan, y sin contradecirla aceptó huir de ahí en contra de la voluntad de todos para ir a Dantooine. Esperarían a que nadie estuviera presente para que no les impidieran la fuga, por primera vez Dallani se estaba guiando por sus deseos de coraje y no estaba siendo razonable olvidándose de Padmé y los posibles riesgos que cometería.
Esperaron el todo transcurso del día para poder irse en la noche sin que se dieran cuenta, esta vez nada ni nadie la detendría incluyendo a Anakin quien trató de evitarlo todo el día pero de sus pensamientos era imposible sacarlo, había penetrado muy dentro de su corazón.
Preparó un pequeño equipaje donde contenía solo lo esencial y su ropa con la que llegó de Dantooine, solo esperaría las indicaciones de Jaron quien estaba alistando su nave. Antes de partir decidió por última vez en recorrer todo el lugar sobre todo en su lugar preferido, ese gran balcón con su impresionante vista del lago. Contemplaba las estrellas con nostalgia, extrañaría tantas cosas de ahí y a personas que marcaron su vida como Padmé, R2D2 pero sobre todo Anakin, aquel hombre que despertó a la mujer de su interior, aquel que con ese beso lo llevaría grabado en su alma, en sus labios. Después de varios minutos escuchó como Jaron le avisaba que ya era el momento, solo ella asintió con nostalgia para marcharse de ahí mientras que el joven piloto se adelantó llevándose el equipaje de Dallani, ella empezó a caminar lentamente por todo el corredor de las recamaras deteniéndose sobre la de Skywalker, tenía la necesidad de verlo por última vez pero en último momento se arrepintió dando media vuelta para marcharse.
-Dallani...
Ahí estaba otra vez, su mirada de él buscando la de ella, Dallani giró para quedar frente a él, su nerviosismo volvía pidiendo a gritos que la volviera a besar como la noche anterior, mientras que él solo se limitaba a observarla con ternura. Lentamente se fue colocando frente a ella y con una mano rosaba las mejillas de ella, Dallani no evitó derramar una lágrima ante su tacto, estremeciéndose ante su contacto, él solo se limitaba a limpiarle el rastro de sus lágrimas y con el corazón desbordado acercó el rostro de ella lentamente hacia el suyo, provocando que Dallani se separara inmediatamente de él.
-¿Tampoco podías dormir?- preguntó Anakin rompiendo con la tensión.-
-Sí, ya sabes pesadillas...-respondió girando su mirada.-
-Yo igual.-suspiró- sufro día y noche una agonía que me roba los sueños...
-¿A qué te refieres?- preguntó con la respiración acelerada.-
-La agonía de tenerte tan cerca y tan lejos a la vez.
-Ani...yo...esto no puede ser...lo de ayer fue un error...solo eso...-decía nerviosa.-
Al terminar de decir eso, Dallani dio media vuelta para irse, no soportaba tenerlo frente a ella y sin poder volver a probar esos adictivos labios ¡Esto era un dolor! Sabía muy bien que todo esto perjudicaría a Skywalker. Sin embargo Anakin quien se interpuso de su camino, esta vez no era para robarle un beso, del interior de su camisón que traía para dormir, sacó un especie de amuleto con una cuerda de piel; el amuleto era de madera con unos símbolos algo extraños para Dallani, Skywalker tomo las manos de ella y le colocó el colgante de modo que cerró sus puños bajo las mano de Anakin que la sostenía delicadamente.
-¿Qué es?- decía Dallani observando el colgante.-
-Un amuleto para que te de suerte, lo talle para ti. Es el símbolo de Tatooine... solo quiero que sepas que nunca estarás desprotegida, eso simboliza que siempre estaré para ti.
Parecía que Anakin presentía lo que sucedía, Dallani se lo colocó alrededor de su cuello dejándolo relucir sobre su vestimenta negra incorporando su mirada con la de él, ella se le lanzó a los brazos regalandole un abrazo lleno de mil emociones. El solo la sostenía fuertemente de la cintura, deleitándose con su dulce aroma mientras que ella colgada de su cuello le dio un breve beso en la mejilla y apartándose de él se retiró a su alcoba dejándolo ahí observándola como volvía huir de él. Dallani pedía a gritos no irse de ahí, pero sabía perfectamente que su estancia en Naboo no sería eterna ya que prioridad era encontrar sus padres,en cuanto a Skywalker él era un jedi y algo entre ellos sería completamente imposible, lo mejor que debía hacer era irse, tratando de matar lo que sentía por Anakin.
Esperando el momento adecuado salió hasta su encuentro con Jaron quien ya se había preocupado por su tardanza, ella se limitó decirle alguna palabra y sin más retención, partieron de Naboo directo a Dantooine, no había dejado ni una carta explicando su huída, pensó que era lo mejor, pero ahora se encontraba enfrentándose a la verdad ocultada por tantos años de sus padres.
El viaje fue un poco pesado, pues llegaron justo en el amanecer, otra vez estar en su planeta natal la hacía sentir más cómoda y sin pensarlo dos veces se dirigió hacia su casa dejando atrás a Jaron, pudo notar que Dantooine no era el mismo lugar que ella vio por última vez, sus campos verdes ahora estaban cubiertos por quemaduras, las granjas estaban destruidas y al paso de la gente podía escuchar muchos lamentos, niños en los brazos de su madres mientras que ellas pedían limosnas para poder alimentarlos, su Dantooine ya no conservaba esa alegría.
Una vez llegando su hogar notó que estaba destruido, pertenencias de ellos estaban rotas y se veía a grande vista que fue saqueada, al ver todo eso sintió como el alma se le albergaba sentimientos de frustración y dolor, su patrimonio ya no existía y pocas pertenecías de sus padres permanecían, estalló en llanto ante la impotencia de encontrar todo de ese modo, pensó que tal vez era cierto lo que comentó Dooku, que no había sobrevivientes, pero no se quedaría con la duda, tenía que encontrarlos con vida y salió en busca de ellos con la esperanza que aún habitaba en ella.
-Linda me costó seguir tu paso...-decía agitado Jaron.-
-Jaron necesitamos encontrar a mis padres, ¡Tienen que estar con vida!- alegó alterada y llorando.-
-Tranquila linda, los encontraremos- dijo abrazándola- hay que separarnos para encontrarlos más fácil.
Todo el día lo dedicaron para la búsqueda, Jaron preguntaba con los vecinos sobre el paradero de los Baraan mientras que Dallani decidió salir a los campos. Al caer la noche, exhausta caminaba en dirección de regreso a su hogar, no obstante pudo notar a lo lejos bajo un frondoso árbol una luz que destellaba, ella decidió acercarse ya que ese brillo le causo inquietud, sin embargo al estar tan cerca no era lo que esperaba, se llevó una gran sorpresa, una sorpresa que provocó que se cayera al suelo, su ritmo cardíaco empezaba a acelerase más de lo normal, su respiración no la podía controlar que consigo trajo al llanto; se encontraba frente a la tumba de su padre, esa luz que destellaba era la lámina de su ataúd donde venía gravado el nombre completo de Ramax con una leyenda "Padre, esposo y guerrero ejemplar" . Al leer esas líneas, pudo sentir como el corazón se le partía en dos, sus sentimientos estaban confusos, empezaba a sentir una serie de emociones llenas de ira, temor, odio. Arrodillada frente a la tumba de su padre, gritando llena de furia, su mente solo pensaba en venganza y poder matar a todos los que hicieron eso a su padre.
-¡Perdóname padre!-gritó entre lágrimas- Te juro que esto no se quedará de este modo, encontraré a mi madre y pagarán todos aquellos que te hicieron esto...lo juro...
Su mirada no era la misma que antes, esta vez era diferente, llena de miedo, convencida cada vez más en las palabras de Dooku, sobre unirse al lado oscuro.
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Hola a todas/os espero le haya gustado, quiero agradecerles ya que cada vez se van uniendo más lectores, en verdad estoy tan agradecida ojalá les guste como esta quedando, disculpen la demora, pero como ya les había comentado me encuentro en periodo de exámenes, en fin les mando un enorme beso n_ñ