For You (Anakin Skywalker)

Capítulo 8

Ese beso estaba lleno de mil emociones dulces, tiernas y placenteras. Dallani podía sentir como se hundía en los suaves labios de Anakin mientras que este la sostenía fuertemente de la cintura, si fuera por el se quedaría toda la noche besándola, a diferencia de ella que era más razonable; pues al darse cuenta de lo que pasaba abrió grande los ojos saliendo de ese hipnotizarte sueño, provocando empujar ligeramente a Anakin quien apenas recuperaba la respiración.

-Que... ¿Qué ocurre?-preguntó agitado Anakin.-

-Esto está mal Anakin, jamás debió haber sucedido...

Dallani huyendo de sus brazos, dejó solo a al joven jedi quien se quedó desconcertado mirándola como se retiraba, pero si había algo que jamás iba a olvidar era ese beso que le dio pauta a alimentar sus sentimientos por ella. 

Mientras tanto Dallani encerrándose en su cuarto aún con la respiración entre cortada, no lograba poner en claro sus ideas, ese beso fue tan único que aún podía percibir la esencia de Anakin en sus labios. Tumbándose en su cama sin poder conciliar el sueño, solo pensaba en él,  pensando en que jamás debió haber sucedido eso que tanto anhelaba desde su interior.

"-Tu madre, puede estar muerta...

-¡No! ¡Eso no puede ser! ¡Aún está viva!

-¡Todo eso puede cambiar si te unes a mí! Te puedo dar todo el conocimiento de dar vida...el lado oscuro es poderoso.

-Y... ¿Cómo se que eso es verdad?

-Tu padre hizo lo mismo..."

Levantándose de golpe y llena de sudor, Dallani trataba de controlar su respiración, su corazón latía tan rápidamente que pudo notar que ya había amanecido, apenas se estaban filtrando unos rayos de sol por su ventana, haciéndola despertar en la realidad, "Tranquila Dallani solo es una pesadilla más"  se susurraba a ella misma, estaba aterrada ante tal sueño, no se podía explicar porque constante mente tenía ese tipo de sueños pero con el simple hecho de pensarlo hacía que la piel se le erizara. Para sacarse de la mente todas esas emociones decidió tomarse un baño, para posteriormente colocarse uno de los conjuntos prestados de Padmé; era una falda larga entallada negra que hacía relucir su esbelta figura y un top de manga larga y cuello alto igual de color negro, donde solo se podía percibir su vientre al desnudo y se hizo una coleta dejando caer su largo cabello trigueño sobre su espalda. 

Saliendo directo al comedor recorriendo todo ese largo pasillo iluminado por los prados de Naboo, escuchó murmurar unas voces ocasionado llamándole la atención lo cual provenían del cuarto de Obi-Wan. Colocándose detrás de la puerta empezó a escuchar curiosamente la conversación y asomándose por una rendija pudo notar que era una transmisión que emitía el astrodroide R2D2 a dos personas; uno era un pequeño sujeto extraño de apariencia verde mientras que el otro se la hacía más familiar, pues su rostro le parecía ya haberlo visto en algún lugar. Sin que Obi-Wan notara su presencia pudo escuchar la conversación.

-Me temo que la promesa se haga realidad...

-Precauciones, tomar debemos, maestro Kenobi.

-¿Entonces que propone maestro Yoda?- comentó el otro sujeto.-

-Protegerla, debemos maestro Windu -suspiró- en su familia, intenso el lado oscuro es- comentó desolado Yoda.-

-Tal vez si la regresáramos en Dantooine, puede correr menos peligro...-interrumpió Obi-Wan.-

-No maestro Kenobi -le siguió Windu- durante mi estancia en Dantooine pude notar algo que no se si sea bueno para la chica...

-¿A qué se refiere?- preguntó extrañado Kenobi.-