El terror invadió la ciudad de Gore a mitad de la noche, mi padre fue a mi habitación y la abrió de un golpe.
- ¿estás bien? - pregunto el
-seguro... ¿tu?
-se podría decir, ven, dormiremos en la sala de entretenimiento.
Me levanté y arrastré mis pies hacia la sala, al otro lado de mi cuarto, el cerró la puerta después de que mi tío y sus dos hijos entrarán. Si, vivíamos con mi tío porque papa dejo de ser responsable tras la muerte de mi mamá, jamás lo entendí, pero lo intentaba.
Samanta (mi prima) se dejó caer a mi lado y me abrazo por la cintura.
-tengo tanto sueño - se quejó, pero eso no duro mucho pues suele tener el sueño pesado y a pesar del ruido no se volvió a despertar.
Mi primo se sentó a su lado mirando a mí tío y a mi papá.
Ellos estaban lejos de donde nosotros pero cuando mi tío se emocionaba subía la voz más y más.
-te lo dije - grito victorioso - Te dije que ese científico tenía razón.
-no es seguro - comentó papá negando con la cabeza.
-Haz algo entonces para demostrar lo contrario - mi tío lo reto y papá solo rodó los ojos - eso pensé
-¿pueden decirnos que está pasando? - dije frunciendo el ceño
-Leí una nota un par de días antes; era un comunicado de un científico-nos miró como si no entendiéramos y asentía-él estaba seguro de que esto pasaría pronto, una semana o menos, con toda la contaminación era probable un virus como la gripe española...
-una pandemia-comenté, Zachariah (mi primo) asintió
-exacto... En la nota decía que sería por una muerte del lóbulo frontal del cerebro pero después se va esparciendo a la otra parte del cerebro...
-¿y eso nos dice? - pregunto Zach
-!Hay hijo mío¡ - comentó su papá riendo -significa que las personas ya no serán como las conocemos
-¿entonces? - pregunté curiosa por la respuesta
-serán unos hijos de puta- levanté las cejas sorprendida por la respuesta
-¡no hables así! - lo regañó mi padre
-cállate hermano-respondió él riendo feliz
-¿y nosotros que seremos?
-otros hijos de puta o su comida ¿cuál prefieres tu segnorita Bernadette?
-no quiero responder eso-respondí porque bueno, jamás decía groserías en frente de mi padre.
-sin miedo cariño-dijo mi tío riendo-igual todo se ira a la miegda... Mejor dicho ya se fue.
-tío creo que ya me quiero ir a mi cuarto y sin ofender no te creo
-asómate a la puerta y descúbrelo por tu cuenta.
Me levanté y Samanta cayó al sillón completamente pero no se despertó, Zachariah se comenzó a reír levemente de eso. Los gritos se escuchaban cada vez más claros con cada paso a un daba, abrí la cortina un poco para mirar hacia la calle y vi luces prendidas, coches chocados, gente corriendo de otras y algunas llenas de sangre, con cortes o demasiado golpeados. Vi como un hombre de aproximadamente 40 años era mordido en el brazo por otro cayéndose al piso, el hombre que lo mordió se levantó y siguió caminando hacia otra persona, vi como el hombre que estaba en el piso empezaba a tener convulsiones y de repente se detuvo.... Respire lentamente, acababa de ver como mataban a una persona solo con una sola mordida... Comenzó a mover la mano (di un salto hacia atrás) escuche un grito y me volví a asomar, el hombre que mordieron estaba en pie con la boca sangrando, movía su cabeza hacia las otras personas que corrían, cuando a su lado un chico de detuvo , tan solo un momento, éste se abalanzó sobre él y lo mordió pero en vez de correr hacia alguien más se lo comenzó a comer ahí mismo, otras personas se acercaron e imitaron al hombre comiéndose al chico. Me dio náuseas y me hice para atrás.
Sentí unos brazos que me tocaban los hombros y di un salto, volteé a ver a mi padre y le sonreí nervosa.
-¿Que son?