Nos quedamos hasta cuando nuestros pies ya no pueden más de tanto bailar, los dos estamos un poco mareados por el alcohol, por lo tanto llegamos a la habitación un poco desorientados, sólo un poco, tampoco es que nos encontremos inconscientes, aunque lo que aún no asumo es que estoy comprometida... estamos comprometidos.
Al llegar, lo primero que hago es lanzar los zapatos, mis pies arden, Zayn hace lo mismo.
-Mis pies arden. –me quejo entre risas.
-Pues a mí también. –respondió de la misma manera. -¿Sabes? –fijo mi atención en él, si es que se puede más. –Muero por quitarte ese vestido. –rasca su nuca.
-Ok, no sé cómo responder a eso. –confieso. –Aunque no me molestaría que lo hicieras... -digo coqueta.
Se me acerca y me rodea con sus brazos, me apega a su cuerpo, para luego unir sus labios con los míos. Comienza siendo un beso lento, romántico, que termia convirtiéndose en uno lleno de pasión, nuestras lenguas juegan; sus manos acarician mi espalda, mis manos están firmes en su cuello. Mis manos mueren por quitarle la camisa, no lo pienso más y comienzo a desabotonarla, sonríe entre medio del beso, mis dedos recorren su espalda, su abdomen, su pecho. Baja con delicadeza el cierre de mi vestido y tal como lo dijo, me ha quitado el vestido.
Estoy en ropa interior y sus ojos recorren mi cuerpo con admiración, con delicadeza, con amor. Vuelvo a su boca, mis manos actúan rápidamente desabrochando su pantalón y él termina por quitárselos. Me toma de las piernas, yo quedando a la altura de su cadera, me pone contra la pared, va depositando besos desde mi frente hasta el valle de mis pechos, besa mis hombros y de apoco va quitando mi sujetador, una vez que lo ha sacado, se detiene y me lleva hasta la cama.
Ahí pasamos el tiempo. Amándonos, deseándonos, llenándonos de amor, de pasión, de lujuria, convirtiéndonos en uno.
-Te amo. No lo olvides. –susurra antes de dormirse.
(...)
Pasó el tiempo y tuvimos que volver a la realidad, a Londres.
Aún no les hemos dicho nada a nuestros padres, tampoco les he dicho a mis amigas y muero porque lo sepan.
Llevamos ya una hora de viaje, mis ojos se posan en el anillo que adorna mi mano. Es increíble cómo tu vida puede cambiar en tan poco tiempo, como una persona puede volverse el sentido de tus días, lo que el amor puede hacer en tu vida.
Aquí estoy yo, con el hombre que quise, que amo, y que pretendo amarle por el resto de vida que me queda, sé que habrá altos y bajos, es normal, así es la vida y así es el amor, no puedo pedir que sea perfecto y tampoco lo quiero. Sólo que sea real.
-Tengo nervios, pero también estoy ansioso por que sepan sobre nuestro compromiso. –Zayn me comenta mientras caminamos al taxi que nos llevará a su casa.
-Tranquilo, estoy igual. –sonrío. –Isabella y Cora se volverán locas. –río.
-Me encantas –besa mi mejilla.
Llegamos a su casa. Dejamos las maletas a un lado, Zayn me ofrece algo para beber y lo acepo encantada, se sienta a mí lado con un vaso de jugo. Conversamos acerca de cómo vamos a anunciar nuestro compromiso.
Optamos por una cena, planear una cena con la familia y amigos.
(...)
Ya llevo dos días en Londres, mi madre no deja de hacerme preguntas sobre el viaje y mis amigas no se quedan atrás, quieren saberlo todo.
La cena está planeada para esta noche, en casa de Zayn.
-¿A qué se debe la cena? –pregunta con curiosidad Cora.
-Sólo para reunirnos, compartir. –encojo mis hombros, intentando parecer normal con la respuesta.
-Se te está pegando lo de ser misterioso. –comenta Isabella.
Seguimos paseando por el centro comercial, ayudando a Isabella en escoger algo para Joel, ya que se acerca su cumpleaños. Paseando por las diferentes tiendas nos encontramos Joel, intentamos escondernos, pero no nos resultó.
-¡Pero qué sorpresa! –dice acercándose a nosotras. –Hola, chicas. –saluda alegre, luego besa a su novia.
-¿Qué haces aquí? –Isabella le pregunta a Joel.
-Viendo que me puedo regalar –responde Joel. -¿Qué hacen ustedes aquí? Este es una tienda que vende cosas para HOMBRES... Espera, ¿Me estás comprando algo? –sonríe con picardía.
-Obvio que no. –rueda los ojos. –Estamos acompañando a _____, ella le está viendo algo a Zayn. –me mira pidiendo ayuda.
Asiento. –Síp.
-¿Ves? –Isa mira a Joel.
-Veo. Bien. –le da un beso en la frente.
Después de unos minutos, hacemos como que buscamos algo, pero realmente queremos salir de la tienda e ir a buscar en otra, le hacemos creer que nada nos convenció.
Le pido a Isabella que me deje en casa de Zayn, debemos prepararnos para la cena.
-Lo siento por la demora, ya sabes cómo es Isabella y nos encontramos con Joel mientras le buscábamos algo a él. –hablo rápido y eso le causa risa. –Voy por un poco de agua.
Me acompaña hasta la cocina, y me encuentro con que ya está casi todo listo para la cena, la comida está casi lista.
Ver tanta comida, me da hambre, espero que pase rápido lo que queda hasta la cena.
Vamos hasta la habitación para cambiarnos, al menos yo. Cambio mis jeans por una falda y unas medias del mismo tono, busco un suéter y me quedo con los mismos zapatos, por suerte se me había quedado unas prendas de ropa en la maleta de Zayn.
Nos quedamos viendo un capítulo de Arrow, ambos quedamos muy intrigados con el final del capítulo, pero ya queda poco para que comiencen a llegar los invitados y tenemos que ver que nos falta por hacer.
(...)
Nuestros invitados ya están acomodados alrededor de la mesa y todos estamos disfrutando de la rica cena, un ambiente alegre y cálido. Zayn toma mi mano firmemente, le doy una mirada de complicidad, le susurro que se relaje.
Todos parecen estar hablando y disfrutando, en eso Zayn decide hacer un brindis y se levanta. Sé lo que se viene, mi nervios suben, se duplican, miro a mis padres e intento imaginar que es lo que dirán o que pensaran acerca de esto... de todas formas, sólo nos estamos comprometiendo, tampoco nos vamos a casar mañana.
-Quiero brindar, porque estamos todos aquí y también darle las gracias por estar con nosotros. –sonríe nervioso. –Lamentamos no haber estado para año nuevo... aunque tampoco lo lamento mucho, nos merecíamos aquellas vacaciones y hay que admitir que Venecia es perfecto. –todos rieron. –Bien, prosigo, quisimos hacer esto...
-¿Qué requiere tanta formalidad? –pregunta con gracia Doniya. Trisha le da una mirada seria. –Perdón.
La apunta con la copa y le sonríe. –Bueno queremos decirles que _____ y yo.... –hizo una pausa, todos pusieron caras como empezando a imaginarse un sinfín de cosas. –Estamos comprometidos, nos comprometimos. –soltó al fin.
Se escucharon diferentes cosas, ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Es broma? Nuestros padres sólo se quedaron en silencio y nos miraron.
-¡Felicitaciones! –rompe el hielo Doniya. –Me alegro mucho por ustedes.
-También yo, ¡Felicitaciones! –Isabella comento con su habitual alegría.
-¡Felicitaciones! –se siguieron escuchando, pero de nuestros padres, nada.
-Me lo tomo por sorpresa... pero, me alegro por ustedes. –mi madre se levanta para envolvernos en un abrazo.
-Aún no lo puedo creer, ¿Cómo es que no lo sabía? –Trisha sonríe. Hace lo mismo que mamá.
Zayn observa a mi padre. –Amo a su hija, de verdad que lo hago. –mi padre asiente.
-Así veo, espero que la cuides, que se cuiden, se protejan ¡felicitaciones! –también se levanta y nos da un abrazo.
El padre de Zayn, lamentablemente no pudo asistir, por asuntos del trabajo, pero se lo contamos antes, en la mañana del mismo día y dijo que vendría en el fin de semana para felicitarnos. Le pedimos que nos guardara el secreto y lo hizo.
Todos se fueron acercando para abrazarnos y brindarnos sus mejores deseos, mis amigas estaban muy entusiasmadas y a la vez muy alteradas por no haberles comentado nada.
En conclusión, fue una noche espectacular, nos quedamos hasta tarde compartiendo, y respondiendo muchas preguntas, todos querían saber los detalles.
Esa noche decidí irme con mis padres, seguramente querían hablar conmigo, pensé que sería lo mejor y él también necesitaba hablar con su familia. Jess durante el viaje no dejaba de hablar de lo feliz que estaba por nuestro compromiso.
Al llegar a casa corro al baño, me urgía desde hace mucho, luego cuando termino veo que están esperándome en la sala, o así parece, me acerco cautelosa.
-No te asustes –dice mi padre al ver mi cara. –Sólo queremos hablar contigo, no sé, darte consejos y hablarte de lo que es el compromiso.
-Sólo estamos comprometidos, no nos vamos a casar mañana... ni siquiera tenemos fecha o algo por el estilo. –me apresuro en decir.
-Lo sabemos, pero el comprometerse es algo importante, hija. –mamá comenta con voz suave. –Dieron un paso más, es algo serio, formal. Cuando uno se compromete es porque realmente quieres algo, en este caso, quieres a una persona, lo amas. Esta persona necesita respeto, que seas un apoyo, fidelidad, confianza y cariño...
Papá juega con sus manos, hasta que finalmente habla. –Realmente te has convertido en una mujer –sonríe un tanto desanimado, como si estuviera triste. –No quería aceptarlo, pero ya es obvio. –abro la boca para decir algo, pero el continúa hablando. –Me alegro del paso que han decidido dar, pero quiero asegurarme que estás segura, que de verdad lo amas, no quiero que luego te arrepientas.
-¿No es obvio que se aman? –intervino Jess. –Han estado locos el uno por el otro, desde que tengo memoria, aunque se separaron, volvieron a encontrarse, eso es obra del destino. Ellos se aman, es cosa de ver como se miran, es como si nadie estuviera a su alrededor y déjenme decirles que constantemente están rodeados de personas, Zayn es una figura pública, por lo tanto hay miles de cámaras a su alrededor y no importa cuántas chicas estén pidiendo una foto o un autógrafo e incluso modelos que coqueteen con Zayn, él siempre tiene los ojos y su mente en _____, es cosa de ver las noticias, no mira a nadie de la forma en la cual te mira a ti. –fija sus ojos en mí, dándome seguridad. –Tú lo amas, y eso se puede sentir... incluso, debo admitir que siento un poco de envidia, espero encontrar un amor así, o como el de ustedes. –refiriéndose a mis padres.
-Quédate tranquila, que encontrarás a alguien que te ame, sólo sé paciente. –le sonrío.
-De eso no lo dudes, el amor sabe hacer su magia. –mi madre pasa su brazo alrededor de sus hombros con ternura.
-Espero que no sea tan pronto. –comenta un tato celoso. Reímos.
En conclusión, el amor es algo complicado, pero sabe dulce cuando sabemos cuidarlo, el amor es un conjunto de emociones, un conjunto de sentimientos. Se está tan lleno de ellos, que a veces pareciera que se fuera a explotar, pero el amor nos puede salvar, nos puede curar, hay que estar abiertos al amor, mientras más se le niega la entrada se vuelve peor, el amor quiere ser enfrentado, sentido, disfrutado.
No le cierren la puerta al amor, quizás pueda encontrar un amor como el mío. ¿Quién sabe?
FIN.
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Bueno, quizás no es el final que esperaban, y lo lamento, pero para ser sincera no me sentía con mucha inspiración, pero intenté que quedara bonito. Espero que les haya gustado, aunque fuese un poquito jajaja
Les agradezco que hayan leído, no saben lo feliz que me hace que lo hayan hecho, cuando comentan o le dan un voto, sonrío, porque a alguien le ha gustado lo que he creado, por lo tanto muchas gracias!!! Thank you so much beauties.
Aprovecho de comentarles que comenzaré una nueva y será de Louis :o Espero que la lean.
Muchos abracitos para todas.