Capítulo 28. Mis mentiras.

359 47 15
                                    


Me despedí de Dylan con prisa para poder correr por el frío jardín de la escuela hasta llegar al último auto estacionado casi escondido. Me apuré a abrir la puerta entrando, revisando que nadie estuviera viéndome.

-Hola...-Saludé cerrando la puerta del auto negro.

-Tu escuela es de colores. -Dijo Alec haciéndome reír un poco.

-Sí, ponen muchas decoraciones de navidad. Se ve muy linda ¿Verdad? -Pregunté. Él seguía inspeccionando la escuela pasando sus bonitos ojos azules de un lugar a otro.

-Hawtz siempre se ve bien. -Aseguró él ya prendiendo su auto. Hice una mueca.

-Tú deberías estar aquí, y yo en la escuela pública. -Le dije haciéndolo mostrar una expresión de ridiculez. -Hablo enserio. -Le dije. -A mí me gustaba allá, y tú odias esa escuela, pero pareces amar Hawtz.

-No es que ame Hawtz, sólo es que no soy tonto ni ciego. No tiene nada de malo admitir que Hawtz es un lujo. -Decía él. Hice una mueca.

-Sólo por fuera, Alec. Los jardines son bonitos, y los edificios grandes y elegantes, pero...eso es todo. La gente de aquí es terrible.

-Tú no lo eres. -Aseguró él.

-Bueno no soy la única alumna. -Le recordé yo. Se encogió de hombros en señal de que no le importaba. -Por cierto, la mamá de Dylan ya nos está haciendo los vestidos del baile, fui el sábado a que me tomara medidas. -Le conté emocionada.

-¿Serán...caramelos? -Recordó él.

-¡sí! Vestiremos a rallas blancas y rosas, para simular bastones de dulces, como las chicas disfrazadas en la película, incluso usaremos una diadema de peluche rosa, muy Grinch ¿no?

-Sí, eso creo...-Dijo él quizás sin entender bien de qué hablaba, por lo que sonreí.

-Ah ya verás cuando esté lista, tenemos un dibujo de como esperamos que quede el vestido, te lo enseñaré en la florería. -Le sugerí.

-Bien. -Asintió aun conduciendo. Yo estaba emocionada por lo del vestido por lo que me puse a buscar en mi celular la imagen del diseño hecho por Dylan y yo con ayuda de Edith.

-Mi hermana nos ayudó porque ella tiene más estilo, es buena con eso, incluso a Axel le gustó el diseño final, es muy...ah...bueno...-Me fui callando al darme cuenta de que había mencionado a Axel. Era lo único de lo que no debía hablar con Alec. Supe que él me había escuchado y que estaba insatisfecho, pues ya no dijo nada por un minuto entero.

-Y... ¿Qué tal el regreso de Axel? ¿Cuánto tiempo se queda? -Me preguntó finalmente.

-Uhm hasta Enero. -Le fui honesta. Se vio insatisfecho, pero asintió como haciéndose de la idea.

-Le mentiste ¿no? -Me preguntó. Lo vi confundida. -Él no sabe que pasarás la tarde conmigo. -Acusó.

-No. -Admití yo. -Nadie sabe. -Le advertí. Asintió un poco en comprensión. De nuevo ya no decía nada.

-Alec, tú sabes que me gustaría llevar una amistad normal...

-Lo sé. -Me interrumpió él. -No me molesta que me escondas de tu familia, sólo me...preocupa. -Admitió él.

-¿te preocupa? -Repetí confundida.

-¿Qué pasaría si tu familia se entera? -Preguntó.

-No importa, no lo sabrán. -Le aseguré. Él se vio dudoso. Yo suspiré. -Axel es el único que podría sospecharlo, pero...no importa, está ocupado esta tarde. Sus amigos llegaron a la ciudad y pasarán el lunes juntos, quizás también mañana.

Deseos de Cristal (#3 Saga Cristal)Where stories live. Discover now