Deseos de Cristal (#3 Saga Cristal)

Capítulo 19. Mermelada y Chocolate.

El jueves le había pedido a Bluebelle su auto para poder ir a la escuela. Mentí diciendo que después de clases quería ir a casa de Dylan y que necesitaría el auto para regresar a casa. Después de la escuela fui directo a la tienda para comprar helado de distintos sabores. Igual compré jarabe de fresa y chocolate, crema batida, chispas de chocolate, platos, cucharas de desechable, galletas, y unos jugos. Me había cambiado por ropa casual en la escuela y traía la mochila llena de los ejemplares más nuevos de las revistas de mis tías.

Fui a casa de Jeff para darle a Rose la tarde de relajación que le había prometido. Me senté frente a ella en el sillón y nos servimos helado para llenarlo de crema y jarabe, lo comimos en lo que ella me pintó las uñas de la misma forma que le hacía a sus clientas en la estética.

-Quedaron hermosas. -Dijo Rose satisfecha haciéndome reír un poco viendo mis uñas color menta.

-Sí, muy lindas. -Admití.

-¿Qué estabas viendo? -Preguntó Rose acercándose más para ver la revista en mi regazo. Señalé el vestido rosa de la modelo.

-Ya me quiero casar...-Murmuré.

-Eso no es de bodas, nena. -Dijo extrañada en lo que veía mi revista. Le sonreí un poco.

-Lo sé, pero yo quiero uno así de esponjado...pero en blanco y con holanes...-Le dije.

-Espero que tú sí te cases, nena. -Murmuró. Levanté la vista para verla.

-Tú si lo hiciste. -Le dije, me miró desaprobatoria. -Tu vestido fue muy bonito. -Le dije. Me sonrió un poco. -Una vez vi una foto, antes, cuando el abuelo vivía tenía la fotografía de tu boda, Samuel estaba muy joven...y tú...más. -Dije yo. Suspiró.

-Era una niña, Emi. Diecinueve años.

-Vaya...-Le dije pensando en eso. -¡Es como si Axel se estuviera casando ya! -Exclamé horrorizada con la idea haciéndola reír. Asintió un poco.

-Es como si Axel se casara en Enero. Me casé un mes después de mi cumpleaños porque ya no...ya no se podía esconder el embarazo. -Contó ella un tanto avergonzada. -Samuel se quiso hacer cargo como era debido...-Murmuró con la atención en su plato de helado. Ella se veía pensativa, pero asintió un poco.

-El vestido era...lindo, Samuel lo compró...-Murmuró. La vi curiosa.

-¿Tú lo elegiste? -Le pregunté. Ella asintió.

-Sí...pero del área de damas de honor, fue un vestido sencillo, color blanco, sin mangas, sólo ajustado del busto y caída suelta para que no se fueran a notarse mucho los pocos meses que tenía de embarazo...fue la boda más rápida y sencilla que te puedas imaginar. -Dijo antes de por fin subir la cuchara para probar su helado. Entonces sólo le sonreí un poco para cerrar mi revista.

-¿Pero la pasaste bien? -Pregunté yo. Se vio pensativa. Se encogió de hombros.

-Quizás...-Susurró. -Creo que sólo lo hicimos por mi niño...Axel...-Murmuró. Asentí comprendiendo. Sonrió a la nada. -Lo haría mil veces, cualquier sacrificio, todo valdría la pena por volver a tener a mi bebé como antes, viviendo conmigo, queriéndonos tanto. -Me decía ella o quizás hablaba consigo misma, pues ni siquiera me veía. Dio un suspiro y entonces si me miró, me sonrió con algo de lastima.

-Fue el bebé más precioso. -Aseguró haciéndome reír un poco.

-Seguro que sí. -Dije sin duda alguna. Ella asintió con una sonrisa triste.

-Y... ¿Qué le gustaba hacer a Axel cuando era bebé? -Pregunté. Sentía que Axel había formado parte de mi vida entera, incluso de cuando éramos bebés, aunque en realidad ese no hubiera sido el caso. Me gustaría saber cómo era él para enserio saberlo todo de él.