Capítulo 26. El sueño de toda chica.

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Después de la hora del almuerzo, entré a mi clase de estudio de las artes quedando confundida al notar que Dylan no había llegado. Miré los asientos de atrás donde ya estaba Tod hablando con Jasmine y Olive. Ahí era donde se sentaba Ángelo y sonreí al notar que ninguno de ambos había llegado. Supuse que seguían afuera comiendo.

Me senté en mi lugar sacando mi laptop. Abrí el portal de la escuela dispuesta a adelantar una de las tareas que debía entregar este fin de semana.

-Lucy ¿Dónde estuviste? -Escuché a Olive preguntar confundida por lo que miré la entrada de inmediato notando a Lucy llegando al salón con una cara de pocos amigos.

-Por toda la maldita escuela. -La oí diciendo de malas. Sonreí regresando la atención a mi laptop suponiendo que Lucy había perdido toda su hora de almuerzo buscando a Dylan y Ángelo.

-¿Por qué? -Le preguntaba Olive.

-Nada. -Oí a Lucy decir peligrosamente cerca. Inmediatamente me cerró mi laptop, apenas y alcancé a quitar mis dedos del teclado. La miré molesta.

-Casi me dejas sin dedos. -La acusé. Se agachó a mi estatura.

-Me mentiste. -Me dijo. Le negué.

-No sé de qué hablas. -Susurré. Abrió la boca, pero entonces las dos escuchamos la risa de Ángelo por lo que miramos la entrada del salón. Él iba llegando riendo con Dylan que quizás había dicho alguna broma.

Lucy de inmediato se dio la vuelta apurándose a ellos haciéndome poner en pie por el susto.

-¿A dónde fuiste todo el almuerzo? -La oí reclamando. Ángelo perdió su sonrisa. La miró con cierto susto.

-Es...salí por hamburguesas. -Dijo Ángelo confundido por el enojo de Lucy, quien lo tomó de la mano para llevarlo a una esquina del salón para ambos hablar en voz baja. Dylan los vio en silencio unos segundos y luego inició camino a mí. Nos sentamos en nuestros lugares.

-Así que...hamburguesas. -La molesté en voz baja haciéndola reír un poco. Me miró.

-Gracias...-Susurró con sus ojos cafés brillándole de alegría y agradecimiento.

-¿Hablaron mucho? -Quise saber. Asintió un poco. -¿de qué? -Reí con emoción. Dylan suspiró.

-Pues...de ti. -Dijo ella. La vi confundida. Hizo una mueca. -Creo que es obvio que le gustas mucho. -Dijo ella robándome algo de alegría.

-Dylan, no pienses así. -Negué yo.

-Está bien, Emi. Me agrada que seas tú quien le guste y no Lucy. Preferiría que te casaras con él a tener que ver a Ángelo teniendo una sola cita con una chica nefasta. -Me dijo ella haciéndome resoplar con disgusto.

-Nada de eso. Creo que tienes oportunidad con él. -Dije haciéndola verme con horror.

-Ya quisiera yo. -Dijo haciéndome reír un poco.

-Saltó a tu rescate en la cafetería, comieron juntos a la hora del almuerzo.

-Salió a mi rescate porque somos amigos, y porque quiere quedar bien contigo. Y la única razón por la que comimos solos fue porque tú no quisiste acompañarnos.

-Dylan, deja de ser tan pesimista.

-No soy pesimista, soy realista. Y ya dije que no importa. El almuerzo de hoy fue...enserio genial, Emi, no tienes idea. -Me contó con ilusión haciéndome sonreír. -No me engaño a mí misma, no seré del interés de Ángelo, pero no me importa si puedo seguir teniendo ratos así con él. -Me aseguró en voz baja.

Deseos de Cristal (#3 Saga Cristal)Where stories live. Discover now