Capítulo 33: Estallido

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Nota: sé que demoré al publicar este capítulo, pero entre el trabajo y otros proyectos no he tenido tiempo de calidad para escribir este limón. Es un poco diferente a los anteriormente escritos, así que les aconsejo que relean el capítulo anterior para comprender mejor las emociones de Bakugou en esta parte.

***

El contacto era suave al principio, pero sus labios se volvieron ávidos y voraces, aumentando la intensidad de los besos compartidos. Su lengua buscó la tuya mientras te atraía más cerca de su complexión masculina, de modo que su abdomen plano quedaba presionado contra tu vientre y su pecho musculoso empujaba el tuyo con cada suspiro contenido.

Notabas la urgencia de su toque posesivo, luchando por mantener el dominio cuando también descubriste que estaba temblando. Su respiración también era agitada y sus palpitaciones se salían del ritmo establecido cuanto más te estrechaba entre sus brazos, siendo muy consciente de sus tensos gruñidos en cada beso. La calidez que emanaba debido a su elevada temperatura corporal te provocó una extraordinaria sensibilización ante su contacto, sintiendo que su calor te quemaba por dentro como un fuego que arrasaba con tus terminaciones nerviosas, te derretía y te hacía saber que esas mismas llamas que prendían tu corazón por él jamás se extinguirían.

Su anatomía te empujó suavemente hasta que tu espalda dio contra el armario, dándote así la oportunidad de envolver tus brazos alrededor de su torso para apreciar la dureza de sus músculos cuando te otorgó un poco de espacio en tu retroceso. El tacto de su camisa no hacía justicia con el blancor y la suavidad de su piel, pero en ese momento estabas demasiado pendiente de cómo sus muslos y los tuyos se habían entrelazado mientras sus manos continuaban acunando tu rostro con cariño.

Su toque era tan dulce, gentil y áspero por el grosor de sus palmas que supiste que nadie más que él podría abarcar tu cuerpo y tu corazón con tanta intensidad y devoción. Sus gestos cuidadosos, sus besos pasionales, sus acciones tan sinceras y genuinas... Todo era infinitamente mejor al conocer su faceta arrogante y orgullosa que protegía su lado más blando y protector.

Bakugō Katsuki era una auténtica contradicción y su comportamiento era difícil de prever, mucho menos saber qué estaba pasando por su cabeza, pero él era tuyo y te demostraba a su manera cuánto significabas sin necesidad de expresarlo con palabras.

Incluso con sus gruñidos y típicos chasquidos de lengua te bastaba.

De pronto, sus manos se dirigieron a las tuyas para apoderarse de tus muñecas cuando él las colocó en la parte superior de sus pectorales, dejándote un poco confusa su acción hasta que sentiste el latir desbocado de su corazón. Su boca regresó para situarse sobre tus labios, marcándolos con mordisqueos provocativos con sus dientes y succiones de labios cuando los atrapó entre los suyos. Sabías que Bakugō te había indicado con ese gesto que las palabras eran insuficientes para demostrarte cuan intensos eran sus sentimientos... y por ello te habló a través de sus fuertes palpitaciones, ya que eran imposibles de menguar.

Para entonces tu mente vagaba por la bruma del deseo y un estremecimiento tras otro te invadía y sacudía allí donde sus manos se deslizaban por tus costados, dirigiéndose hacia la curvatura de tu cadera para presionar sus palmas de manera autoritaria, como si te dijera con el lenguaje de su cuerpo y sus movimientos que te quería en ese lugar, en ese instante... y que el dormitorio quedaba muy lejos de donde pensaba tomarte.

Y tú deseabas que te hiciera suya ahí y ahora...

Desabrochaste los botones de su camisa cuando sus manos se adentraron por debajo de tu blusa, agradeciendo que por una vez habías elegido un conjunto de dos piezas al sentir el contacto recio y cálido de su diestra en uno de tus senos. Lo apretujó con ansia y tu razón voló muy lejos, creyendo que todo se difuminaba por el apremio de sus caricias, no queriendo demorarse en preliminares cuando era incapaz de contener sus ganas.

My little red temptation (+18) [Katsuki Bakugou x lectora]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora