La Joya del Mar (Percy Jackson Fanfic) Book 1. The Children of Poseidon

Una llegada inesperada

-¡Ruby! –gritaron casi todos al mismo tiempo.

Percy se acercó corriendo hacia Ruby y la sostuvo de un brazo. En cierta forma, le asombró que Ruby recargara un poco de su peso en él y no lo apartara.

-Ruby, ¿qué diablos haces aquí? –exclamó Will, acercándose a la hija de Poseidón. –Literalmente, casi te mueres, y tienes el tobillo destrozado...entre otras cosas.

Ruby rió con sorna, pero detuvo su risa, ya que sus labios partidos de seguro no hacían la acción muy agradable.

-Estoy bien...sólo...me quedé fuera de combate por unas horas... -resolló, tratando de sonreír.

Percy iba a ayudarla a sentarse, pero Angie se abalanzó hacia la chica y la envolvió en un abrazo que parecía que le volvería polvo los huesos a Ruby.

-Yo...también...te...extrañé... -jadeó Ruby, intentando abrazar a su mejor amiga. –Ay...Angie...duele...Angie...

La hija de Apolo pareció advertir que estaba prácticamente estrangulando a su mejor amiga, así que la soltó y Percy tuvo que sostener a Ruby por la espalda, ya que la chica resollaba por la falta de aliento.

John y Charles también se acercaron a Ruby, pero la chica puso una mano delante, medio riéndose.

-Solo un beso o un "hola". –advirtió, riéndose –Si Angie no tiene músculos, ustedes me van a matar si me abrazan.

John y Charles rieron y le dieron un beso en ambas mejillas a Ruby, la cual medio sonrió.

Parecía agotada, pero también se veía feliz por estar de vuelta.

-¿Dónde dejaste a Rick? –le preguntó Annabeth, sonriendo de lado. Ruby intentó sonreír pícaramente.

-Le tranqué la puerta. Si despierta, se durará unos cuantos minutos en salir. –rió la chica.

Quirón se acercó junto con el entrenador Hedge, que recargaba su peso en su bate de béisbol.

-Ruby –dijo el centauro, sonriéndole –me alegra que estés consciente, pero creo que deberías volver a la cabaña de Poseidón. Casi te perdemos ayer.

Ruby negó, algo más seria.

-Aprecio su preocupación por mí, Quirón, pero soy la única que sabe lo poderoso que es Xaoc ahora y soy la única que ha logrado, apenas, derrotarlo. –repuso la chica, sonriendo de lado.

Quirón pareció a punto de protestar, pero Rick ya le había advertido lo terca que era la chica, así que lo dejó correr.

El entrenador Hedge se acercó un poco a la chica.

-¿Segura que te sientes bien, Ruby? –le preguntó. Ruby suspiró.

-Lo que se puede decir bien en mi estado...supongo que sí. –dijo ella, mirándose de arriba abajo. Percy torció la boca. No le gustaba mucho el tono de voz de su hermana. Le preocupaba.

Ruby los miró, y sonrió.

-Bien...¿seguimos con el consejo de guerra? –sugirió, pero de nuevo la puerta abriéndose los interrumpió.

En el portal, jadeando y acalorado y con una mirada asesina estaba Rick Silver, apoyándose del marco de la puerta. Señaló a Ruby con un dedo astillado.

-¿Qué diablos haces levantada? –le espetó a la chica. Ruby sonrió pícaramente.

-Nos despertamos bravos, ¿eh? –le dijo. Se separó de Percy y, cojeando dolorosamente y con las piernas flaqueándole, se acercó a Rick, lo agarró del cuello de su chaqueta y le plantó un beso en los labios.