"Cree en mi" (Pausada Temporalmente)

Capítulo 35: INSPIRACIÓN.

-Ella es Sailor Star Strength. - Presentó Yaten sin mayor importancia. - Serena y Mina - Dijo señalando a cada una al decir su nombre. 

-Mucho gusto - Saludaron ambas chicas en una reverencia cortés. Sailor Strength saludó de la misma forma pero su mirada de pocos amigos se quedó fija en Serena. 

La chica de cabellos dorados se sintió incómoda ante su presencia. 

-Con permiso - Dijo Strength después de unos segundos retirándose del lugar. 

-¡Yaten! - Mina se colgaba del brazo del peli plateado. - ¡Me alegra mucho volver a verte! - 

-Si si como sea - le respondió él apartando su flequillo. 

-¿Podrían dejarnos solos unos minutos? - Seiya le habló a Mina y a su hermano. 

-Esta bien, pero para que sepan estoy enterado de todo lo que ocurrió… Tienen cinco minutos - Yaten miró a Serena por sobre el hombro antes de salir junto con Mina de la alcoba. Una vez cerrado el ventanal, Serena empezó a hablar:

-Seiya, estaba muy preocupada por ti, cuando supe que no estabas en el hospital yo… - 

-No es necesario… - La interrumpió él. - No debes preocuparte, ya no somos amigos, no hay ningún lazo que te una a mí. - Volvía a apoyarse en la baranda ignorando su presencia. 

-No Seiya, ¡estás equivocado!- Los ojos de Serena se pusieron vidriosos al oír las palabras de su amigo de Kinmoku. 

Seiya tomó con brusquedad la mano de la Princesa de la Luna y la llevó hacia su cuerpo, cerca de su pecho. 

-¿Sientes eso? - Él la miraba con molestia y tristeza. - Es mi corazón que ya no duele… Aléjate de mí - 

La chica de cabellos dorados pudo ver en una fracción de segundos un leve destello oscuro en los ojos del Starlight. 

-¡Suéltame! ¡Tú no eres Seiya! - Le gritó, arrebatando de un tirón su mano del agarre. - ¿Qué le hiciste a Seiya? ¡Contesta! - 

-¡¿De qué diablos hablas?! - Se defendió él. 

Yaten abrió el ventanal al escuchar la discusión. 

-¿Qué sucede acá? - Miró de manera acusatoria a Serena. 

Seiya, se agarró con ambas manos su cabeza, comenzó a quejarse por el dolor. Sailor Strength llegó a su lado y lo ayudó a caminar de vuelta a su habitación. 

-Será mejor que se vayan, Seiya aún está débil - dijo de manera dura el peli plateado. 

-Serena… - Habló Mina tomando la mano de su amiga. - Es mejor irnos, Yaten tiene razón él necesita descansar. - 

Serena cuando ingresó a la sala, echó un último vistazo a la habitación de su amigo, viendo a la hermosa mujer de cabello violeta ayudar a desprender la camisa de Seiya, dejándolo con el torso desnudo solo cubierto por unos vendajes a la altura de la herida. Strength al darse cuenta de la espectadora, cerró lentamente la puerta sin dejar de mirarla. 

Mina arrastró a su amiga afuera del departamento al ver que ella no se movía, despidiéndose de manera fugaz del peli plateado. Una vez en el ascensor ella le dijo:

-Serena, arriba esos ánimos, ya sabemos que él se encuentra bien gracias al poder sanador de Yaten. - 

La Princesa de la Luna volteó a ver a su amiga a los ojos para prestarle atención. 

-Yaten y Sailor no sé cuánto fueron las que sacaron a Seiya del hospital y lo trajeron aquí para curarlo. Acabo de hablar con  Amy y las demás para avisarles que todo está bien. - Le dio una sonrisa a su adorada Princesa. 

-Nada está bien, Mina - Serena hablaba con voz quebrada. - Él ya no me quiere, no sé exactamente que le ha sucedido, ha cambiado… Lo sé, lo siento en mi corazón cuando me habla, cuando me mira, cuando sus manos frías tocan las mías… - Unas cristalinas  lágrimas caían por la mejilla de Serena. 

Mina la abrazó, no sabía cómo más apoyarla. 

-Tranquila, sea lo que sea lo averiguaremos, eso es palabra de Scout - Dijo besando tiernamente su cabeza. 

⭐🌙

Darién llegaba a su hogar, después de haber hecho trámites universitarios y encargos pendientes; había comprado un hermoso arreglo de rosas rojas, el cual estaba destinado a llegar a manos de su amada junto con una tarjeta que él mismo escribiría. Caminó hacia la gran ventana de la sala, apartando la cortina para dejar entrar la luz del día y buscar inspiración, cuando volvió a verla. Ella vestía con unas calzas, un peto rosa pálido y bailaba de un lado a otro con suma elegancia, daba brincos de vez en cuando levantando sus piernas con agilidad, giraba su cuerpo en sí dando una Pirouette perfecta; él estaba anonadado de tan simple espectáculo, mientras observaba comenzaba a escribir. Nanami seguía danzando al ritmo del ballet, llegó frente a ese amplio espejo que tanto le encantaba y puso sus manos en el cuello, bajando por su cuerpo, acariciando lentamente sus senos, su abdomen, sus caderas con un sensual movimiento de su cuerpo dejando caer su cabeza hacia atrás con los ojos cerrados. Luego de eso volvió a repetir su hermosa coreografía. 

El sonrojado Príncipe de la Tierra sacudió su rostro apartándose del lugar, no quería verse delatado. Se sentó en la mesa de mini bar y comenzó su breve escritura. Le daría unos días a Serena, para que recapacitara, los cuáles él aprovecharía en mandarle bellos detalles en busca de su reconquista. 

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Espero disfruten los capítulos, nos leemos luego... ✌️

Agradecida de sus comentarios y no se preocupen, terminaré la historia con una sorpresa :)