"Después de la batalla con Caos una nueva amenaza aparece, la vida tranquila se acaba para nuestras Sailor Scouts y el regreso de unas estrellas fugaces sorprenden a todos. Sin embargo, algo atormenta a Serena Tsukino en sus sueños ¿Qué será? ¿Deseo...
Serena abrió completamente sus ojos, ante la afirmación de su querida amiga, pensó que ella no se había percatado de esa escena pero en realidad los había estado espiando.
-¿No crees que estás mal entendiendo? -
En realidad Seiya no la iba a besar ¿o si?
Sacudió su cabeza, él no se atrevería sin su consentimiento, las imágenes de aquel sueño vinieron a su mente, donde pudo sentir el feroz deseo del chico.
-Sé lo que vi, no es necesario que me mientas - Le dijo Mina, ahora con voz dulce. - Jamás sonríes de esa forma cuando estas con Darién-
La princesa de la Luna se había quedado sin habla, ¿Tan notorio eran sus sentimientos? No, no era así cómo debía ser, el futuro dependía mucho de sus decisiones, de sus actos y de lo que podía llegar a sentir su corazón.
-Será mejor que me vaya - La miró con ojos tristes, llevaba el peso del futuro sobre su espalda y no sabía qué hacer con tan enorme responsabilidad, era tan joven e inmadura aún.
-Serena sabes que cuentas conmigo - También Mina comprendía cómo se sentía emocionalmente pero las misiones de Sailor Scouts eran su prioridad; Serena la observó con nostalgia y asintió.
Ambas chicas se despidieron y sus caminos se separaron para dirigirse a sus respectivos hogares.
⭐🌙
Casa de los Tenou:
-¡Haruka, Michiru! - La sobre exaltada Setsuna interrumpía a la pareja que yacía en el sillón viendo tranquilamente una película. Las dos mujeres se pusieron de pie de un salto y siguieron apresuradamente a la guardiana del tiempo, quien las condujo a la habitación de la pequeña Hotaru.
La chiquilla estaba sentada en el borde de su cama con su mirada perdida. Haruka se le acercó y tomó una de sus frágiles pequeñas manos.
-Hotaru ¿Cómo te sientes? - La niña parecía no escucharla, sus manos estaban frías y unas gotas de sudor aún permanecían en su frente, debido a la fiebre.
-¿Cuánto rato lleva despierta? - Preguntó la mujer de cabello turquesa desde el marco de la puerta.
-Hace un momento... - Le explicaba Setsuna. - Fui a la cocina por más agua y la encontré así, sentada en su cama. - Su mirada solo era de preocupación hacia la pequeña de melena oscura a quien consideraba una hija. Una leve aura de energía de color violeta comenzó a emanar del cuerpo de la niña y los rostros de las mujeres presentes palidecieron:
-¡¿Qué es ese poder?! - Exclamó Haruka, viendo estupefacta como la luz crecía más y más haciendo que la niña se suspendiera en el aire. Las tres Sailor del Exterior llevaron sus manos cerca de su rostro para tapar la luz proveniente de la muchacha:
-"Dos caras tened el destino, si una joya usad todo acabará pero dañará lo más querido y ambas caras perecerán" - Diciendo esto, la pequeña Hotaru cayó al suelo inconsciente, estaba ardiendo en fiebre nuevamente.
-¡Hotaru! - La Sailor del Tiempo se apresuró a tomarla en su regazo y la recostó en la cama con ayuda de Michiru; las mujeres la observaban con expresión azorada ¿Qué significaba lo que acababa de decir?
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
⭐🌙
Casa de los Tsukino:
Cuando terminó de darse un reconfortante baño, Serena le relató a Luna todos los acontecimientos sucedidos durante el día, sobre la nueva misión que tenía el joven del grupo Threelight en el planeta tierra, la reunión en el Templo Hikawa con la inesperada visita de la pareja de Sailor Exteriores, el malévolo hombre que atacó a Seiya y a ella camino a casa, la aparición de Sailor Venus quien logró ayudarlos justo en el momento indicado y cómo apenas llegaron al departamento del joven de coleta en el auto abollado; pero hasta ahí llegó su historia, prefirió omitir el suceso de la habitación y lo que hablaron con Mina, simplemente no era correcto, se prohibía pensar sobre sus sentimientos, ellos sólo pertenecían a un hombre, al Rey Endymion.
-Serena es mejor que llames a Darién, para informarle lo que está pasando, él también puede correr peligro - Le dijo Luna preocupada.
-Si... tienes razón - Le respondió la chica desviando la mirada con melancolía. Se acercó a su escritorio, dudó en levantar el auricular ¿Qué le preocupaba realmente? Marcó el número que él hace un tiempo le había entregado y esperó. Después de unos segundos, su novio contestó:
-Sí ¿Diga? -
-Hola Darien, soy yo... Serena ¿Cómo te encuentras? Lamento si te molesto - Le decía con tono suave mientras enredaba uno de sus dedos en su cabello dorado.
-Hola Serena, estoy bien, no te preocupes hoy entro un poco más tarde a clases ¿Cómo va todo allá? -
- Acá... - Tragó saliva. - Todo está... Bien - Luna la miraba sin entender. - Ya sabes, las chicas, el colegio... - Trató de sonar convincente mostrando entusiasmo.
- Me alegro mucho princesa... - Clamó Darién; Se escuchó el sonido de un timbre al otro lado de la línea. - Serena debo colgar, te llamaré pronto ¿Está bien? -
-Sí, cuando puedas... Te extraño -
-Y yo a ti. - Y él finalmente colgó.
-Serena ¿Por qué no le dijiste nada de lo que ha pasado a Darién ? - Le exclamó molesta su amiga felina.
La princesa volteó su rostro para mirarla, las lágrimas caían por la delicada piel de ella:
-Lo siento Luna, pero... no pude... - Sus lágrimas fluyeron mientras lloriqueaba. - Le costó mucho que lo volvieran a recibir en la universidad, no puedo quitarle la oportunidad que tiene de al fin cumplir su sueño... Sé que con la ayuda de las chicas, esto se solucionará y cuando llegue el momento se lo diré-
La gatita no le respondió nada y vio como ella se acostaba y lloraba en silencio.
Luna había visto llorar a su princesa en varias oportunidades sin que ella se diera cuenta, pero tenía la sensación de que esa pena había crecido en el último período, pues en sueños ella sollozaba e imploraba que esa persona tan importante no se fuera.
---🌟---
Hasta acá el capítulo de hoy, espero se encuentren muy bien todos!!
