"Después de la batalla con Caos una nueva amenaza aparece, la vida tranquila se acaba para nuestras Sailor Scouts y el regreso de unas estrellas fugaces sorprenden a todos. Sin embargo, algo atormenta a Serena Tsukino en sus sueños ¿Qué será? ¿Deseo...
Estaba amaneciendo para cuando Darién tomaba el último sorbo del vaso que contenía whisky, su noche fue tortuosa y apenas si logró dormir; invadido por la pena y rabia, se puso a beber observando fotografías de su novia junto con su hija "Sólo está confundida, volverá a mí" pensaba una y otra vez mirando el alba por el gran ventanal de la sala. Algo llamó su atención, una escena que no todos los días podía contemplar. A lo lejos divisó como Nanami se movía con mucha gracia en el piso de su departamento, era fácil de ver todo lo que hacía, tenía las luces encendidas de la sala y las cortinas abiertas al tope. Se desplazaba con elegancia de un lado a otro, dando suaves brincos y volteretas, al parecer bailaba música clásica. Su cuerpo estaba solo cubierto de un peto deportivo gris y unas pantaletas a juego. La figura que observaba el Príncipe de la Tierra lo tenía cautivado, los atributos que poseía la mujer a simple vista, hacía que no pudiera dejar de mirarla; ella se miró a un espejo que tenía en la sala y colocó sus manos en su cuello, las deslizó sensualmente por su busto, abdomen y cadera, volteando a ver hacia el ventanal. Darién quien estaba con el rostro encendido se ocultó rápidamente en el borde de su ventana, esperaba que ella no se hubiera dado cuenta que él la observaba, se sirvió otro trago más dirigiéndose a su dormitorio para descansar un poco, tenía cosas que solucionar para la universidad aún teniendo unos días libres los cuales aprovecharía para tratar de todas las formas reconquistar a su novia y sacar esa estrella del planeta.
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-"¿Y no puedo reemplazarlo? Déjame reemplazarlo…" - Seiya estaba agachado junto a Serena en la azotea de la escuela, la chica de cabello dorado tenía abundantes lágrimas en sus ojos, la lluvia pegaba en sus ropas, era el único sonido que podían percibir, ella no contestaba a su petición ¿Por qué se encontraba en esa situación? ¿Era un recuerdo?
La puerta que conducía a ese lugar se abrió y ambos miraron, Darién aparecía junto a Rini y clavaba su mirada con molestia en los bellos ojos azules de su amada.
-"¿Es él papá?" - Preguntaba la niña de cabello rosa mientras se aferraba al brazo del hombre que tenía a su lado, con miedo en su rostro. - "¡Serena, no permitas que me asesine!" - Rini corrió con lágrimas en los ojos y abrazó fuertemente a Serena; ella quedó en shock por sus palabras y solo le correspondió a su abrazo llorando amargamente. Alguien levantó su quijada y ella abrió sus ojos, ya no estaba Rini, ni tampoco Darién, todo estaba oscuro, frente a ella Seiya la mirada con dulzura.
-"Tranquila bombón" - Él parecía resplandecer levemente. - "Todo estará bien… Cree en mí… cree en mi amor." - Diciendo esto la besó en su labios y se esfumó en miles de destellos.
-Serena anda despierta… - Luna lamía la cara de la Princesa de la Luna. Ella entre risitas repetía el nombre de Seiya sin abrir sus ojos. - ¡Serena levántate! - Volvió a gritarle la minina sin resultados. - Lo siento Serena pero esto es una emergencia… - diciendo esto último levantó su pequeña pata sacando sus afiladas uñas y rasguño de una vez el rostro de la chica de cabellos dorados.
-¡¡Aahhhhgg!! - Gritó la chica, sentándose de un golpe en su cama. - ¡Luna! ¡¿Qué rayos te pasa?! -
-Al fin despiertas, Amy ha estado llamándote -
-¿Amy? -
-Si Serena, vístete de una vez... Lita despertó. -
Serena se bañó, vistió y arregló en menos de quince minutos y junto a la gatita salieron lo más deprisa rumbo al hospital.
Hospital general de Tokio:
-¡¡Lita!! - Serena se lanzó lloriqueando en un abrazo encima de Lita que aún yacía acostada en la cama del hospital. - ¡Me alegro mucho de que estés bien! -
-Serena, me alegra verte, pero… Auch! - La chica de cabello castaño se quejó por la reacción de su princesa, aún se sentía muy adolorida.
-Lo siento mucho - Dijo Serena retirándose de inmediato de encima.
-¿Qué fue exactamente lo que me sucedió? - Preguntó Lita.
Amy la observaba con ternura a un costado de la cama leyendo la receta que le habían dejado.
-No estamos del todo seguras pero creemos que fue obra del enemigo - Explicó.
-¡Lita! ¡Oh por Dios, me alegra mucho saber que estás bien! - Mina ingresaba como un torbellino y de un brinco se le tiró en un abrazo.
-¡Auch! - Volvió a quejarse ella. A Amy le apareció una gota de sudor en la cabeza.
- Chicas por favor, Lita aún está delicada… - Les reclamó la peli azul.
-Lo sentimos Amy - Dijeron al unísono Serena y Mina muy avergonzadas.
Rei quien venía junto con Mina, la saludó.
-Las flores que tenías en tu habitación estaban cargadas de una esencia oscura para absorber tu energía - Explicó la chica del planeta de fuego una vez cerca de su amiga.
-Entiendo… Esas flores me las regaló… -
-Alex - La interrumpió Serena terminando su frase. Lita asintió tristemente.
-Pensé que… yo realmente le gustaba… - Confesó ella con sus mejillas sonrosadas.
-No te preocupes, logramos destruirlo - Contó Serena optimista. - Ahora ya nunca volverá a engañarte. -
Quedaron unos minutos más hablando entre todas, hasta que por la puerta apareció un hombre bien vestido de mirada tierna; sus ojos color verde, veían a la chica de los truenos con mucho amor.
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Quiero agradecer a las personas que votan y me hacen saber que les gusta la historia, estaba algo deprimida por asuntos personales, sus palabras me ayudan a seguir hasta el final con esta bella historia. Les dejo un dibujo digital que hice de Ojo de pez❤️
