Cap: Quinto

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Bialya
September 4, 6:00am.

Narra ____

Desperté porque algo me estaba jalando el cabello, poco a poco abrí mis ojos esperando encontrarme en mi habitación, pero me encontraba durmiendo sobre ¿Arena? algo me seguía jalando el cabello hasta que vi que era Inu mi prototipo de perro-robot pero ¿Cómo es posible? se supone que estaba desarmado en mi cuarto secreto pero ahora lo veo volando a mi alrededor, lo que me hace recordar ¿Dónde rayos estoy? ¿Quién me puso esta ropa? y ¿Por qué diablos me duele la cabeza ahora?

Maldije mientras miraba el desierto observando que pronto amaneceria y comenzaría a subir la temperatura.

Tenía que concentrarme, me senté cruzando mis piernas y comencé a meditar.

Tenía que recordar cómo llegué aquí, primero comencé con lo que ya sabía, estoy lejos de mi hogar aquí no hay un pantano en kilómetros y Ino está conmigo así que:

Mi padre encontró otra forma de entrenarme, enviandome lejos de casa, completame sola y en medio del desierto, lo cual me parecía algo que él haría, pero no lograba acordarme de ninguna conversación del asunto y además Inu se encontraba completamente armado y volando sobre mi cabeza, las piezas no encajaban.

Debía de haber otra razón por la cual no puedo recordar nada, tenía que concentrarme más, algo no estaba bien.

Ya habían pasado treinta minutos desde que comencé a meditar pero nada, tenía que concentrarme más, buscar muy en el fondo de mi mente y recordar.

Súbitamente imágenes comenzaron a llegar a mí, eran mis recuerdos de los últimos 6 meses en los cuales termine de juntar los datos que necesitaba para mi misión que lleve a cabo con éxito y duró apenas una semana; luego, de la traición qué sufrí por mi padre; el trato con la Liga de unirme a ella; Superman como mi mentor; la destrucción de mi cuaderno rojo; el mes que pase con el equipo, la repentina petición de Batman para que realizará está misión con el equipo, mi traje de Superhéroe y el ataque que le dio Psimon a la Srta Mariciana.

Todo vino a mí tán de golpe que hizo que me doliera más la cabeza, pero al menos pude recordar porque me encontraba en el desierto.

La Srta Mariciana no tuvo cuidado con las habilidades de Psimon, la agarró desprevenida.

Lo bueno es que a mí no tanto, un segundo antes de que Psimon la atacara cree una barrera mental haciendo que el poder de Psimon me afectara pero no de la manera que él esperaba, solo fue un ataque a una escala un poco menor que a los demás, aunque no medi muy bien su poder porque aún así hizo que me alejara de mis compañeros.

Talves la conexión de la marciana conmigo debió contribuir el que no pudiera detener a Psimon en su totalidad, tenía que trabajan en eso con la chica de Marte.

Tenía que encontrar a los demás integrantes del equipo, seguramente están perdidos por alguna parte de Bialya y con perdida de memoria por la conexión con la marciana, esperaba que se encontraran bien, después de todo estamos en territorio enemigo.

(•••)

Ya había pasado un par de horas y el sol estaba en lo alto, hacia mucho calor y no encontraba a nadie.

No fue hasta que rodee una duna que sentí una presencia muy débil desde donde me encontraba, concentrándome en distinguir quien era pude saber que se trataba de la presencia de Acualat, así que decidí ir hacia allá.

Comencé a escuchar explosiones a lo lejos algo estaba sucediendo y era más que seguro qué estaba relacionado con mi equipo.

Por mi mente se me ocurrió la opción de la teletransportación pero pronto como vino la deseche, si no tenía bien en claro mi lugar de destino podría abrir un portal mucho más lejos de mi objetivo o peor en medio del combate y el usar mi inexperta habilidad para volar no era una opción.

La Hija De Salvaje (Liga de la Justicia y Young Justice) [EN EDICIÓN]Où les histoires vivent. Découvrez maintenant