Capítulo 28 Un Viaje en Carruaje

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[Nota del autor: Pues lo prometido es deuda. 

Hace tiempo alguien me pidió que publicara la ficha de Jeanne, y aunque antes no tenia planeado hacerlo, al final decidí que no habría nada de malo en hacerlo.

PD: Si al ver la imagen, algo no es como describí... la respuesta para ese tipo de preguntas es que un hechicero lo hizo.]

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Esta es una historia de unos días antes de los eventos del pueblo Emon.

Al otro lado del reino, casi en la frontera que lo dividía con el imperio Baharut y la teocracia Slane, se encontraba una ciudad fuertemente amurallada por paredes de piedras.

Este era la ciudad fortaleza de E-Rantel.

Aquí se reunían una vez al año las fuerzas principales del reino para combatir con el imperio debido a su posición estratégica. El resto del año servía como una ciudad gobernada por el alcalde y seria el punto donde se detendrían los extranjeros y aventureros, también era la mayor productora de pociones en el reino.

Y a diferencia de la capital real, aquí se reunían grandes cantidades de aventureros debido a que la presión ejercida por los nobles era menor aquí. Por esa razón podías ver muchos negocios que apoyen a los aventureros con armas, alimentos, etc. Así como también la imagen de varias personas en trajes fantásticos y otros con varias cicatrices en su cuerpo.

Aunque eso fuera así, aun había varios nobles en esta ciudad.

Uno de los lugares que estos frecuentaban era el más lujoso hospedaje de la ciudad fortaleza conocido como "El Brillante Pabellón Dorado". Este lugar era el más elegante en toda la ciudad, solo aquellos nobles con grades riquezas se permitían dormir en sus habitaciones y comer la maravillosa comida de su famoso restaurante.

El edificio era uno de los más cuidados de E-Rantel así que destacaba incluso en la lejanía, era como si lo hicieran así a propósito para molestar a los plebeyos que no se podían permitir esa clase de lujos.

A un lado del edificio principal se encontraba el estacionamiento para los carruajes de los nobles o comerciantes que se hospedaban en el lugar, había muchos de esos elegantes carruajes repartidos por todo el lugar, así también como caballos y conductores que cuidaban de ellos.

En una zona un poco más apartaba se encontraba un elegante carruaje estacionado. Y aunque el carruaje era hermoso, lo que estaba dentro lo era aún más.

Dentro del carruaje se encontraban varias figuras sentadas en los asientos acolchonados. Tres personas de un lado y otra ocupando todos los puestos del otro.

De las tres primeras, dos de ellas eran chicas que parecían gemelas. Eran casi idénticas, solo alguien con vista aguda podría ver las sutiles diferencias entre ellas dos. Ambas chicas eran pálidas y estaban vistiendo vestidos negros de una pieza.

Overlord: La Llegada de BroongaWhere stories live. Discover now