Next To You - Zayn Malik y Tu

Capitulo 20

Pero, y si me enamoraba de Zayn ¿que con eso? el dijo que yo era atractiva cuando lo encontré llorando, además a mi parecer, hacíamos una excelente pareja.

- En que piensas pequeña celosa?- preguntó mientras caminábamos al lado de las tiendas comerciales, con esa sonrisa que mata a cualquiera. Ahora entiendo el porque la cajera tenía tanta atracción hacía el.

- En nada- respondí sin darle importan...

cia, hasta que noté que me había llamado 'celosa'- Espera.. Celosa?- pregunté mientras el me miraba y reía divertido.

- Lo vas a negar?- me preguntó levantando una ceja, aun con su sonrisa de comercial. ¿Negar?, no, no podía negar que me había puesto celosa.

- Si- le mentí- no me puse celosa, es mas!- exclamé divertida- yo fui quien te sacó la foto- dije con tono triunfante.

- Ya, no te pusiste celosa - rió el sarcástico mientras tomaba una de las bolsas que yo llevaba en las manos para ayudarme.

- Vale, y si me puse celosa que?- le pregunté desafiante- tu estas de compras conmigo, cuando salgas solo le das el número a quien quieras

- Yo tengo celos, tengo celos - se puso a cantar en un susurro mientras yo le daba un pequeño golpe en el hombro y el reía.

- Quiero ver yo que harías si se acerca un chico y me pide mi número- le dije en tono irónico , pero el se rió mas y pensó por unos momentos hasta que volvió a dirigir la mirada a mi.

- Pues le diría que se largue - admitió finalmente- me daría celos, pero de ti, no de que ande contigo.

- Mira tu- le contesté tratando de no seguir alimentando el tema para que mis mejillas no se siguieran sonrojando. Miré para otro lado en eso que mi rostro tomaba su color normal, para no demostrar mucho lo atractivo que me parecía cada vez que lo miraba, o lo mucho que me gustaba que sonría, o lo nerviosa que me ponían cada una de las frases que me decía.

- Que tal si vamos a comer algo?- preguntó mientras caminábamos por el patio de comida. Lo miré con los ojos bien abiertos, haciéndole saber que comer no era lo que quería hacer en ese momento, si no ir comprar mi casa, y dormir después de el día agotador que había tenido.

- No Zayn- le contesté tierna haciendo pucheros que incrementen las posibilidades de que vayamos a casa- estoy cansada y además debe ser tarde, debemos comprar esa casa temprano o si no, no me atenderán hasta mañana.

- Tranquila- me dijo poniendo una suya sobre mi hombro- cierran a las siete- dijo riendo mientras yo miraba el celular que tenía en la mano.. ¡eran las nueve!

- Zayn- le dije molesta mientras el devolvía una mirada hacía mi para asegurar que estaba escuchando- son las nueve- le dije esperando respuestas.

- Y eso que?- preguntó despreocupado, mirando los locales de comida.

- No tengo lugar donde quedarme hoy día, y quiero esa casa- le dije molesta, pellizcando su hombro para que me pusiera atención.Le hizo un masaje a su hombro cuidadosamente y me miró para hacerme entender de que le había dolido.

- mira- me dijo tierno- reservé la casa para ti, nadie mas la comprará- me aseguró tranquilo- hoy quédate en mi casa, y mañana a primera hora te acompañaré a comprarla, luego te dejo en el trabajo y te voy a buscar en la tarde para que vengamos a comer algo, ya que ahora estas cansada ¿de acuerdo?- me preguntó mientras mis ojos se iluminaban de lo tierno que era. Lo abracé y me perdí en su perfume nuevamente. Cerré los ojos y lo agarré aun mas fuerte. No quería que se aleje jamás, nunca.

- Gracias Zayn, de verdad- le murmuré mientras me alejaba de el para dejarlo respirar.

- Descuida - me dijo mirándome fijo mientras me hacía un pequeño cariño en la mejilla- Vamos - me dijo tomando todas las bolsas que yo tenía en la mano. Caminamos hasta el auto rápidamente.

Me dejé caer sobre el asiento y suspiré por un largo rato. Había sido un día agotador y encantador a la vez. Una vez mas me aseguré de mirar la forma en la que ese chico de ojos color miel se subía al auto, y una vez mas suspiré, sonriendo como nunca antes.

Se subió con cuidado en su asiento y me dedicó una de sus mas tiernas miradas, la cual le devolví enseguida.

Durante el camino ni siquiera pronuncié palabra, pensé que en cualquier momento me iba a quedar dormida, estaba realmente cansada. Mis pies ardían de tanto que había caminado, e incluso mis manos no tenían ganas de moverse.

De vez en cuando miraba a Zayn de reojo, el tenía la mirada seria al frente. Eso lo hacía ver aun mas sexy de lo que ya era y yo me mordía el labio inferior mientras me decía a mi misma que tenía que controlarme.

- Cuando me miras siento que tengo cosas en la cara- me dijo mientras lo miraba. Pensé que el no se daba cuenta de las ocasiones en las que lo miraba, pero al parecer si. Eso me hizo sonrojar mucho porque lo miraba de "reojo" cantidad de veces al día. Mi atracción hacía el se había vuelto algo obvia, y creo que hasta la cajera se había dado cuenta de eso.

- Te miro porque eres atractivo - le admití mirando hacía la ventana para que mis mejillas no delataran el estado de nerviosismo en el que me encontraba. Lo miré una vez mas, el me estaba mirando tierno.

- Si no estuviera al volante, te besaría - dijo con la voz seca mientras yo abría mis ojos como platos. Miré hacía afuera y mi corazón latió tan rápido que se pudo haber caído. Reí para mis adentros, y finalmente logré sacar la voz.

- Si claro- le dije sarcástica al ser lo único que se me ocurrió decir en ese momento, o quizás fue la única frase que pude haber dicho completa.

Lo miré fijamente, el tenía una sonrisa, pero cuando yo le contesté apretó los labios y miró hacía todos lados. Parecía en apuros, como si estuviera desesperado por hacer algo.

Se salió totalmente del camino y estacionó el auto en medio de una pampa de pasto que estaba al lado de la carretera.

Yo lo miré fijamente sorprendida y mi corazón latía a mil por hora ¿porque había parado el auto? ¿que quería hacer?

Me miró fijo y suspiró por un largo rato cuando el auto finalmente estaba estacionado. Se rascó la cabeza y miró mis labios fijamente, mientras los nervios me comían por dentro.

- no estoy al volante ahora- dijo mientras tomaba mi mentón y lo acercaba hacía el. Estábamos cerca, podía sentir su respiración sobre mi. Mi corazón se agito al tenerlo tan cerca y simplemente cerré mis ojos. Sentí como mis labios rozaban con los de el, y sentí el sabor de sus labios al hacer contacto con los míos. Mil mariposas volaron en mi estomago al darme cuenta de que si, nos estábamos besando.

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