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Disclaimer: los personajes no me pertenecen, son de Mashashi Kishimoto. Y el fic mucho menos me pertenece, todo es obra de crazygurl12, yo solamente lo traduzco para que llegue a más lectores.

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Han pasado dos días desde que Hinata estaba despierta y en el tercero, se le permitió regresar a su casa y descansar allí. Gaara ha estado a su lado desde entonces, mientras que Shino, Kiba y Neji, y a veces Naruto, solían visitarla. Los Konohans, a excepción de Sai, todavía estaban en Suna y se les exigió que se quedaran hasta que el Condado de la Nieve respondiera con la pregunta de por qué atacaron a la esposa del Kazekage.

Fue porque aunque Hinata es responsabilidad de Suna ahora, ella todavía es la hija de un poderoso jefe de clan en Konoha. Tsunade instruyó en su carta que el resto de los Konohans, a excepción de Sai porque era necesario en algunos deberes secretos de Anbu, ayuden a la Arena a descubrir a los verdaderos culpables de los ataques. Aparte de eso, también se afirmó que Konoha no permitiría tal acto cuando Sasuke, una promesa completa de Shinobi, resulte herido.

Es por eso que actualmente, Kiba todavía se encontraba cuidando a un Sasuke muy ágil en territorio de la Arena.

-Oh Kami... - Kiba puso los ojos en blanco. Sasuke estaba bien, pero una cuchilla lo puso en la articulación de la rodilla derecha y destruyó huesos y músculos. Incluso con médicos altamente capacitados, aún necesitaba unos días más para sanar por completo.

-No necesito ayuda. - Sasuke, por décima mil sesenta y cinco ves, le gritó a Kiba que no hizo nada más que burlarse de él. Kiba nunca supo que encontraría divertida la actitud de "malcriado" de Sasuke. Siempre pensó que el Uchiha era un imbécil y nada más que un imbécil.

-Estás cojeando. - Kiba dijo, cruzando sus brazos mientras lanzaba una mirada a Akamaru. El ninken gigante estaba tirado en el piso alfombrado y estaba gimiendo alegremente, moviendo su cola en alto. -No creo que sea realmente una señal de que puedas ir al baño con ese problemas Sasuke.

Sasuke sonrió y luego dejó que una sonrisa diabólica apareciera en sus labios. El Inuzuka estaba siendo demasiado amigable y lo hace sospechar. Kiba es uno de los que siempre hablo sobre no agradarle, ¿qué cambio eso ahora? -Estás jugando un juego mortal, Inuzuka.

-A los hombres de verdad les gusta vivir peligrosamente.

-Hn.

Kiba se rió de nuevo pero retrocedió unos pasos. Puede que le agrade un poco Sasuke ahora, pero Sasuke todavía es ese tipo de persona que podría matarte en el acto cuando se enoja demasiado. Años de sed de sangre y oscuridad no podían ser fácilmente lavados y los viejos hábitos siempre eran difíciles de cambiar. -Mocoso malcriado, hazlo a tu manera.

-Repitelo y te degolló.

-Eres sensible. - Kiba no pudo contener su lengua. Era la primera vez que Sasuke realmente luchaba contra él verbalmente y se estaba dejando llevar. El Inuzuka nunca podría resistirse a una pelea verbal. -Uhm... está bien. - Los ojos del Uchiha comenzaron a brillar de color rojo sangre y Kiba levantó las manos. -Mátame y Hinata tendrá tu piel.

-¿Crees que le tengo miedo? - Preguntó Sasuke, con cara de desprecio.

-Uhm no... pero creo que te preocupas por ella lo suficiente. - Kiba respondió pensativamente, dando un paso hacia atrás hasta llegar a la puerta. -Uh... tengo que ir a buscar a Shino. - Con eso, Kiba desapareció de la vista y Sasuke se quedó con el perro gigante.

Akamaru lo miró fijamente.

Sasuke alzó las cejas. -Como perros para vivir.

Akamaru levantó su enorme cuerpo y se apresuró a seguir a su maestro, haciendo ruidos de protestas mientras lo hacía. Cuando Sasuke se quedó solo dentro de su habitación, resopló y alcanzó su funda de kunai en la parte superior de la pequeña mesa de café. Sacó una hoja de kunai, examinándola por un momento y apuntó a la cerradura de la puerta. Lanzó y el arma dio en el blanco, destruyó la cerradura, bloqueando la puerta.

ᴄᴀsᴀᴅᴀ ᴄᴏɴ ᴇʟ ᴋᴀᴢᴇᴋᴀɢᴇ ↝ ᵍᵃᵃʰᶤᶰᵃ ✓Where stories live. Discover now