ᴄᴀsᴀᴅᴀ ᴄᴏɴ ᴇʟ ᴋᴀᴢᴇᴋᴀɢᴇ ↝ ᵍᵃᵃʰᶤᶰᵃ ✓

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Disclaimer: los personajes no me pertenecen, son de Mashashi Kishimoto. Y el fic mucho menos me pertenece, todo es obra de crazygurl12, yo solamente lo traduzco para que llegue a más lectores.

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Gaara observó en silencio mientras Hinata tomaba la taza de agua con manos temblorosas. Se lo llevó a los labios, pero su estado aún desconcertado le dificultaba beber. Tomando sus manos entre las suyas, la ayudó a levantar la taza nuevamente y esta vez, ella pudo tomar el líquido calmante entre respiraciones agudas.

-Alguien quiere hacerme daño. - Ella susurró. Si fue atacada en Konoha, no se sorprendería porque tiene su propia experiencia con cosas así. El estado de su clan la esta convirtiendo en un buen objetivo para los ninjas renegados y otras aldeas. Lo único que la sorprendió es que incluso en la arena, alguien quiere hacerle daño. Honestamente creía que nadie se atrevería a intentarlo porque ahora es la esposa del Kazekage.

Y se teme al Kazekage actual... sin mencionar que dos pueblos se pueden ofender por tal acto.

Los ojos de Gaara estaban impasibles. -No deberías dejar mi lado de ahora en adelante.

-Ano...

-¿Por qué saliste de la oficina?

-¿Q-qué? - Hinata parpadeó ante la pregunta y miró hacia otro lado cuando sintió que sus mejillas se calentaron. Estaba confundida de por qué actuó como una niña celosa cuando vio a Matsuri tan... tan cerca. Es como si compartieran su propio vínculo especial. Tal vez es como Sakura se siente con Tsunade... o Naruto con Jaraiya, pero Gaara es más joven y casi de la misma edad que Matsuri, y aunque tienen una relación de profesor y estudiante, es... extraño.

Bueno, raro para ella.

-Yo... uhm... - Se sacudió el cerebro en busca de una excusa.

Gaara estaba estudiando su rostro con atención. Estaba empezando a aprender a descifrar sus pensamientos a través de su rostro. Cada vez que se sonroja, algo la pone increíblemente incómoda o tímida. -Matsuri es mi alumna. Tenemos que trabajar estrechamente a veces. - Él explicó y ella abrió mucho los ojos. -Pero no hay nada entre nosotros.

Ahora su boca se volvió floja.

Hinata no puede creer lo que acaba de escuchar. ¿Es su expresión tan legible que Gaara, una persona muy torpe e impasible socialmente, podía meterse en sus pensamientos? -Ah... - Ella presionó un nervio palpitante en su sien. ¿Debería ella mentir? ¿Decir que no se trata de Matsuri? -Gomenasai. Solo estoy... solo estoy actuando raro.

Ella realmente no podía obligarse a mentir.

-Ah...

-Gomenasai.

-No hay necesidad de disculpas. Puedes decirme qué sucede porque soy tu—

-Marido. - Hinata terminó con una leve sonrisa. Gaara es muy amable y no puede estar lo suficientemente agradecida por eso. -Parece que nos estamos acostumbrando a este matrimonio después de todo. - Ella no habría dicho las palabras en voz alta, pero a veces, su boca sigue funcionando sin su permiso.

-¿Te estás acostumbrando a estar casada conmigo? - Gaara preguntó.

-Hai. - Bajó la vista tímidamente a su regazo, donde sus manos seguían inquietas. ¿Fue demasiado audaz para admitirlo? Sin embargo, es la verdad, y pensó que era mejor decirle eso.

-Yo también.

-¿E-En serio?

-Hai.

-ooo-