Capítulo 19

247 25 6
                                    

JENNA

Anthon está aprendiendo ruso, sí, ruso, y bueno, cada vez que habla en ese idioma.

Se me desborda la presa.

Algunas veces me saca de quicio porque cada vez que habla ruso es para hablarme sucio o para decirme una idiotez, y me frustro por que no entiendo nada de lo que dice porque no sé si me está diciendo algo sucio o no, y lo sé, debería averiguarlo con el tono de voz, o lenguaje corporal o algo así, pero se me hace complicado, como por ejemplo me está diciendo algo subido de tono, pero lo diría una manera tan normal, sin picardía en su cara o en su tono de voz, o cuando dice algo absurdo, ni siquiera se ríe, porque el desgraciado se controla, pero lo que me sorprende es que; ¡Él se ríe por todo!

—YA lyublyu tebya, moy bespokoyashchiy inostranets [Te amo mi alíen acosador]

—La tuya por si acaso—Le saqué el dedo medio, y él se ríe, cerré la puerta con seguro.

En fin, cuando empecé arreglar la cama, encontré un folleto de un nuevo Spa chino que inauguraron hace creo que cinco meses, y me llamó la atención, no solo el masaje, si no el idioma, siempre me interesó pero la verdad es que no me atrevía a intentarlo.

Así que decidí tomar un curso de mandarín, no solo para mí, si no para molestar a mi novio.

Dos semana después...

—Āndōng bǎ yán dì gěi wǒ [Anthon pasame la sal.]

Anthon se echó hacia atrás, sorprendido, me reí por su cara.

—¿Estás invocando al Satán o qué?

—No, estoy tomando un curso de mandarín.

—Oh—Eso lo tomó por sorpresa—, me alegra mucho.

—Aprendí bastante, es muy entretenido.

—Con razón estás viendo novelas chinas.

—En fin, ¿Quieres comer ya?

—YA khotel by s"yest' chto-nibud' yeshche [Yo quisiera comerme otra cosa]—Miró de arriba hacia abajo.

—Anthon si es una cochinada...—Le advertí.

—No mia amore [No mi amor]—Esta vez dice en italiano y se ríe mientras se va de la cocina.

Él va arreglar la mesa mientras yo llevé la comida, luego él me ayudó a llevar el jugo y los vasos.

Algo que me sorprende de Anthon de que no solo sabe italiano (Obviamente lo sabe gracias a su mamá), ingles (Por que su papá y abuelo lo hablaban), y ahora que está prendiendo ruso, ¡Rayos!, mi novio es muy listo, yo apenas y sé hablar bien castellano.

—Primero aprendí hablar castellano—Me empezó a contar Anthon.

Tres años antes, le había preguntado como aprendió hablar el italiano y el ingles.

—Luego mi mamá nos llevó a Italia cuando tenia siete, y bueno se me hizo fácil porque mi mamá me ensañaba el significado de todo lo que decían mis familiares y traté de prestar atención todo lo que decían, después de tres meses, regresé aquí, literalmente hablando italiano, debido a la costumbre y que me adapté demasiado rápido al idioma, luego mi papá, me propuso aprender inglés, me dio como especie de clases cuando él no tenia trabajo, en ese momento tenia trece casi catorce, me divertí, papá se le ocurría como una clase de dinámicas divertidas para que no me aburriese aprendiendo, mi examen final fue llevarme a Texas, ya que él tenia una junta de negocios ahí y quería como que "Probarme"—Hace comillas con sus dedos—, si estaba listo, y que lo estaba, aunque nervioso, pero es normal, para festejar fuimos a un restaurante con sus colegas de trabajo, comí mucha carne y tomé por primera vez cerveza, mi papá me dijo que no le dijera a mamá, pero mi mamá se enteró debido a que una señora chismosa, me regañó y casi mata a mi papá cuando regresamos a casa... Aún recuerdo cuando mi mamá le grito: "¡¿EMBORRACHASTE A MI HIJO?! ¡¿ESTÁS LOCO?!", Mi mamá cuando se enoja lo insulta en su idioma, y como mi papá estaba un poco borracho cuando llegamos a casa le dijo: "¡Sh sh sh! ¡no entiendo lo que dices! ¡¿No te han dicho que eres ardiente cuando me insultas en italiano?!, ¡¿Cómo es que se dice? O wiwi mia amoreeee, espera, creo que tengo una erección". Y mi mamá le lanzó la chancla.

Y por esas razones, la familia de Anthon es increíble.

Sus historias nunca son aburridas.

—¿Por qué me miras así?—Preguntó Anthon.

—Recordaba como me contabas cuando aprendiste italiano e inglés.

—Algún día te llevaré a Italia—Tomó mi mano y la besó—, lo prometo, es tan hermoso que te vas enamorar.

—Si lo dices así, es que es muy cierto.

—Y lo es—Volvió a besar mi mano, tomó nuestros platos, los lavó y los puso en su lugar—, iré al trabajo, se me hace tarde, ¿Segura que estarás bien?

—Sí, estaré bien, es mi tarde libre.

Él asintió, me abrazó por detrás y me dio un beso en la mejilla.

—Ti amo, mia amore [Te amo, mi amor]—Susurró en italiano.

—Sé que suena inoportuno, pero cuando me hablas italiano me enamoro pero también excito, ¿Cómo es eso posible?

Era una broma, pero también era bastante cierto.

No sabía si excitarme o enamorarme.

Él sonrió, pícaro y se acercó a mi oído.

—Lo vediamo stasera notte—Susurró en italiano sensualmente en mi oído mientras pasaba su mano por la parte interna de mi muslo casi llegando a mi entrepierna.

Se separó de mí, pero antes dejó un beso corto pero húmedo en mis labios y queriendo más, quise acercarme para poder besarlo, pero él se separó sabiendo mi plan, sonrió sin mostrar los dientes pero aún teniendo esa sonrisa pícara, con los ojos entre cerrados y esa expresión pervertida que lo caracterizaba cuando estábamos en privado, se da la vuelta y se va.

Diosito: ¡QUE CALOR!

Lo veremos esta noche.

Entendí lo que me dijo.

Porque ya algunas palabras me pareciendo conocidas pero escucharlas en una misma oración solo me queda por decir;

Vecinos, hoy tampoco van a dormir por culpa mía, lo siento por ustedes.

No Apto Para Parejas Normales 2Where stories live. Discover now