AmorEs De aquí a allá, un paso.

Capitulo 34

Fue una noche mágica, ahora puedo verlo sentada en mi cama, soñando con él. Dios no puedo creer que haya pasado 24 horas con él y lo extraño, lo extraño mucho.

Me siento en las nubes, pero por desgracia no me puedo quedar aquí aunque quisiera ya que es lunes y hay que trabajar.

Al llegar a edificio veo salir a Rogelio del elevador y al verme se detiene y me saluda.

—Buenos días, Clarisa— dice con una picara sonrisa, igual que la de su hermano.

—Buenos días, Rogelio ¿Ya te vas? —

—Si, mi hermano no esta y la verdad no puedo esperarlo, como quiera vendré mas tarde a verlo— platicamos unos minutos más antes de decir adiós.

La mañana se fue en un abrir y cerrar de ojos; y a pesar de que estoy sentada en la cafetería con Anny no tengo apetito, tengo un mal presentimiento, siento que algo malo va a suceder.

—¿Qué pasa? ¿No vas a comer? — pregunto Anny con la boca llena de un sándwich-.

—No tengo hambre… sabes traigo como un nudo en el estomago, tengo un mal presentimiento, no se tal vez es una tontería—

Anny me observaba mientras comía, se que quería saber que era lo que estaba pasando pero, ni yo misma lo sabia.

—Ahora que lo recuerdo, mama me dijo que Max estuvo llamándote el fin de semana, pero tu no quisiste contestarle ¿Se puede saber porque? —

La vi hacer una mueca cuando escucho el nombre de Max y tardo en contestarme.

—¿Quieres hablar de ello? — pregunte.

—Es complicado— dijo después de sorber su malteada —No se que pensar o hacer….—

—Te acostaste con él verdad— era afirmación no pregunta.

—¡Si! — Dice dejándose caer sobre la mesa —fue maravilloso y sexy a la vez, no tienes idea de lo que me hizo sentir, hacia tanto tiempo que no me sentía de esta manera—

—Y si fue tan maravilloso como dices ¿Por qué lo evitas? —

—Sabes que soy muy celosa, él y yo no acordamos ser pareja ni nada, pero siento feo que este con otras mujeres además de mi, no se… como sobrellevarlo, me duele que busque a alguien mas para su placer. No se, tal vez sea egoísta pero me duele— hay no, escuchar ese tono de voz me estaba preocupando.

—¿Te gusta? ¿Lo quieres? —

Han pasado un par de horas desde que regrese del almuerzo, Anny no me conto mucho de sus sentimientos respecto a Max y eso me preocupa, mas que nada el hecho de que se esta enamorando de él y ella o no quiere darse cuenta o quiere ignorarlo.

No he visto a Cristóbal en todo el día, la verdad es que lo extraño, no me ha llamado ni mandado mensajes ni nada. Bueno si Mahoma no va a la montaña, la montaña ira a Mahoma.

Tomo mi celular y abro la aplicación de msm instantáneos, le escribo y lo mando. Solo pasan unos segundos y recibo respuesta.

—Mi cielo. Me haces falta y mucha. Preferiría estar contigo que aquí con estos hombres con caras largas. Ansío que llegue la noche para vernos de nuevo. Tengo ganas de estrecharte entre mis brazos y besarte hasta saciarme de ti. Pero tengo más ansias locas de poseerte una y otra y otra vez y llenarte de mí.

Oh por Dios, vaya manera de responderme, con esas palabras mi cuerpo ha entrado en calor y yo también lo deseo, lo deseo y mucho. De pronto siento tanto calor que estoy sudando, las palmas de mis manos sudan mucho y de pronto siento un tirón en mi estomago, siento nauseas y me arqueo ante el asco que siento, tapo mi boca y corro al baño.