ERES UN INTRUSO

Capitulo 24

Yuuri se escondía en el laberinto esta vez tuvo la precaución de dejar un marca para asegurarse de poder encontrar la salida, no quería encontrarse con la reina madre de nuevo, así que esperaba el momento adecuado para salir, estaba sentado en uno de los bancos bajo un enorme árbol, comía distraídamente su merienda, en serio que le agradaba sentir el olor de las plantas, era tan tranquilizador, empezaba a creer que seguro su bebe seria amante de la naturaleza también.

– majestad – llamo alguien haciéndolo brincar tirando su comida al suelo, una lagrima se asomo mirando al causante de que su comida se perdiera

– perdóneme no fue mi intención – dijo yuuto nervioso sin saber que hacer

Yuuri se volteó y limpio la lagrima, tenia que hacer algo con todas esas emociones que lo invadían de repente, recordó de hace tan solo dos días había llorado por que las sirvientas habían traído los dulces equivocados, y se había quedado con el antojo.

– está bien yuuto, pero dime como me encontraste

– bueno dejo un camino de piedras, fue fácil seguirlo – dijo mirando como el omega se entristecía

Yuuri ni siquiera había pensado que su plan fuera un fracaso, suspiro sintiéndose derrotado, tal vez le faltaba mas ingenio

– ¿entonces que necesitabas?

– mi madre lo llama, dice que es importante dijo algo sobre un lechón en el horno – dijo algo confundido

Yuuri enrojeció, como se le ocurría decirle lechón a su bebe, con razón la reina le dijo que había ganado algo de peso

- está bien, voy, gracias yuuto

- majestad - llamo tendiéndole una manzana - no es lo mismo que la comida que le hice tirar, pero si gusta

- gracias - sonrió tomándola

Camino presuroso mientras yuuto solo lo veía alejarse, deseando haber podido permanecer un poco mas de tiempo juntos.

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Víctor estaba algo feliz, debía encontrar pronto a Yuri y informarle sobre los últimos acontecimientos, seguro él también se encontraría emocionado por saber que sus padres tenían el deseo de verlo y enmendar los errores del pasado y construir un futuro juntos, y si contaba con el apoyo de ambos seria aun mas sencillo que fuera aceptado incluso por el consejo y eso podría significar que, aunque se casara, podría regresar siempre de que lo quisiera.

Le pregunto a una sirvienta que le indico que se hallaba en el jardín principal acompañando a su esposo, al acercarse lo encontró solo, sentado en uno de los bancos de piedra, mirando al cielo distraído como si estuviera pensando.

– Yuri – le llamo viendo al chico voltear – te estaba buscando, tengo buenas noticias

– ¿buenas noticias?

– no es necesario que sigas ocultando tu identidad, he hablado con mi madre, nuestra madre – le dijo sonriéndole – ella no sabia de ti, y añora poder verte y obtener tu perdón

Yuri lo miro un momento viendo la sonrisa que indicaba extrema felicidad, aunque lamentaba arruinar ese estado de ánimo debía de decirlo

– la he conocido hoy, vino a Yuuri y... – dijo mirándolo – escucha Víctor, no confió en esa mujer, esa mirada, la conozco – dijo abrazándose a si mismo – una mirada que por fuera parece amable, pero que es fría, una mirada que expresa planes oscuros

– ¿que? – dijo confundido – mi madre no es así, te lo garantizo

– te lo juro, se que apenas me conoces y tal vez pienses que es un plan para que ponerlos en contra, pero si no me crees, pregúntale a Yuuri, estaba temblando de miedo al verla