Capítulo 36 (Sara)

8.5K 622 22
                                    

Me alegró tanto verlo de nuevo, sentirlo de nuevo, besarlo y hacer todo con él.

Hicimos el trato de que casa fin de semana nos veríamos, haremos como que salgo de viaje aunque me voy a quedar aquí.

Llegó a casa y su madre está sentada en el sillón con un vaso de chocolate.

-No quiero saber que tienes...

-Fui a revisar una casa que Bastián y yo compramos hace unas semanas-salgo en mi defensa antes de que me diga puta-, queríamos que los niños tuvieran una casa de verano.

-Su casa está junto a la playa.

Estoy por contestar cuando mi suegro aparece y mira mal a su esposa.

-No dudes de Sara-dice mi suegro-, hace mucho que tú hijo no estaba tan feliz tan contento de estar con alguien. Además... Sí Sara consigue otra pareja no es tu problema... Ella amo a nuestro hijo y no me negaría a qué consiguiera una pareja con la cual pudiera contar para criar a nuestros nietos. Así que déjala en paz.

Mi suegra se levanta y se va a encerrar junto a su habitación, suspiró y me dejó caer en el sillón.

Rayo me huele y después llora. Lo miro y decido ir a mi cuarto. Me sigue oliendo el olor de Bastián en mi cuerpo.

Nos acostamos en mi cama y nos quedamos dormidos, suspiró pensando en todos los orgasmos que Bastián me arranco hoy. Me imagino la vez que lo hice mío en el cuarto de juegos.

Algo en mi interior se siente bien.

(((_+_)))

Cierro la sesión con los inversionistas europeos, hab pasado tres meses desde que Bastián murió y en el que la ciudad ha tenido varios asesinatos y cosas de ese tipo, sé que Bastián me está cuidando.

Como cada fin de semana me voy con él, me llevo a mis hijos como cada tarde. Hago como que si la mansión es mía. Ya que el terreno tiene una mansión por enfrente y son como tres hectáreas atrás así que es más fácil que Bastián y yo nos podamos ver. Mi marido a venido a recogerme un par de veces, y varias personas se preguntan por la persona que viene a recogerme. Dorian me ha interrogado varias veces con ese tema. Cosa que no le voy a dar gusto.

Regreso a la oficina que era de Bastián que ahora es mía, contraté una secretaria que me ayuda en todas las cosas que yo hacía, pero como ahora estoy al frente de la empresa no puedo hacer lo que solía hacer antes, cómo redactar un reporte o escribir las notificaciones que correspondían.

Cuando la hora de salida se marca en el reloj, cierro sesión en la computadora y recojo mis cosas. Bajo por el ascensor, mis hijos se quedarán al cuidado de Noa que se quedará haciendo tarea todo el fin de semana, yo le dije que quería unos días para mí solita y me dijo que el cuidaba de los niños. Así que me toca estar con Bastián.

El ascensor abre sus puertas, camino a la salida cuando el brazo de alguien me detiene.

Alcanzó a ver el auto ya esperándome, pero tengo que quitarme de encima a Dorian.

-¿Qué necesitas Dorian?-digo girando sobre mis tacones.

-¿Tan poco te importo la muerte de mi hermano?-parece dolido.

Así lo ha estado desde que Axel y Stella se fueron a Nueva York, desde que enterramos a Bastián.

Este Dorian es diferente.

Muy diferente.

-No sé de qué hablas Dorian-trato de ser fría pero me es imposible.

No le he aprendido nada a mi esposo.

Axel (Terminada Y +18)Where stories live. Discover now