Axel (Terminada Y +18)

Capítulo 14 (Bastián)

No me detengo a pensar en que sé que ella no merece esto que estoy diciendo, su expresión es... De dolor. Pero necesita saberlo, le he contado absolutamente todo, desde como fue que lastimaron a mi hermana hasta como jure tomar venganza y arruinar las conquistas de Axel, y cuando llegó a dónde me enamoré de ella, deja caer las lágrimas que había estado guardando, soy un idiota, pero uno que la ama con el alma y que no la quiere perder. No la quiero perder. La amo. Al terminar de narrarle todo lo que guarde y callé, ella sólo suspira y deja caer sus labios en los míos. Le sigo el beso temiendo que sea el último que nos demos. Se sube sobre mis piernas sin despegar nuestros labios, que me consumen, mis lágrimas comienzan a caer por mi cara y no tengo intención de ocultarlas, sólo ella me verá así.

Nadie más.

No sé que haré sin ella al despertar en mi cama, ya no veo una vida sin Sara junto a mí, no quiero una vida lejos de ella y sin mis pequeños hijos, quiero estar cuando nazcan, quiero que Sara envejezca a mi lado, quiero más hijos a su lado, quiero mil cosas con ella. Mi maldito intento de venganza se dio la vuelta dándome a la mujer que se volvió mi vida y por la que daré la vida de ser necesario.

Nos separamos, al ver mis gotas saldas que se empeñaron en salir y que no detuve, sonríe, las limpia con sus pulgares para dejar una impresión de sus bellos labios en mis párpados.

Suspiro al momento en que caen en mi ojo derecho. Su perfume impregna mis fosas nasales y mis miedos lo único que hacen es guardar ese bello aroma que desprende de su piel, de su ropa. De ella.

-No me iré a ninguna parte-susurra cerca de mi frente-, sea como sea, agradezco que nos conociéramos, me diste razones para saber que eras el hombre correcto y si no me amarás, estos dos pequeños seres que nos vienen a dar dolores de cabeza-suelto una risita tonta-, no estarían aquí-pone una mano en su vientre-. Te amo, Bastián. Pero no quiero mentiras de este tipo o que me ocultes cosas...

-Nunca más.

(_+_)

Camino en dirección a la empresa seguro de lo que voy a hacer, Sara me dijo que no hiciera nada, pero ese idiota por poco provoca que Sara me dejará y que se olvidará del amor que nos tenemos.

Entro por las puertas del elevador seguro de lo que haré, hasta aquí llegó.

Entro en la oficina, está sentado en su escritorio con los papeles de las exportaciones, no dice nada pero su oficina apesta a alcohol y cigarros, me encaminó a él y eleva su vista.

-¿Qué quieres?-dice antes de que siquiera le diga algo.

-Nada de ti-no me siento en la silla que tiene de frente-, sólo venía a avisarte que me regreso a Italia, con mi esposa e hijos.

-¡¿No te dejó?!-estrella sus manos en el escritorio con fuerza, provocando un fuerte sonido.

-No, pero por poco lo logras... Te dejo la compañía, al fin de cuentas es la que menos me genera dinero.

-¡Ni se te ocurra llevártela a Italia!-me grita, mientras él está muerto de ira yo estoy en calma total.

-Es mi esposa... Me seguirá a dónde yo vaya, y...

-No se irá contigo-niego con una sonrisa simple en los labios.

-Dile adiós a Sara, puedes ir para despedirte, a ella le vendría bien.

-¡Púdrete!

-Gracias, ¿Algo más?

Me doy la vuelta y me voy a mi oficina que en menos de una hora queda limpia, es una pena que los muebles de la casa se tengan que quedar aquí. Las cosas de mis hijos se irán con nosotros, sólo que en otro vuelo.