COFFEES AND BOOKS 桜狩り; kookmin

q u a t t u o r

Los labios de Seokjin sabían a lip gloss de fresa. Cuando sus bocas se alejaron, unidas ahora solamente por un hilo de saliva, los labios de Jimin estaban tan brillantes y húmedos como los de Seokjin. Las personas que habían estado caminando por sus alrededores, escuchando cómo los chicos se gritaban y viendo cómo se empujaban, ahora aplaudían o reían por el beso. Y Jimin no sabía en qué momento había tomado el rostro de Seokjin entre sus dos pequeñas manos, y tampoco sabía cómo las de Seokjin habían terminado abrazando su cintura. De pronto Jimin estaba demasiado consciente de lo cerca que estaba su cuerpo del de Seokjin, de que sus narices se tocaban, que incluso sus labios se rozaban. Y lo miró a los ojos, como preguntándole qué había sido eso. Sin embargo no estaba ni cerca de sentirse furioso. Seokjin le devolvió la mirada, pero no pudo encontrar los ojos de Jimin porque estos habían bajado a sus labios, mirándolos justo como Seokjin había mirado los suyos hace unos segundos. Y después sólo se apartó velozmente, como si tocar a Seokjin le quemara. Paranoico y pálido, miró hacia todas las direcciones. Buscando insultos, burlas, algo. Algo como lo que había vivido en su escuela anterior. Pero no hubo nada de eso, pues todos siguieron con lo suyo y solo Taehyung y Jungkook los observaban.

— ¡No jodas, Seokjin! — llevándose una mano a su pecho, Taehyung gritó con una expresión dramática en su rostro. Una escena digna para un telenovela —. ¡¿Qué demonios le hiciste al pobre bebé?! Ay, no. Pobrecito. ¡Lo estabas corrompiendo! — echó a correr hacia Jimin, y enseguida que llegó lo tomó en sus brazos y le acarició los cabellos —. ¿Qué pasó, nene? Esta maldita tarántula te estaba pervirtiendo, ¿no es así? Ay, dios. Pobre pequeño. — habló con voz tierna, como si se dirigiese a su hermanito menor. Jimin hizo un puchero, asintiendo a todo lo que decía Taehyung.

— Que no mienta, le gustó más de lo que me gustó a mí. — sonriendo burlón, le lanzó un beso a Jimin. Jimin le gruñó —. Tranquilo, cachorro.

— ¡CACHORRO EL COÑO DE TU-...! — Jimin gritó, lanzándose a Seokjin listo para golpearlo o algo que se le pareciera. Pero Taehyung lo retuvo lo más que pudo —. ¡Ya basta! ¡Dejame ir a partir la cara de este hijo de puta, joder! ¡Quiero golpearlo! — se retorció en los brazos de Taehyung, quién reía al igual que Seokjin —. ¡Te voy a dar una patada en las bolas! Si no me sueltas, gritaré. Y luego vendrá Tanya y le diré que te expulse, Taehyung. Y también pediré que te expulse a ti, Seokjin. Los dejaré en la calle. Y si Tanya no viene, te daré una patada en las bolas. Entonces tú me soltarás, y yo los asesinaré a ambos. ¡Agarré a Seokjin por el cuello hasta que ya no pueda respirar! Lo juro, lo haré. No tengo nada que perder, ¡jodidamente lo haré! Porque ustedes no-...

— ¡No, no, por favor no! No dejes que ese niño demonio empiece a hablar otra vez. — se quejó Seokjin, acercándose a ellos y parándose frente a Jimin. Levantó su mano y despacio, la llevó hacia el rostro de Jimin, y lo sostuvo con ella —. Te besé para vengarme, es que hiciste de mi vida una pesadilla. Nunca había conocido a alguien que hablara tanto, joder.

— Bueno, supongo que me lo merezco... — habló el rubio más tranquilo. Entonces, Taehyung fue aflojando su agarre. Mala decisión. A la primera señal de debilidad, Jimin se soltó y se lanzó hacia Seokjin. En cuestión de segundos, Seokjin estaba en el suelo con un furioso Jimin sobre él.

— ¡Rubio teñido incestuoso! ¡¿Quién te crees que eres?! Ahora sí me vas a conocer. Ahora sí. YA VAS A VER-...

— Jimin. — al escuchar aquella voz, Jimin detuvo todos sus movimientos. Seokjin sonrió divertido. Con la respiración agitada y las mejillas rojas, Jimin volvió la cabeza hacia donde lo había llamado esa voz. Y entonces encontró con sus ojos a Jungkook, el cual no se había movido de su lugar en todo ese tiempo y seguía justo frente a la entrada de la biblioteca, con un café entre sus temblorosas manos. Torpemente, se puso de píe y se alejó de Seokjin, pero no sin antes dejar una pequeña patada en su rodilla que no hizo nada más que sacarle risas al otro rubio.

— ¡Jungkook! — Jimin gritó, alegremente. Dudoso y nervioso, caminó lentamente hacia él sin quitarle la mirada de encima, y Jungkook también lo miraba a los ojos. A la mierda, pensó Jimin echando a correr hacia el chico. Le pareció que hacía lo correcto, pues el chico sonrió con ganas y eso lo hizo reír de la emoción. Se detuvo de golpe cuando estuvo frente a él, a una distancia considerable. Sin dejar de mirarlo a los ojos, ni de sonreír, tomó la mano de Jungkook que sostenía el café y con delicadeza pasó ese brazo por su cintura. Hizo así también con el otro, sintiendo los dedos de Jungkook clavarse en su espalda. Entonces él también abrazó la cintura de Jungkook, y sintió como el más alto dejaba un tierno beso en sus cabellos —. No quería derramar café sobre tu camisa una segunda vez, porque hoy no tengo cambio en mi casillero. Cualquier otro día no me hubiese importado. — habló contra el pecho de Jungkook, divertido y oliendo su aroma.

Seokjin, que ya estaba de píe y junto a Taehyung, fingió sollozar y abrazó a su ex novio por los hombros —. Dame un abrazo. Mirarlos me hace sentir soltero, tienen tanta química.

— Lo sé, me pasa igual. — Taehyung rió, rodeando los hombros de Jin con su brazo también.

— No me gusta mucho el café. — dijo Jeon cuando se separaron, dejando una suave caricia en la sonrojada mejilla de Jimin con la mano que tenía libre —. Es para ti.

— Gracias, Jeon Jungkookie. — hablando tiernamente, tomó el café entre sus manos y lo llevó a su boca para beber un poco. Ya se había enfriado, pero aún así lo tomó con ganas. ¡Se lo regaló Kookie, por dios!

— Ese no es el mismo demonio que se la vive llamándome rubio teñido cada dos segundos. — Seokjin dijo, observando cómo actuaba Jimin alrededor de su mejor amigo/primo.

— Cuando Jungkook está cerca Jimin parece un ángel. — sonrió Taehyung, fascinado con lo que sin duda alguna, sería una linda pareja en el futuro.

— Está muy rico, Kookie. Pero en este momento tenemos cosas muy importantes que hacer tú y yo. — riendo, entrelazó su mano con la de Jungkook y la tomó con fuerza.

— ¡No, rubio! La parte del sexo es para después, ¡en tu casa! No aquí. ¡Es para después! — le gritó escandalosamente Seokjin, llamando la atención de varias personas que pasaban por ahí.

— Dime qué es y lo haremos, Park Jiminssi. — Jungkook también apretó la pequeña mano de Jimin.

— Matar a estos idiotas, Jeon Jungkookie. Me estaban molestando. — le dijo, mirando hacia donde estaba Seokjin con su entrecejo fruncido —. come on! — y entonces, corrieron con sus manos sus unidas hacia sus amigos.

Y lo más divertido que vieron los estudiantes de Sandalwood High School ese día, fueron cuatro chicos que se perseguían como niños para hacerse cosquillas y reír como tontos.

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Hello honey babies, ¿qué tal? (︶ω︶)

Sí, a Jiminssi le gustó el beso de Seokjin. Pero no pasará nada más entre ellos. Ni siquiera sé por qué lo escribí, no me pregunten porque yo ya me pregunté y sólo me pude responder que ni puta idea. Por cierto, puse sandalwood high school como nombre de la escuela a la que los chicos van porque no tengo creatividad hakdhjdkjk. Así se llama la high a la que yo iba. (~￣▽￣)~ 💗

Capítulo dedicado a: JE0NLOUSLY , te amo mi crush. mi vida, mi bebé, la más preciosa. (• ε •)

Tengan días preciosos y felices, lxs amo honey babies. Muchos besitos.
😔💗🌈

I'm falling so I'm taking my time on my ride, chau.