Cuando La Sangre Seduce | Lucifer x Alastor

♦️#3♦️

"Sueño rojo"

Desperté de golpe con un terrible dolor de cabeza como si me hubiese pasado de copas la noche anterior, pero no era así, al parecer solo había sido un "mal sueño", sentí una molestia así que levante las sábanas encontrándome con... ¿una ereccion?, ¿esto iba enserio?, no entendía como era posible que soñando algo como eso terminase de esta manera, me daba asco yo mismo, jamás en mi maldita vida asquerosa me había pasado algo de esta magnitud.

Pose una mano sobre mi cabeza por el dolor hasta que sentí algo húmedo caer sobre mi brazo, mis labios sangraban, no entendía que era lo que estaba pasando, pero algo era seguro estás ideas locas no detendrían mi plan... Me estire y me senté a un lado de la cama, quería respirar ya que en serio no tenía la menor idea de lo que estaba pasando, pero empezaba a preocuparme de alguna manera, lo peor es que aquel sueño se había sentido tan real, ¿para que negar que lo había disfrutado?.

La lucha en mis mente por entender lo que había sucedido y lo mal que estaba terminaron al escuchar mi celular, ignoré por completo mi "pequeño problema" y solo me levanté con pereza para tomar el celular que se había quedado en la mesa como si jamás nunca lo hubiese usado ayer más que para hablar con Charlie. Eran mensajes de un número que no conocía en lo absoluto, los abrí con curiosidad sin esperarme lo que encontraría.

- "Buenas tardes Demonio radio, discúlpe las molestias pero la real familia Magne lo ha invitado a una fiesta especial que se dará a la media noche para todos aquellos que busquen salir de su rutina, sin embargo, el señor Magne espera encantado su presencia en especial."-

Luego de esa breve invitación había un link a la ubicación exacta del lugar donde se llevaría acabo dicha actividad, yo sentía que algo no cuadraba del todo, repetía la última oración una y otra vez buscándole sentido "El señor Magne espera encantado su presencia en especial", ¿Por que Lucifer específicamente?, ¿no hubiese sido más sencillo un "la familia Magne" como decía la misma invitación al principio?. Ahg gruñí molesto conmigo mismo, esto estaba distrayéndome de mi precioso plan y no podía darme el lujo de que siguiese afectándome.

Inconscientemente pase mi lengua por mis labios probando mi misma sangre, sentí... ¿su sabor de nuevo?, ¿como era posible joder?, me paré frente a aquel maldito espejo, quizá si estaba loco porque no había nada más que mi jodido reflejo. Suspire dándole ya la menor importancia por más inquietado que me tuviese, esa asquerosa ereccion había desaparecido junto a esa "ireal experiencia", solo me vestí en un abrir y cerrar de ojos para salir de mi departamento.

Baje las escaleras hasta la sala principal del hotel donde se recibía a los pecadores, me daba mucha gracia que la princesita pensase qué tal estupidez era posible, con mi natural sonrisa me acerqué hasta donde estaba Husk sentándome frente a la barra sin que siquiera lo notase, estaba de espaldas a mi pero justo en el momento que voltio se hecho para atrás como si hubiera visto la cosa más horrible de su insignificante vida demoniaca, si... por si lo preguntabas claro que se quejo de una forma que me causó querer reírme en su cara.

- Hijo de puta, ¡¿Querías que me diera un maldito infarto?! - exclamo, pero al recuperar el aire me miro con odio.

- Ey calma mi gran amigo, solo venia a ver cómo ibas con tu trabajo. - reí descaradamente después de mencionar aquello.

- Estoy rodeado de alcohol, ¿qué más quieres saber? - tomo una botella para beber de ella directamente.

- Tu nunca cambias, ¿has visto a la parejita?, ya sabes de quien hablo. - gire la silla dando vista a la sala completa sin ver a la rubia.