RuedaS •|Si quieres te puedo llevar|•

Ca¶ítulo | 10

Desde el principio sabía que el plan iba a salir mal. Desde que conocí a Johanna sabia que era diferente a como Elisa me dijo que sería, no se porque le hice caso. La conozco más que ella.

Pero se que esto es por mi culpa. Todo lo que me pasa es por mi culpa, pensar en ser aceptado por lo que soy es imposible. Bueno casi, Johanna fue la única que me mostró aprecio no fingido.

Ella podría salvarme...

×××

Llegar a la fiesta había sido solo uno de los primeros problemas de la noche. Elisa me había dicho desde hace tiempo, que una noche en la fiesta sería la manera exitosa para pedirle perdón y así algo más que amigos y como si esas cosas pasaran le creí y me vestí para la ocasión.

El plan era no verla hasta este día, por el mal rato que le hice pasar y pedirle perdón cuando viniera a la fiesta. Bajo las luces de colores bailar como una pareja, de ahí hablarle al oído y decirle que lo sentía que realmente era un tonto, que lo que había hecho estaba mal y después de que ella lo perdonara pedirle que fuese su novia delante de todos.

Elisa me decía que sería buena idea, eso hice.

Pasando por la entrada principal del gimnasio del instituto donde es la fiesta, me siento seguro aunque todos me miraran como un bicho raro, se que posiblemente seré el único chico de 15 años en silla de ruedas pero que más da, la experiencia no la tengo pero si la intención.

« Esperando que sirva de algo.»

Estoy solo, se suponía que Elisa vendría conmigo, ese era el plan, se suponía que solo me dejaría a solas cuando llegara Johanna, pero que más da dijo que vendría, talvez ya esta aquí.

- Lucas amigo-. Escucho a una voz conocida y giro mi silla de ruedas, para solo arrepentirme de ese hecho. Malcon me saludaba desde una de las sillas que en grupo con las demás eran ocupadas por el cúmulo de gorilas (como Johanna les decía). Desde mi lugar salude con la mano recio a hacer más que esa acción se lo que le hizo a Johanna lo vi lo que hace que me sienta a un peor por a como fui con ella.- Amigo acércate-. Escucho que grita por lo que lo ignoro y sigo en mi búsqueda alejandome de sus risas.

Veo a personas que también cursan conmigo y trato de acercarme a ellas, necesito saber donde esta Elisa.

- Disculpa-. Me dirijo a unas de las rubias que conocía solo por ser del mismo salón.- ¿Has visto a Elisa?-. Pregunto y esta solo me mira de arriba a bajo y gira los ojos y se va, realmente no esperaba que me respondiera, pero el intento como siempre está presente.

El ruido de la música comienza a retumbar en mis tímpanos hasta parecerme agobiante. No sirvió de nada buscar a Elisa, quede en la conclusión de que no vino, simplemente no está.

« No creo que esto salga bien.»

Entre el tumulto de gente, los bailes, los vestidos, los trajes, los tacones, las lucez, el alcohol, el humo, me voy haciendo la idea que Johanna tampoco vendría, pero quien sabe capaz...

Veo a un chico a lo lejos sentado en las gradas. Talvez pueda preguntarle, seria lo último de la noche será él y si no es la respuesta esperada me rindo a la idea de pensar de que esta noche sería mágica.

Ya serca de el noto que es otros de los gorilas, esta fumando un cigarrillo y hasta ahora me pregunto que pasa con los profesores de esta institución, talvez hacen otro grupo fumando en las partes traseras, pero en fin, el chico era solo otro más de los que conformaban el grupito selectivo de Malcon, lo único bueno que puedo ver de él y de todo lo que he visto en esta institución es que es uno de los más podría decirse que "tranquilos", es posible que me ayude.