16

3.7K 124 18
                                    


Karol.

-JAJAJA.- me reí por la ultima respuesta de Ruggero, aunque sonó a amenaza me dio mucha gracia.

Me preparaba para dormir cuando la puerta de la entrada sonó. Baje rápidamente las escaleras, no esperaba a nadie y menos a estas horas de la noche.

- Ya voy!.- grité cuando siguieron golpeando la puerta.

- Hola amore.- sonrió con picardia, Ruggero estaba frente a mi puerta cuando abrí.

- Que haces aquí?.- pregunte emocionada y sorprendida al mismo tiempo.

-Acaso no leíste que te iba a demostrar que eras solo mía?.- mis ojos se abrieron mas de lo normal.

- Creí que bromeabas!.- lo deje pasar.

- Uy Karol te falta mucho por conocerme.- uso las palabras que yo había utilizado con el en algún momento.

- Hey! esas son mis frases!.- dio un sonoro beso sobre mis labios que gustosa acepte.

- Que hacías?.- pregunto adentrándose mas al lugar y yo cerré la puerta.

- Preparándome para dormir.- lo observe de arriba abajo se veía realmente guapo, como siempre.

- Que no supiste?.- pregunto serio.

- Saber que?. - fruncí mi ceño.

- Que hoy no vas a dormir.-gruño. Sus ojos  recorrieron todo mi cuerpo, su promesa me hizo vibrar y enseguida mi cuerpo tembló lleno de excitación. 

Me acerque a el y lentamente me envolvió entre sus brazos.- Necesito mostrarte que eres mía, mi mujer, mi novia, mi todo.

Sonreí y bese sus labios, sus manos fueron a mis muslos haciéndome saltar para rodear su cadera. Comenzamos el recorrido a la habitación por las escaleras.

Me dejo caer sobre la cama lentamente y sin separar nuestros labios, sus manos recorrieron mi cuerpo ganándose mis jadeos y que estuviera empapada y lista para el.

Nos separamos por falta de oxigeno y nuestras miradas chocaron haciendo mas intenso el momento, mi corazón latía fuertemente ante su siguiente paso pero el solo me observaba.

- Que sucede?.- murmure.

- Es solo que eres perfecta, no te merezco.- susurro lo ultimo.

- Shh shh, no digas eso.- mis manos fueron a su rostro acariciándolo lentamente.- Eres a quien me entregue Ruggero, estoy perdidamente enamorada de ti.- confesé.

Se separo y levanto de la cama dejándome confundida hasta que extendió su mano hacía mi, la tome y me levanto rápidamente. Su mirada seguía fija en mi, analizando mi rostro como si quisiera guardarme detalladamente en su memoria.

- Confías en mi Karol?.- pregunto viéndome a los ojos, enseguida asentí.- Dilo por favor.- susurro implorando.

- Confío en ti Ruggero.- una hermosa sonrisa apareció en su rostro llenando mi corazón.

-Cierra los ojos.- demando. Enseguida lo hice, sentí perfecto como camino alrededor mío, su mirada era fuerte y lo sentía devorándome. Finalmente se poso atrás de mi.- Alza los brazos.- susurro cerca de mi oído mandando fuertes corrientes eléctricas por todo mi cuerpo. 

Levante mis brazos sin chistar y sentí como mi pequeña blusa blanca de tirantes iba subiendo sobre mi cuerpo, abrí mis ojos cuando la sentí fuera mi cuerpo.- No hagas trampa Sevilla.- gruño bajamente y sonreí, volví a cerrar los ojos. Pero de inmediato sentí como algo se posaba sobre estos, una tela impidiéndome abrir los ojos.

Apuesta. [EDITANDO]Where stories live. Discover now