CAPITULO 8

24 0 0
                                    

Sebas sabía muy bien que si Nico le cortaba el rostro a su hermana era porque andaba en algo raro, porque Luli siempre había sido su debilidad. Pero no podía meterse en el medio. Él los quería mucho a los dos, así que hacía tiempo, había decidido dejarlo en manos del destino. Pero que el destino actúe sin intervenciones de su parte. 

—Me molesta que lo cubra en todo. Detesto que mi ex sea su mejor amigo. – Dijo Luli mientras observaba a su hermano y a Nico desde un rincón junto a su amiga.— Es bastante raro todo... Yo podría averiguarte algo. Si vos queres. —Se ofreció Lucy.

—Mmm... Para eso tenes que acercarte mucho a él. No solo como amiga. Me refiero a que Sebas no tiene amigas mujeres. Si se acerca a vos es por otro interés. ¿Me entendes?

— Si. Entiendo completamente.—Dijo Lucy aprovechando el momento. La verdad es que Sebas le había gustado desde el minuto uno que lo conoció.— Podría invitarlo a salir... Si no te molesta. Así puedo sacarle información.

—¡Me encantó! Tenemos que idear un plan para que vos y mi hermano salgan y de esa forma le sacas información. Sos una genia Lucy.— Dijo Luli emocionada.

—Tampoco para tanto. — Se río Lucy.

Sebas llegó a la práctica. Nico y Santi lo estaban esperando en el vestuario mientras se preparaban para saslir a entrenar. Se sentía agotado pero feliz. 

— ¿Cómo les fue en inglés? — Preguntó Nico.

— ¿Inglés? — Se extrañó Santiago.-

—Si, nabo. El instituto que empezamos hoy...te atrofió las neuronas se ve. —Dijo Sebastián haciendo una mueca para que Santiago lo entendiera.

—¡Ah! ¡Si! Que tonto que soy. Disculpá. Es que estoy cansado Nico. Nos fue muy bien. Estuvimos a full. — Respondió Santi.

—Están locos ustedes. Yo ni loco empiezo a estudiar en otro lado a parte de la escuela. — Dijo riéndose. 

—Vos porque sos un bagre, Nico. Pero nosotros no. 

La práctica estuvo insoportable. Sebas y Santi venían cansados por su primer día en la academia. Gracias a Dios ese era el único día que le coincidían las dos cosas o sino iban a morir. Una vez concluido el entrenamiento, Sebas se decidió a encarar el tema que le había estado dando vueltas en la cabeza durante todo el día. No sabía ni por donde empezar.

—Chicos tengo que decirles algo.— Dijo finalmente.

—Yo también. – Agregó Nico.

— Yo también. — Dijo Santi.

—Ah, genial. Nuestras vidas son emocionantes. — Dijo Sebas riéndose.

—Empiecen ustedes. No tengo apuro. — Cedió Santi. 

—Entonces empiezo yo. – Dijo Nico. Sus amigos se quedaron expectantes.—Tengo una vecina nueva que está re... 

—...fuerte. — Agregaron los otros dos.

— ¡Pero déjenme terminar por el amor de Dios! — Dijo Nico enojado.

—¡Ay por el amor de Dios! ¡Se hizo católico de repente! – Se río Sebas imaginándose a la chica toda puritana con una túnica y un rosario.

— Si, seguro que le dijo que iba a una escuela de monjas y por eso este se hace el católico apostólico romano. — La siguió Santi.

—¡No! ¡Peor! ¡Le dijo que era monja entonces este se quiere matar! — Sebas y Santi se revolcaban en el piso. No podían más de la risa.

—¿Me dejan hablar? O no les cuento nada. —Dijo Nico fastidiado. ¿Sería posible hablar enserio alguna vez con alguno de sus amigos? Él también se divertía haciendo bromas con ellos. Pero en momentos como ese le fastidiaba mucho que hagan eso. Necesitaba hablar con alguien.

Nosotras (En correción)Where stories live. Discover now