˚ ༘✶ ⋆。˚ 014.

7.6K 890 192
                                    

˚ ⁀➷

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.

˚ ⁀➷

Acompañé a Mitsuki a buscar información acerca de las personas que habían atacado a Boruto, yo hubiera preferido actuar por mi cuenta, pero al ya causar unos pequeños problemas en aquel callejón he optado por ayudar a los demás y así no levantar sospechas.

—Así que esta es la muchacha de la que nos hablaste, Mitsuki —mencionó un hombre mientras aparecía frente a nosotros—. Ahora entiendo por qué él aceptó tu condición.

—¿Qué haces por aquí, Suigetsu?

—Él no quiere que interfieras —mencionó el señor Suigetsu a lo cual Mitsuki se mostró algo inquieto—. No coloques esa expresión. Ya te imaginarás por qué no quiere que interfieras, ¿verdad?

—Sí, lo sé.

—En todo caso, ¿esas personas se hacen llamar los siete espadachines de la niebla? —decía mientras se cruzaba de brazos y soltaba un suspiro—. Son unos niños que no conocen la guerra.

—Parece que no te agradan demasiado, Suigetsu-san —dije de manera divertida—. ¿Sucedió algo con ellos o con alguno de ellos?

—¿Podrías decirnos cuáles son sus puntos débiles?

—¿Acaso no te he dicho que no intervinieras?

—Si ella piensa actuar en contra de esas personas, debo de ayudarla —mencionó Mitsuki mientras tocaba suavemente mis hombros con sus manos—. No puedo permitir que algo malo le suceda, ¿verdad?

—Tch. Solamente estás sacando provecho de que él quiere conocerla.

—¿Quién quiere conocerme? —pregunté intrigada, a lo cual ninguno me respondió—. ¿Sucede algo?

—No sucede nada.

—Como sea —soltó un suspiro el señor Suigetsu para luego entregarle un pergamino a Mitsuki—. Háganme un favor y golpeen a ese tal Shizuma por mí.

—Sabía que no te agradaban —sonreí, a lo cual él soltó una pequeña risa al ver que había dado en el blanco—. Si las cosas se salen de control. ¿Puedo decir que fue idea tuya?

—¡¿Qué?! ¡Claro que no! —exclamó de manera paranoica—. No pienso tener restricciones nuevamente. Además, ya he tenido suficientes regaños de parte de Karin.

—¿Quién es Karin?

—Más adelante podrás conocerla —me decía Mitsuki mientras sostenía mi mano—. Ahora debemos de ir a ayudar a Boruto.

—Si las cosas salen mal, yo nunca estuve aquí.

Suigetsu desapareció, por lo que con Mitsuki comenzamos a irnos para así ayudar a Boruto en su enfrentamiento contra los que se hacían llamar los siete espadachines de la niebla.

Suigetsu desapareció, por lo que con Mitsuki comenzamos a irnos para así ayudar a Boruto en su enfrentamiento contra los que se hacían llamar los siete espadachines de la niebla

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.

Con Mitsuki habíamos oído como Shizuma intentaba convencer a Boruto de que el Mizukage se había encargado de enviar a matar a las personas que lo estorbaban.

—Él acabó a escondidas con los que no lo apoyaban, sin que nadie se enterara —le decía Shizuma—. Pero nosotros no lo haremos así. No esconderemos nada y mostraremos un futuro correcto.

—¿Ese futuro correcto consiste en pactos secretos y asesinatos? —preguntaba Mitsuki en el momento en que habíamos llegado junto a Boruto.

—Ustedes dos... ¿Cómo han llegado hasta aquí? —nos preguntó con sorpresa Boruto. —Además, ¡¿Por qué andaban juntos a tales horas de la noche?!

—Tenemos un asunto con esta persona. —le dije amablemente y al ver su hombro herido me he sorprendido. —¿Quién te hizo eso, Boruto?

—Eh... pues... —comenzó a balbucear para luego soltar una pequeña risa—. Solo me he herido por accidente.

Sabía perfectamente que me estaba mintiendo, pero preferí dejarlo pasar, ya que, debíamos ocuparnos de otras cosas.

—Dime, ¿sabes qué es esto? —preguntaba Mitsuki mientras sacaba aquel pergamino para mostrárselo a Shizuma, el cual al verlo se ha sorprendido—. Nos lo ha entregado un conocido que suele investigar en el País del Agua y con ello descubrimos cosas interesantes.

—La gente que te apoyaba ya lo confesó todo —le dije—. Y a causa de ello, terminaste asesinando a los que se han interpuesto en tus planes.

—¿De verdad prometías un futuro sin nada que esconder? —le preguntaba mi compañero de cuarto—. Bueno, a mí me da igual.

Ante nuestras palabras, Kagura comenzó a pedirle explicaciones a Shizuma, pero al ver como él comenzaba a reír de manera siniestra se quedó inmóvil en su lugar.

—No te pongas así. Todo esto es para comenzar la guerra.

—¿Por qué quieres tanto que haya una guerra? —pregunté, mirándolo fijamente, sin expresión alguna—. No logro entenderlo.

—Piénsalo. Tus amigos que estaban ayer jugando contigo al instante se están matando entre ellos —me explicaba con una sonrisa de malicia—. No hay nada mejor, ¿verdad?

—Si quieres una guerra, hazlo tú solo —decía Boruto muy malhumorado—. ¡No involucres a los demás!

—Ya es tarde. Ustedes serán mis primeras víctimas y de paso me llevaré esos ojos que lo pueden ver todo —decía mientras me miraba fijamente, causando así que Mitsuki y Boruto se colocaron frente a mí en modo defensa—. Eh. Tienes dos guardaespaldas, pero es una lástima que no podrán serte de mucha ayuda.

—Yo confío en ellos —le dije mientras miraba a mis compañeros con una sonrisa para luego activar mi Byakugan—. Pero no pienso quedarme quieta viendo cómo me protegen.

Shizuma había causado que la niebla que nos rodeaba se tiñera de un color rojizo para luego dar paso a atacarnos con las intenciones de matarnos y así llevarse mis ojos. Nosotros comenzamos a pelear mientras nos ayudábamos mutuamente a tal punto que combinábamos nuestros ataques.

Los chicos me dieron paso para que pudiera atacarlo con mi byakugan en el momento en que Shizuma se encontraba distraído, pero cuando me he acercado he visto como de su espada comenzaba a esparcir un gran chakra y si no fuera por Mitsuki hubiera sufrido graves consecuencias.

—¿Te encuentras bien? —me preguntó a lo cual he asentido y he visto fijamente la espada de Shizuma—. Al parecer nuestros ataques no sirven de nada contra su espada.

—Así es —nos afirmaba Shizuma mientras nos miraba orgullosamente—. Puedo consumir chakra con mi Samehada. Con la Samehada y esta niebla, soy invencible.

Yo conocía un método de vencerlo, pero de hacerlo estaría arriesgándome a que me descubrieran y no podía dejar que eso sucediera, no cuando nuestro plan estaba pronto a comenzar.

∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙

∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.
CHILDREN OF THE MOON; Uzumaki Boruto.Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum