CHILDREN OF THE MOON; Uzumaki Boruto.

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Nuestro profesor nos explicaba algo acerca de una excursión que se llevaría a cabo en el país del agua. Todos al oír aquello comenzaron a hacer planes con sus amigos, en cambio, yo me quedé pensando sobre cuanto poder habría en ese lugar.

—¿Y bien? ¿Alguien quiere ser el representante?

Absolutamente nadie había levantado su mano o dicho que quería encargarse de la excursión, ya que, nadie estaba interesado en ganarse problemas por los demás.

—Profesor. Creo que Uzumaki Boruto sería el candidato perfecto —mencionó Sarada provocando así que el nombrado se alterara, pero al estar amarrado debido a una broma que hizo, no pudo negarse—. Boruto es optimista y animado, siempre está en el centro de todo.

Y así, con una decisión unánime, y sin que Boruto pueda negarse, él quedó como el encargado de la excursión de mañana.

Todos habíamos formado una fila al momento de llegar a la aldea oculta de la niebla para así esperar a nuestro guía.

—Bienvenidos a la Aldea oculta de la niebla —habló una voz masculina mientras aparecía frente a nosotros—. Me llamo Karatachi Kagura y seré su guía.

Aquel muchacho realizó una pequeña reverencia, provocando así que las chicas de la clase comenzaran a gritar de la emoción.

—Por fuera es muy apuesto, pero, ¿cómo será por dentro? —se preguntaba ChouChou para luego verme con una sonrisa—. ¿Puedes decirme como es por dentro, Tsukiko?

Antes de que pudiera activar mi byakugan me han tapado los ojos, aunque sabía que eso no serviría de nada debido a que mis ojos lo pueden ver todo y que me taparan los ojos no lo impediría.

—¿Acaso olvidaste que puede ver a través de ti? —le preguntó Shikadai a Boruto, el cual quitó sus manos de mis ojos y me vio algo inquieto—. Además, ¿por qué has hecho eso?

—¡Solo fue un impulso! ¡No tiene nada que ver con que me sentía celo...!

Boruto inmediatamente tapó su boca dejando sus palabras al aire a lo cual lo miré con la cabeza ladeada debido a que no comprendía muy bien su actitud de ese momento.

—No le prestes atención a ese tonto, Tsukiko —me decía Sarada mientras me alejaba de los chicos—. Vendrás con nosotras en esta excursión.

—¿Por qué? -pregunté de manera inocente mientras la miraba, ella miró de reojo a Boruto por unos segundos para luego tocar sus lentes—. ¿Por qué no puedo ir con ellos?

—Porque... —Sarada se quedó pensando en alguna respuesta y en cuanto la supo me miró con una sonrisa de orgullo—. Porque si te sigues juntado con Boruto te meterás en demasiados problemas y no quieres que eso suceda, ¿verdad?

—La verdad me da igual. -respondí con una sonrisa provocando que ella me viera desconcertada—. Me divierto mucho con Boruto y los demás.

—Con nosotras te divertirás más, ¿verdad, ChouChou?

—¿Eh? ¿De qué hablan? -preguntó desinteresada ChouChou mientras miraba fijamente a Kagura—. Quisiera saber cómo es por dentro.

En el momento en que Kagura nos mostró parte de la aldea oculta de la niebla me he alejado de los demás para así investigar por mi cuenta y mientras caminaba he visto como Iwabee ingresaba a un callejón, por lo que comencé a seguirlo discretamente.

—¿Por qué estás siguiéndome?

—Eh. Así que notaste que lo hacía. -sonreí para así verlo fijamente—. ¿Por qué te has alejado?

—Podría preguntarte lo mismo.

—Solo quería saber más sobre esta aldea.

—Pues no te dejes engañar por estos edificios bonitos y sus atracciones —me ha dicho seriamente—. Esta es una aldea muy cruel. Ellos esconden un pasado asqueroso.

—¿Qué más sabes de esta aldea, Iwabee?

Antes de que pudiera responderme hemos oído la voz de Boruto junto a Denki, ambos nos pedían que no nos alejáramos tanto por nuestra cuenta o de lo contrario podríamos perdernos.

En ese mismo momento una persona había aparecido empujando apropósito a Boruto, y aquello me había hecho molestar que iba a acercarme a enfrentarlo debido a que esparcía un chakra siniestro, pero antes de que pudiera hacer algo he sido apartada por Iwabee.

—Lo has empujado apropósito, ¿verdad?

—Y si lo hice, ¿qué? -preguntó con seriedad aquel muchacho—. Solo son unos mocosos de Konoha vagando por nuestra isla.

—¿Cómo saben que somos de Konoha?

La pregunta de Boruto causó que aquel muchacho nos mirara con desprecio mientras nos decía que era fácil reconocernos por la cara de presumidos que manteníamos.

—¿De verdad tengo una cara de presumida? -le pregunté a Denki el cual negó rápidamente—. ¿Y por qué esa persona dice eso?

—Cierra la boca niña tonta.

—¡No le hables de esa forma! —gritó Boruto mientras miraba de manera amenazante a aquel muchacho de la niebla—. Creí que esta aldea era buena, pero veo que me he equivocado.

—¿Qué has dicho niño imbécil?

Las palabras de Boruto lo habían provocado que incluso lo atacó, pero el Uzumaki había realizado un clon de sombra para luego atacarlo por la espada. Aunque no sirvió de mucho debido a que el chico de la niebla se había protegido sin problema.

—No te metas con unos simples niños, Hassaku.

—Tch. Tenías que llegar, Shizuma.

—Uzumaki Boruto. El hijo del séptimo Hokage, ¿eh? —mencionó con una sonrisa perversa aquel compañero de Hassaku al momento de acercarse a Boruto de manera veloz—. Qué buena actitud la de enfrentarte a Hassaku sin retroceder.

—Aléjate de Boruto. —he dicho seriamente mientras me encaminaba hasta él—. No lo volveré a pedir.

—Byakugan. Tienes unos lindos ojos contigo —me dijo al momento en que se alejaba para luego ver mi frente y así sonreír de manera perversa—. Intenta no perderte en este viaje.

Shizuma junto a Hassaku se habían ido dejándonos así a todos algo inquietos con la situación. Yo me quedé pensando en las palabras de aquel muchacho y en cómo había visto mi frente como buscando algo.

¿Qué ha querido decirme?

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